El pasado 15 de marzo de 2020, cuando el presidente Martín Vizcarra anunció la cuarentena obligatoria en el Perú, no solo cientos de personas se quedaron sin la posibilidad de regresar a casa, sino también varias mascotas se vieron imposibilitadas de salir del país, lo que representó todo un reto para Melisa Grisolle, fundadora de PetWings.
“Aproximadamente 7 perros salían de viaje la semana siguiente. Al principio pensamos que todo se atrasaría unas semanas, pero pronto nos dimos cuenta que el tema tenía para rato”, recuerda Grisolle.
Si bien al inicio PetWings pausó sus operaciones, al poco tiempo la empresa retomó el “vuelo” y encontró nuevas alternativas para continuar con la meta que se propusieron hace 12 años, cuando se convirtieron en la primera empresa peruana en brindar servicio logístico de transporte y reubicación de mascotas.
¿Cómo empezó PetWings?
Antes de fundar PetWings, trabajaba en el laboratorio PatoVet. En una oportunidad, una pareja de españoles se presentó para realizar una prueba de sangre que les permitiera llevar a sus mascotas a España. No sabía en qué consistía el trámite, pero los ayudé. Poco a poco, empezaron a contactarme más clientes y así fue como me especialicé en esto.
¿Qué servicios ofrece PetWings?
Tenemos dos áreas de servicio: transporte (nos encargamos de transportar a mascotas que no pueden viajar con sus dueños) y documentación (trámites sanitarios y documentarios para que una mascota pueda viajar a cualquier parte del mundo). En paralelo, realizamos servicios de hospedaje, veterinarios, entre otros.
¿En qué consiste el servicio de hospedaje?
Hay trámites de viaje que demoran más que otros. Y hay casos en donde los dueños deben viajar antes que sus mascotas. Por eso abrimos un hospedaje propio: con la intención de alojar a las mascotas que están esperando que su documentación esté lista para reencontrarse con sus familias.
¿Qué representó la pandemia para ustedes?
El día en que Vizcarra confirmó la cuarentena, teníamos aproximadamente siete perros que estaban a punto de viajar. Al principio, no logramos transportar a ningún animal. Todo el equipo estuvo en casa con los brazos cruzados. Hasta que comenzamos a tener clientes que iban a viajar en vuelos humanitarios y empezamos a movernos más.
Eso sí: todo cambió y tuvimos que aprender desde cero, ya que empezamos a trabajar con nuevas aerolíneas, nuevas rutas y nuevas restricciones. Pasamos de ser expertos en el tema a “tener pañales” otra vez.
A raíz del coronavirus, ¿hay trámites nuevos?
En cuanto a requisitos sanitarios, no ha habido ningún cambio porque está demostrado que las mascotas no transmiten el virus. El problema es que hay aerolíneas que ya no transportan animales porque los vuelos hoy son muy cambiantes. Existen muchas posibilidades de que se cancelen y llevar animales representa un alto riesgo para la mayoría de aerolíneas comerciales. Por eso, empezamos a trabajar con aerolíneas de carga.
¿Cuál ha sido el caso más complicado que les ha tocado afrontar en esta pandemia?
Tuvimos un caso muy particular: una señora que se iba al Reino Unido por trabajo, y el vuelo le salió de la noche a la mañana. Su perrita no había iniciado los trámites e iban a demorar tres meses. Fue muy doloroso para ella dejar a Sasha. Estaba muy angustiada porque era cachorra.
Felizmente, Sasha se quedó con mis papás. Si bien la dueña se fue angustiada, conforme fue viendo los videos y fotos de su perrita, se tranquilizó. Se reencontraron en Inglaterra tres meses después y todo salió perfecto. De eso se trata nuestro servicio: de buscar opciones. Por eso le digo a mis clientes, “siempre hay una opción, aunque sea barata, cara o difícil”.
Hoy en día, ¿cuál es el país con el trámite más difícil?
Australia. El trámite demora 6 meses. De los cuales 5 meses deben ser en el Perú y 1 mes en un país específico que determine Australia. También está Hong Kong: una mascota llega y debe pasar cuatro meses de cuarentena en una entidad específica y no con una familia.
¿Todos los perros pueden viajar por avión a otro país?
Las razas braquicéfalas son más difíciles, pero las hemos podido transportar por el mundo. Varias aerolíneas no lo permiten, pero al final siempre hay una opción.
¿Alguna vez han recomendado que un perro no viaje?
Sí, un bulldog con un problema cardíaco muy fuerte. Le recomendamos a la familia que no viaje porque podría tener consecuencias fatales para su salud. Tenemos protocolos muy establecidos en la empresa para no perjudicar a ninguna mascota.
Hoy en día, ¿consideras que existe más demanda para el servicio de transporte de mascotas que hace 12 años?
Sí, la demanda ha crecido muchísimo. No he visto un solo cliente que va transportar a su mascota como si fuera una maleta. El cliente que llega a nuestra puerta invierte dinero porque es su hijo. Las mascotas no son un anexo al jardín: son miembros de una familia.
Sobre las restricciones, ¿han disminuido en todo este tiempo?
Hubiera sido lo ideal, pero antes la gente llevaba a sus animales de viaje sin contar con un profesional que los asesore, lo cual generó muchas muertes y problemas. Por eso, las aerolíneas empezaron a tener más restricciones para los viajes con mascotas. Nuestra labor es revertir eso: que sea cada vez más fácil mover a los animalitos. Nuestra finalidad, antes que todo, es mantener a las familias unidas.
¿Qué los motivó a tener una alianza con WUF?
Comenzamos con WUF desde el principio, cuando WUF recién nació y yo tenía el laboratorio. Desde ahí nos involucramos con WUF: íbamos a recoger a los perros a los albergues y hacíamos la entrega de los animales en el laboratorio. Ahora tenemos esta alianza con Club WUF y esperamos que siga creciendo. Estamos muy comprometidos con todos los casos sociales que involucren a las mascotas.
PetWings es una empresa peruana afiliada a Club WUF, una comunidad creada por WUF que ofrece una serie de beneficios en productos y servicios para mascotas. ¡Afíliate hoy y accede a descuentos exclusivos!