Las claves para diseñar un baño compartido

Un aspecto que debe primar cuando dos personas comparten un baño es la comodidad. En un área de 3 m x 3 m es posible acondicionar dos lavabos sobre un tablero de 2,20 m de largo y también colocar los implementos necesarios para asearse. “Cada usuario requiere de un área de 70 cm en la zona de lavado, para moverse con libertad”, indica la arquitecta Liliana Márquez.

También es factible acondicionar lavabos en dos muros enfrentados. La arquitecta Johanna Tresierra señala que se requiere de un espacio 1,20 m como mínimo para que dos personas puedan transitar por el centro. Para aligerar la apariencia del baño, opta por encimeras o muebles flotantes e idénticos, a fin de mantener la armonía.

AMBIENTES FUNCIONALES
Otra zona que puede ser compartida es la ducha. Para ello es necesario un área de 1 m de ancho x 1,20 m de largo. Además, instala dos salidas de agua independientes o una ducha de doble cabezal (una montada en la pared y la otra de uso libre).

Es básico mantener el orden y evitar que el baño luzca recargado. Acondiciona un mueble con cajones abiertos y cerrados de 60 cm de profundidad, para que los usuarios guarden sus artículos de aseo por separado. Además, “inclínate por un espejo de pared a pared, para que pueda usarse al mismo tiempo sin inconvenientes. Otra opción es apostar por  espejos gemelos”, resalta la diseñadora de interiores Romi Estrada.

Para lograr armonía visual, procura que los accesorios (jabonera, percheros, toalleros, portacepillos, espejos de mesa) así como los organizadores y la grifería de cada uno sean del mismo estilo y tonalidad. Añade pinceladas de color en los textiles, como las toallas, alfombras y salidas de baño.