Carlos Lazaro

El 20 de diciembre del 2020, Renzo Revoredo se despedía de Sporting Cristal con un título nacional —la última estrella del club—, sin saber, que años más tarde, por cosas del destino, volvería al lugar donde se forjó como futbolista. Ni el hincha celeste, ni él mismo imaginó pegar la vuelta a La Florida para laborar, claro que ya no como jugador; ahora como formador. Precisamente, la nueva faceta de Revoredo, quien se retiró a fines del 2022 con la camiseta de Sport Boys, se ha dado a conocer en las últimas semanas por la gran participación de la Sub 17 de la ‘SC’ en la Copa Mitad del Mundo, el campeonato Sub 18 más importante de Latinoamérica que se lleva a cabo anualmente en Ecuador y en donde estuvo cerca de alcanzar la gloria.

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Los triunfos sobre Fluminense, primero en fase de grupos (3-2), luego en las semifinales (4-3); además, de eliminar en cuartos de final al anfitrión del certamen, Independiente de Valle (en los penales) han dejado claro que el proyecto deportivo por el que está apostando el conjunto rimense va por buen camino. Precisamente, el exjugador bajopontino y de la selección peruana nos brinda más detalles del ‘Método Celeste’, la metodología con la que se está trabajando en las canteras celestes con el objetivo de que los mejores valores, sin importar su corta edad, puedan debutar en el equipo profesional como ha sucedido con Maxloren Castro, quien con 16 años registra nueve partidos esta temporada y un gol.

“Hay una línea de carrera clara, como se ve en cualquiera empresa, y si haces bien, hay un ascenso constante y el club trata de acelerarlo, por así decir, para que los chicos experimenten mayor ritmo, mayor competencia y estén más preparados para llegar al primer equipo”, adelanta Revoredo que asegura que en el Rímac no solo trabajan a favor del club, sino también para que el fútbol peruano se pueda potenciar y así alcanzar mayor competitividad.

Renzo Revordo debutó como futbolista profesional en Sporting Cristal en el 2004.
Renzo Revordo debutó como futbolista profesional en Sporting Cristal en el 2004.
/ NUCLEO-FOTOGRAFIA > JESUS SAUCEDO


¿Cómo se encuentra actualmente Sporting Cristal a nivel de división de menores?

Hay un montón de aspectos. Te puedo decir desde la manera de entrenar, pues hoy hay una metodología. Nosotros lo llamamos el ‘Método Celeste’, un método integral para desarrollar buenas personas y buenos jugadores. Hay una línea de carrera desde la base hasta los jugadores del formativo, hasta reserva y a nivel profesional. Hay una línea de carrera clara, como se ve en cualquier empresa, y si haces bien, hay un ascenso constante y el club trata de acelerarlo, por así decir, para que los chicos experimenten mayor ritmo, mayor competencia y estén más preparados para llegar al primer equipo. En términos de entrenamiento y metodología, el ‘Método Celeste’ es muy bueno. Es una manera clara de entrenar para todas las categorías. Eso hace que yo, por ejemplo, tenga la Sub 17 y si necesitan algún jugador para la reserva, pues pasa y es la misma metodología, mismo entrenamiento, misma manera de jugar. Entonces, suben y bajan jugadores de categorías según su rendimiento o para acelerar su proceso. Ahora, cada entrenador tiene su matiz dentro del modelo de juego que hay en el club. A cada uno le pueda gustar un poco más una cosa que otra, hace mayor énfasis en determinados aspectos. Sin embargo, hay una línea para identificar cuándo juega un equipo o categoría de Sporting Cristal. Todo esto hace que sea mucho más fácil el ascenso de un chico de la Sub 14 a la Sub 16, por más que tenga 14 años, porque ya ha vivido todo anteriormente. Va a cambiar el tema del roce con otros jugadores mucho más rápidos y fuertes, pero por eso se trata de acelerar ese proceso, para que cada vez lleguen mejor formados a la etapa profesional.

¿Podrías mencionar solo un aspecto fundamental que ha cambiado el aspecto formativo de tu época a la de ahora?

