Para nadie fue sorpresa lo que se veía en el minuto 36 de juego. El Real Madrid daba el primer golpe con el tanto de Vinícius cuando el Manchester City era el dominador total del partido. El cuadro blanco tiene un camino directo al gol, mientras que los celestes apuestas por la paciencia hasta encontrar el objetivo.
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Fue 1-1 en el Bernabéu, en un partido en el que el Real Madrid fue quien más quiso ganarlo con esa verticalidad que lo caracteriza y con un Vinícius nuevamente en una noche europea con todas las luces sobre él. Pero fue el City el que parecía llevarse el partido por arrastre, ya que se hizo dueño del campo en la primera media hora de juego, hasta que se topó con lo que significa el Real.
Contragolpe letal y golazo de Vinícius a los 36 minutos para una nueva muestra de que al Real Madrid le da igual si juega más con la pelota o con los espacios. Un resultado que mostraba lo noqueador que es el cuadro de Ancelotti, que con una pegada puede dejar KO a su rival.
Y así llegó el tanto y sus opciones. Salida veloz entre Modric y Camavinga para que Vini marque con un zapatazo. Así llegaron las opciones para Valverde, Tchouameni y Benzema.
Y el City es más bailador dentro del ring. Mientras no le pegues, se mueve de aquí a allá en busca del momento en que el contrario baje la guardia, como el error en salida de Camavinga para que De Bruyne iguale con un gran disparo desde el borde del área.
Figuras Rudiger controlando a un poco activo Haaland (solo tocó la pelota 22 veces, siete de ellas en campo contrario), Vinícius liderando cada ataque del Real y Rodri, siendo quien controla el mediocampo ante el bajo nivel de Gundogan.
Ancelotti manda
Y se vuelve a señalar al City por su juego de posesión. Tenía el 69% de control cuando llegó el tanto del Real Madrid. Los ingleses tenían ya 6 remates y cuatro de ellos al arco sin acierto. El Real en la primera ya celebraba.
Y de inmediato se recordó lo que hizo el City en su serie ante el Bayern, cuando le dio el control del balón a los alemanes para matarlos al contragolpe. En el 3-0 en Inglaterra el cuadro de Guardiola apenas llegó al 44% de posesión. Y en el 1-1 en Alemania fue de 42% y le dio para ponerse adelante del marcador.
Esta vez erró el camino, ya que se hizo duelo del balón o el Real Madrid se lo entregó, para que los españoles defiendan en bloque sin dejar espacios para que la dupla De Bruyne-Haaland encuentren espacios para hacer daño.
Y ahí es cuando Ancelotti le gana el duelo a Guardiola, ya que el técnico italiano planteó un partido para jugarlo sin dejar campo abierto para sus rivales. La experiencia del italiano se impuso esta vez, pese al 1-1 del resultado.
Pese a la posesión final del City (56%) y el empate que deja la serie abierta para definirse en Etihad Stadium de Manchester el próximo miércoles, el partido se jugó más como lo quiso Ancelotti que la apuesta de Guardiola. Y Pep no quiso arriesgar más, por eso no hizo cambios.
Así se sentencia esta primera parte de la semifinal de Champions. Un Real Madrid que vuelve a demostrar su pegada brutal y un Manchester City que con su juego tan adelantado aprovecha cada error que le conceden.
“Hay que felicitar al equipo porque no era fácil contra este equipo, en este escenario. Empezamos el partido muy bien y cuando estábamos mejor marcaron y cuando fueron mejores que nosotros, marcamos”
Pep Guardiola, técnico del City
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