Bruno Ortiz Bisso

En El Comercio continuamos con nuestra serie de entrevistas a personajes relevantes de la . El extracto presentado a continuación forma parte de la nueva serie de podcast “”, en donde buscaremos conocer lo que hay detrás de los científicos, investigadores y expertos peruanos.

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Se dedica a usar telescopios para obtener datos del universo y hacer sus investigaciones. Mientras culmina su doctorado en astronomía en la Universidad de Chile, Carla Arce Tord usa las redes sociales para hacer divulgación.


Lo que busca es que se conozcan más la astrofísica y las ciencias exactas, pero también que se visibilice su disciplina no solo como opción profesional sino para demostrar su utilidad en una sociedad como la peruana. Conversó con El Comercio sobre la pandemia y el futuro inmediato de la en el país.

¿Cómo evalúas la respuesta de la ciencia peruana a la pandemia?

Lo que ha quedado claro es que nos falta siempre la visión a largo plazo. A raíz de la pandemia se empezó a notar que ciertas áreas de la son muy importantes para casos como estos: la biología, la bioquímica, la medicina, la infectología y muchas otras más. Si estas hubieran recibido inversión en el pasado, seguro que se hubiera cuestionado ese financiamiento porque no se les ve la utilidad en el momento. Se olvidan que a futuro la ciencia siempre sirve. Esto es algo muy importante que nos está dejando la pandemia: la necesidad de invertir en ciencia, pero con una visión a futuro, sino nos va a pasar como ahora que nos agarró desprevenidos.

“Hay que ver menos televisión y leer más las propuestas de los diferentes candidatos”


¿Cómo ves el desarrollo inmediato de nuestra ciencia, teniendo en cuenta que en pocos meses habrá cambio de Gobierno?

Quiero rescatar ciertas cosas: que si bien los debates en aún no son tan profundos, especializados ni detallados como deberían, al menos se está empezando a hablar de ciencia en la campaña política. Ese es un primer paso, que hace unos años sería impensado. Rescato también que algunos científicos y científicas se están involucrando en el ámbito político, ya sea compitiendo por lograr una representación en el Congreso o solo compartiendo públicamente sus opiniones. Eso es super valioso, porque necesitamos diversidad de opiniones en la política. Pero, quitando esto, seguimos en pañales. Si bien nuestros candidatos tienen propuestas, en algunos casos bien intencionadas, falta más asesoría, más profundidad, más conocimiento. Veo que la visión que se sigue teniendo de un científico es de la persona con bata blanca en el laboratorio mirando por un microscopio. Obviamente, los políticos no tienen por qué conocer a detalle los temas científicos, pero deberían convocar a una mayor capacitación de los especialistas para tener esta asesoría que, además, daría paso a la visibilización y a mejores propuestas.

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¿Qué hace falta para mejorar la situación de la ciencia peruana?

Las políticas púbicas enfocadas a la inversión en ciencia deberían buscar asesoría no solo en científicos particulares sino también alianzas con instituciones nacionales, tanto públicas como privadas, así como universidades de todo el país. De esa manera, se tomaría en cuenta una mayor diversidad de opiniones y el financiamiento iría a diversas instituciones. En el caso de Chile, allá el Estado ofrece financiamiento a proyectos presentados tanto por científicos particulares como por instituciones, y en todas las áreas de la , desde las exactas hasta las aplicadas. Además, hay que dialogar con instituciones de todo el país, porque así se conseguirían diversas perspectivas, ya que muchos profesionales que trabajan para estas instituciones, probablemente, han estudiado afuera y tienen distintas visiones. Eso sería muy enriquecedor.


¿Qué recomendarías para elegir la propuesta más favorable para la ciencia?

Hay que ver menos televisión y leer más las propuestas de los diferentes candidatos. Entiendo que estas pueden parecer pesadas y tediosas, pero tenemos la suerte que hay más participación en las redes de científicos y científicas, de politólogos y otros profesionales, y se pueden usar esos espacios para preguntar, para opinar y para contrastar con las opiniones de los demás. Hay que dejar de hacerle caso a las palabras bonitas y concentrarnos en las propuestas de fondo. En el caso de los temas de y tecnología, hay que partir por la lectura de las propuestas.


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