Hay un montón de aspectos. Te puedo decir desde la manera de entrenar, pues hoy hay una metodología. Nosotros lo llamamos el ‘Método Celeste’, un método integral para desarrollar buenas personas y buenos jugadores. Hay una línea de carrera desde la base hasta los jugadores del formativo, hasta reserva y a nivel profesional. Hay una línea de carrera clara, como se ve en cualquiera empresa, y si haces bien, hay un ascenso constante y el club trata de acelerarlo, por así decir, para que los chicos experimenten mayor ritmo, mayor competencia y estén más preparados para llegar al primer equipo. En términos de entrenamiento y metodología, el ‘Método Celeste’ es muy bueno. Es una manera clara de entrenar para todas las categorías. Eso hace que yo por ejemplo tengo la Sub 17 y si necesitan algún jugador para la reserva, pues pasa y es la misma metodología, mismo entrenamiento, misma manera de jugar. Entonces, suben y bajan jugadores de categorías según su rendimiento o para acelerar su proceso. Ahora, cada entrenador tiene su matiz dentro del modelo de juego que hay en el club. A cada uno le pueda gustar un poco más una cosa que otra, hace mayor énfasis en determinados aspectos. Sin embargo, hay una línea para identificar cuándo juega un equipo o categoría de Sporting Cristal. Todo esto hace que sea mucho más fácil el ascenso de un chico de la Sub 14 a la Sub 16, por más que tenga 14 años, porque ya ha vivido todo anteriormente. Va a cambiar el tema del roce con otros jugadores mucho más rápidos y fuertes, pero por eso se trata de acelerar ese proceso, para que cada vez lleguen mejor formados a la etapa profesional.

¿Con el ‘Método Celeste’ se evita un cambio de estilo o de idea de juego que suele proponer un Jefe de Unidad Técnica de Menores?

La idea es que, si se va el director de turno o si se cambia al jefe de unidad técnica de menores de turno, igual queda el ‘Método Celeste’ porque entendemos que en el formativo esa es la manera de trabajar, para nosotros lograr jugar como queremos, para darle al chico todas las posibilidades y que experimente todas, no solamente una formación dos formaciones, sino que todo el comportamiento necesario que deba tener para que no se sorpresa después. Que tenga muchas más armas para desarrollarse en un primer equipo a futuro, ya sea en Sporting Cristal, que ojalá sea así, sino al final se trata de hacer las cosas bien en formativo no solo por el club o por el chico, sino por el fútbol peruano. En Sporting Cristal estamos haciendo o poniendo nuestro granito de arena, haciendo las cosas lo mejor que podemos, porque cada uno tendrá su manera, pero le estamos poniendo todas las ganas del mundo para no quedarnos con la conciencia de que no estuvimos trabajando bien este año porque queremos ver a la selección peruana peleando por títulos, viendo a los equipos peruanos peleando en la Copa Libertadores. No nos podemos quedar sin hacer cosas y eso parte desde el formativo.

Ahora el proyecto deportivo de Sporting Cristal se sostiene en las canteras y eso puede ser un impulso para trabajar mucho más para los jóvenes...

Claro, directamente. Por ejemplo, tocando el tema de la Copa Mitad del Mundo, de los chicos que fueron a Ecuador, Maxloren (Castro) ya está en el primer equipo. Max es 2007 y el torneo era 2006. Nosotros hemos ido con chicos menores, regalando edad, sino me equivoco, el 70% del plantel regalaba años. Así le haces experimentar al chico, que ya esté preparado, le das un roce distinto, que queme etapas controladamente. Le propicias que se enfrente a otro nivel de juego, a otra intensidad de juego que es para lo que nosotros entrenamos. Muchas veces necesitamos intensidad en el entrenamiento. Eso es clave, pero de repente en algunos partidos del torneo local no se necesita tanta intensidad como para poder ganar. Sin embargo, vas a jugar afuera y te choca, te enfrentas a otra realidad. Entonces lo que tratamos de hacer es acelerar esos procesos. Del equipo que viajó a Ecuador, poco más del 75% ya había jugado una copa internacional fuera del país. Algunos ya han viajado hasta cinco veces. Entonces ya saben. ¿Y cómo le sirve eso al entrenador o a la institución? Simplemente ya no es solo que te crean porque tú pides intensidad, al menos ya lo han vivido. Ahora, al volver de un torneo de esa magnitud, ellos mantienen un nivel de intensidad, de entrenamiento, de ganas y saben lo que van necesitando. Si chocaron con un jugador y por fuerza perdieron el duelo, ahora están metidos en el gimnasio, haciendo su preventivo o trabajando de la mejor manera. Ese cambio se ha generado también porque han vivenciado otras experiencias, que seguramente necesitaban. Estos viajes a veces hacen que seas mucho mejor. Además, ese chico cuando vuelve a su categoría es el ente que mueve a su equipo. En base a ellos, toda su categoría comienza a subir, a elevar su nivel, y al final, como te decía, el fútbol peruano es el que tiene que subir. Nosotros como Sporting Cristal estamos tratando de hacer eso, el de subir el nivel del fútbol peruano desde nuestro club.

