Lo más probable es que al escuchar la palabra ‘murciélago’ inmediatamente uno piense en plagas, sangre o incluso en enfermedades. Existe mucha desinformación, así como prejuicios, en torno a este pequeño mamífero volador.
Para cambiar esa percepción y conocer más sobre las poblaciones de murciélagos que viven en las zonas urbanas de Lima (distribución, zonas de alimentación, de tránsito y de refugio), un equipo de jóvenes especialistas ha lanzado el proyecto Detectives Nocturnos.
–Percepción negativa–
Las creencias erróneas sobre los murciélagos –como aquella que dice que se alimentan solo de sangre– no solo le dan a este animal una mala imagen, sino también hacen que el ser humano deprede sus hábitats, destruya sus refugios y haga que se desplace.
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Si bien es cierto que existen murciélagos que consumen sangre (vampiros), se trata solo de tres especies, que habitan zonas rurales, donde pueden alimentarse del ganado. En las áreas urbanas, los murciélagos consumen insectos, néctar y frutas.
Respecto a las enfermedades, este animal es un transmisor de la rabia. Sin embargo, en el Perú estos casos se centran en zonas de sierra y de selva, como Cajamarca o Amazonas. Además, solo una de las especies de murciélago vampiro es la que usualmente se vincula a los contagios de rabia.
Y si hablamos de sus beneficios, observaremos que son más de lo que uno suele pensar: polinizan las plantas, esparcen las semillas y controlan las plagas de insectos. Asimismo, han servido de inspiración para el desarrollo de dispositivos de navegación para invidentes.
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–Cerca de casa–
El proyecto Detectives Nocturnos es desarrollado por la organización Ciencia Ciudadana Perú. La iniciativa no solo destaca por sus objetivos, sino también porque el público en general puede participar en el proceso de recolección de datos, a través de dos metodologías.
La primera consiste en colocar en casa, y por tres días, detectores acústicos, los cuales son entregados por la organización. La segunda se basa en observaciones oportunistas; es decir, fotos y videos.
En la versión piloto del proyecto, se contó con unos 67 voluntarios. Se analizaron puntos ubicados en distritos como Miraflores, Comas, San Isidro, San Borja, Chorrillos, Jesús María, La Molina, Lince, Barranco.
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“De 32 sitios analizados, tenemos registros de detección de murciélagos en unos 30. Por casi todos los puntos monitoreados pasan murciélagos, ya sea desplazándose o alimentándose”, dijo a El Comercio Jaime Pacheco, especialista en bioacústica de murciélagos e investigador del proyecto.
En total, se identificaron 11 especies, la mayoría insectívora, y dos refugios de murciélagos, uno en un condominio cerca de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y otro en un condominio en Santiago de Surco.
Amanda Vilchez, bióloga y presidenta de Ciencia Ciudadana Perú, indica que ya está abierta la convocatoria para aquellos que quieran participar en Detectives Nocturnos y expresa su deseo de expandir este proyecto a otras partes del Perú.
–Para tener en cuenta–
- Solo las personas en Lima pueden participar en el proyecto usando detectores acústicos. Los registros de fotos y videos de murciélagos pueden ser enviados de cualquier parte del Perú.
- Los interesados pueden obtener mayor información a través de las redes sociales de Ciencia Ciudadana Perú.
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