Un doblete de Joselu llevó al Real Madrid este miércoles a la final de la Champions, tras remontar y ganar 2-1 sobre la campana al Bayern de Múnich en la vuelta de semifinales del máximo torneo europeo. Sin embargo, el duelo terminó con una polémica.
En la última jugada, Matthijs de Ligt remató dentro del área y anotó el tanto del empate. Sin embargo, segundos antes se había escuchado el silbato del árbitro, quien guiado por el juez de línea, marcó el fuera de juego. Las cámaras mostraron la jugada y no quedó clara la existencia de la posición adelantada.