Maxloren Castro jugó la Copa Mitad del Mundo y fue una de las figuras de los celestes. (Foto: Agencias)
Maxloren Castro jugó la Copa Mitad del Mundo y fue una de las figuras de los celestes. (Foto: Agencias)

¿Cómo logran ese cambio?

Si un equipo no está haciendo bien las cosas, al momento de enfrentarnos será tanta la diferencia para que se dará cuenta que tiene que hacer mejor las cosas y así poder seguir compitiendo. Y eso puede jalar a otros clubes. Y al final, todos vamos a crecer que es la idea porque sería muy egoísta solo pensar en mi club y Sporting Cristal se ha caracterizado, en general, no solo por tener una visión de alcanzar objetivos, sino también de ser un ente de cambio social.

El triunfo sobre Independiente del Valle pudo haberse tomado también como una motivación para tus jugadores porque muchos de sus rivales ya están en el primer equipo o inclusive vendidos a clubes europeos...

Jugamos contra Independiente del Valle y ellos tenían cinco jugadores jugando en el primer equipo. De hecho, una vez que quedaron eliminados, muchos pasaron a la Sub 20 de Ecuador o alguno está jugando la Copa América y pudo estar jugando contra nosotros, pero ya está en la selección absoluta. Además, Justin Lerma ha sido vendido al Borussia Dortmund y estuvo como extremo. Pero como anécdota te digo, puede haber pasado que superó a alguno de nuestros jugadores y que ellos se motiven a alcanzar lo que ese chico ya está logrando. Sin embargo, también pasó lo contrario. Nuestro lateral lo agarró y de repente Lerma era rápido, pero él también y no lo pasó. Entonces, eso también juega a tu favor. A este jugador lo han vendido y yo también estoy haciendo bien las cosas. Eso te afianza más el camino, te refuerza todo lo que estás haciendo, lo que te pide el club, lo que cada uno está haciendo en casa, el cuidado que cada jugador tiene para alcanzar su objetivo. Al final esto es un rompecabezas en el que trabajan diversas áreas, que tiene un solo propósito, que el jugador esté bien preparado. De repente, en un partido de la Copa Mitad del Mundo, alguno se ha sentido superado, pero en este torneo en particular creo que ha quedado más claro que vamos por buen camino y eso te da confianza para seguir jugando, para seguir entrenando, para venir a La Florida motivado como entrenador y jugador. Porque claro, tú ves, en la TV un partido del Borussia y estará ese jugador ecuatoriano y tú jugaste de igual a igual con él. Si te preparas también podrías estar allá. Entonces es convencerse de eso, de que se están haciendo las cosas bien y creo que ha sido una muestra de que vamos por buen camino.

Fue duro no alcanzar el título de la Copa Mitad del Mundo...

De hecho, yo quería campeonar. No me siento conforme con haber quedado segundo como entrenador, pero no puedo ser ajeno a que los chicos jugaron muy bien, estuvieron bien preparados y no puedo ser ajeno a que este torneo se jugó bien y nada más porque no es casual. Si revisamos directamente los partidos que tuvimos en la Copa Mitad del Mundo, le ganamos dos veces a Fluminense, volteando el resultado. Físicamente los superamos. Jugamos en altura y contra Independiente del Valle, que es local, estuvimos de igual a igual. Teníamos un jugador menos en algún momento del partido y los chicos seguían metiendo. Nos hemos enfrentado a buenos equipos y eso te afianza más porque demuestras que tú también eres un buen equipo.

