Aun cuando Bomba Estéreo le debe su fama mundial al fútbol –específicamente al simulador virtual FIFA 2010, que incluyó su hit "Fuego" en su 'soundtrack'–, Simón Mejía, líder de la banda de cumbia electrónica, afirma que no le gusta ese deporte. Tanto es así que ni vio el decisivo partido de clasificación para el Mundial de Rusia 2018 entre Colombia, su país, y Perú.
Pero, actualmente, Mejía tiene una buena excusa para no prestarle atención al deporte rey. Él está concentrado en la gira de promoción de "Ayo", el último disco de Bomba Estéreo, y en ser teloneros de Arcade Fire, banda canadiense con quienes se presentará en el Parque de la Exposición el 13 diciembre en Lima. "Su cantante nos vio en un festival en Canadá hace cuatro años y se hizo fan de la banda", afirma el músico cafetero.
— "Ayo" parece regresar a los sonidos del primer disco de Bomba Estéreo.
Fue inconsciente. A veces, cuando uno empieza a hacer música, pierde el control y esta te lleva, te guía y te dice cosas que quiere que sucedan. Ahora bien, nosotros creemos que Bomba Estéreo tiene un sonido marcado, por lo que procuramos hacer discos distintos, no repetir la misma fórmula y generar un color diferente.
— En los últimos años, el gusto del público latinoamericano se ha orientado a las propuestas musicales que rescatan su folclor. ¿A qué crees que se deba?
Es una manera de afianzar de dónde venimos, que se soporta en un sentimiento de pertenencia. Latinoamérica siempre ha tenido un problema a nivel cultural, que es querer copiar todo lo que viene de afuera, pero ahora hay muchas bandas que tienen un sonido más local.
— ¿A qué atribuyes el rechazo que países como el Perú o Colombia, en ocasiones, pueden sentir con su folclor y música tradicional?
Pienso que eso viene desde la Colonia, que trajo la idea de que todo aquello que era negro, africano o indígena estaba mal y era de menor categoría. Así nos desarrollamos como país y continente, creyendo que lo blanco es mejor. Eso afectó a la música, pues lo que venía de EE.UU. o Europa se consideraba mejor. Pero poco a poco, esos estigmas sobre el folclor se han ido venciendo. Ahora los músicos proponemos un acercamiento más universal a nuestras raíces; es decir, no ser completamente indígenas, sino mezclar nuestro origen con el lenguaje con el que crecimos y que llega desde afuera.
— ¿Crees que esto también tenga que ver con el rechazo hacia el reguetón?
Creo que es interesante reflexionar sobre el reguetón porque se ha vuelto un fenómeno mundial. No por nada hay tanta fuerza en esa música que viene del caribe, que se generó a partir de las mezclas y cuyo ritmo y música hacen que bailarlo sea una delicia. Considero que el rechazo viene a partir de la lírica. Sus letras son repetitivas, ofensivas y sexistas y a mucha gente le molesta eso. Algunos jóvenes dicen “pero en el rock también canta sobre sexo y drogas”, y es verdad, pero no solo sobre eso, hay más temáticas. A mi modo de ver, lo que dice el reguetón no es tan interesante ni constructivo. Hay más cosas de que hablar que de tetas, culos y sexo.
— ¿La música tiene que ser constructiva?
No, pero hay artistas que están evolucionando. Sino mira a Calle 13, que fue uno de los primeros en hacer ese género o a J. Balvin, quien también tiene cosas interesantes. Sin duda, el reguetón es la música más fuerte de todo el mundo.
—¿Cómo explicas el éxito de Bomba Estéreo en Asia?
Hay varios motivos. A uno le puede gustar la música de India o Japón porque es totalmente diferente a lo que está acostumbrado, por lo exótica. Además, la música tiene el elemento del baile, que es muy fuerte y fluye como un idioma universal que conecta a las personas. Por eso hay ritmos latinos que se han vuelto universales como la salsa, el reggae, el reguetón o la cumbia.
— Además que bailar es un pulso natural para los humanos
Sí, es algo ancestral, solo que hoy en día se baila en las fiestas, discotecas y festivales, pero el ser humano lleva bailando desde muchos siglos atrás de manera ritual y así se mantendrá. Es una suerte de catarsis cultural que necesitamos los seres humanos. Tenemos que liberarnos del peso de la vida diaria.
Más información
Día del concierto: 13 de diciembre. Lugar: Parque de la Exposición. Dirección: avenida 28 de Julio s/n, Lima. Entradas: Teleticket.