¿Podremos trabajar juntos?
Publicado en el diario El Comercio, el 02/02/2020
Si estamos viendo de contratarte, de tomar tus servicios profesionales, de invitarte a formar parte de una organización, de un equipo, comité o directorio, es decir, si te estamos entrevistando, conociendo o evaluando, queremos saber, antes que nada, si podremos o no, realmente, confiar en ti.
Antes de conversar más sobre tus habilidades, conocimientos, experiencia, logros, resultados o estudios académicos, queremos saber si siempre actuarás con corrección. Es muy importante saber que tu conducta tiene una línea clara y no confundes el bien y el mal. Queremos saber si tratarás de ser siempre correcto, íntegro, auténtico y transparente; si sabes decir la verdad, aunque luego tengas que enfrentar las consecuencias que decirla a veces trae y si estás dispuesto a jugarte por ella.
Queremos saber si sabrás ser leal a nosotros, a la organización, a nuestra gente y a nuestros valores y propósito. Saber si jugarás limpio siempre, cuidarás de nuestros asuntos confidenciales, respetarás nuestro conocimiento, honrarás nuestras buenas prácticas. Y, sobre todo, queremos saber si sabrás distinguir lo correcto de lo incorrecto, lo leal de lo desleal, lo ético de lo no ético.
Queremos saber si serás honesto y maduro para asumir responsabilidad por tus errores y, enmendar sus consecuencias. Si tus valores son auténticos y, son los mismos en tu vida personal y de trabajo, en tu vida real y tu actuar en línea. Si tus principios, valores y, por ende, tu reputación y prestigio que de ellos devienen, son para ti más importantes que cualquier ganancia rápida, dinero fácil o ventaja impropia
Necesitamos saber si podrás reconocer y evitar potenciales conflictos de interés, y, que comprenderás cómo éstos atentan contra nuestros valores y principios y por supuesto, contra nuestra reputación, nuestro bien ganado prestigio y la continuidad de nuestra organización.
Queremos saber que jamás pensarías en sobornar a autoridades, clientes, usuarios, personas o proveedores para ganar una cuenta, un negocio o algo de cash adicional. Y saber que no lo harías jamás porque no está en tu ADN ser corrupto o corruptor.
Queremos saber si no mentirías ni engañarías para lograr ventajas injustas ni tampoco para acelerar procesos justos. Que no contratarías con quienes cortan esquinas éticas o se burlan de los conflictos de interés. Queremos saber que no tratarías de confundir a los clientes o al mercado con inexistentes similitudes entre servicios o productos de mejor calidad u origen, ni manipularías la data o la información a tu antojo o beneficio.
Y por supuesto también queremos saber si serás respetuoso y tolerante con las diferencias entre personas, pero que lo que jamás tolerarás en nadie es la falta de ética o de valores, al igual que no la toleramos nosotros. Y es que, como todos, queremos poder interactuar con personas correctas que saben que el verdadero éxito, de esos que trascienden en el tiempo, viene fundamentalmente de tener una ética inquebrantable. Por eso queremos saber, antes que nada, si podremos confiar en ti.