En el habla familiar del Perú, Bolivia y Chile, esta locución verbal (pronunciada normalmente estar pa’l gato) significa ‘estar en malas condiciones’, ‘estar débil o enfermo’, referida generalmente a personas. Otras expresiones americanas equivalentes son estar para el perro (que en Bolivia alterna con estar para el gato) y estar para el tigre, usada en Guatemala. El lexicógrafo Miguel Ángel Ugarte consigna estar para el gato con una menos conocida acepción que se refiere también a actividad o cosa: “que no merece atención por inútil o por haber perdido importancia”.