Mi gato es techero
Unos más que otros, pero lo cierto es que tanto el gato como la gata son independientes, gustan de salir a la calle y trepar los techos de las casas, de allí que los conocemos como “techeros”. A veces desaparecen más de un día y preocupan a sus dueños con estas ausencias prolongadas hasta que al final regresan a casa.
El macho sale a la calle por dos razones: para buscar gatas y pisarlas; o para pelear con otros felinos y dejar el mensaje de “yo soy el que manda” pues no permite que otro ingrese en su medio. Él domina a todo el barrio y mientras más peleas, más experto es. La hembra por su parte, lo hace cuando está en celo y busca aparearse.
Cuando usted desde la comodidad de su hogar escucha los maullidos ensordecedores de estos animalitos puede ser porque se ha producido el apareamiento. Y si se pregunta por qué parecen quejas de dolor, aquí se lo explicamos: cuando el gato pisa a la gata se monta tras ella y la fija mordiéndole el cuello. Esto lo hace porque tiene una especie de pequeñas espinas en su pene y una vez que lo retira de la vagina, lastima los tejidos del sistema reproductor de la hembra. Al tenerla del cuello, tiene la opción de escapar con más facilidad, se irá corriendo y ella lo perseguirá para vengarse del dolor que le ha producido. Si lo alcanza, él regresará magullado a su hogar.
Las peleas con otros machos también les ocasionan heridas, que pueden ser serias.
Lo cierto es que los mininos regresan a casa, al lado de sus respectivos dueños, cuando están totalmente heridos y necesitan que los curen. Una vez sanos volverán a las andadas.
Y usted, ¿tiene un gatito que gusta de las escapadas?