Atlético Huila, Universidad Católica de Chile y Atlético Nacional fueron los otros rivales de gran nivel al que se enfrentaron en este certamen...

De hecho, el torneo comienza siempre medio timorato, en el sentido de cómo será el torneo, de la expectativa de lo que puede ser. Pero pasó medio tiempo y los chicos se dieron cuenta de que no eran menos que nadie. Por ejemplo, que estaban jugando mejor que Huila, que los metimos en su propio arco, luego contra Fluminense estuvimos perdiendo 2-0, pero en el descanso decían “no juegan nada. Vamos, no juegan nada, vamos a voltear el partido”. No estaban pensando en anotar un gol o empatar, pensaban en dar vuelta al marcador. Y estaban seguros. Pero no se remontó con una pelotita que cayó de un córner, se hizo jugando bien, pasándolo por arriba físicamente, a mí parecer. Eso es un tema aparte, pero te da fuerza para el día a día. Después cuando vuelves, sabes que ese es el camino.

¿Cómo manejaste los resultados? El equipo venció a Fluminense en fase de grupos, luego eliminó en cuartos de final a Independiente del Valle y muchos podrían conformarse con esos importantes triunfos...

Es medio difícil de manejar, porque claro, pasas de grupo y te toca el múltiple campeón del certamen, el que es el candidato, el ejemplo a seguir en Sudamérica respecto al fútbol formativo. Creo que se hizo un buen partido y cuando se ganó, el reto estaba en eso, en que los jugadores no se conformen, porque claro, tú dices ya le gané a Independiente del Valle y te puedes relajar un poquito, pero en un torneo tan corto te puede pasar factura. Al siguiente partido puedes entrar ‘ahuevado’ como se dice o de repente aligerar una derrota porque ya eliminaste a Independiente del Valle, el decir “ya cumplí”. El reto estaba en eso, en convencer a los jugadores que no hemos viajado hasta Ecuador solo a competir, hemos venido a campeonar. Todos los partidos tenemos que ganarlos.

¿Viajaste convencido de que se podía levantar el título?

Te contaré una infidencia. Mi esposa me hace reír. Ella no es seguidora del deporte, del fútbol, pero cuando fue el partido con Católica, que fue el último partido de la fase de grupos, me preguntaba por el resultado que necesitábamos para pasar a la siguiente fase. “¿Si pierden ya pasaron? ¿Qué pasa con el empate?”, me decía ella y yo solo quería pasar primero. Le decía que quería ganar todo y que los chicos podían hacerlo. Esa era la manera de pensar de ella que es lo típico que se puede pensar. Paso y listo. No. La idea, el objetivo era avanzar como líderes del grupo. Así, en cada partido que pasaba era convencer a los chicos de que sí se podía, de que estábamos en el torneo para campeonar. Después, evidentemente no se pudo. Está claro que no se pudo, pero creo que fue un lindo juego. La Copa Mitad del Mundo es bien competitiva, va mucha gente a ver los partidos y solo dieron buenos comentarios del equipo, que no esperaban un equipo como el que demostramos ser en el campo. Ahora es un reto nuestro también cambiar la imagen del fútbol peruano, que al vernos al frente el rival está convencido de que nos va a ganar. Poco a poco se gana el respeto. Ahora tú puedes hacer bien las cosas y lo que te sustenta, probablemente menos en menores, son los resultados, lo que te hace ver distinto, lo que te hace que ya comienzan a fijarse en tus jugadores.

Más allá de que fueron subcampeones, existe un reconocimiento por todo lo logrado en Ecuador...

De repente muchos no lo saben, pero la Copa Mitad del Mundo es un torneo muy importante para la categoría Sub 18 a nivel de Latinoamérica. Entonces que todo el mundo comience a hablar del equipo te deja tranquilo. Los chicos también se han sentido empoderados de eso, de que están preguntando por todos, de que están reconociendo a todos en las redes sociales. Ellos están metidos en eso, así que también hay que manejarlo. Y todos hablan también porque estamos mal a nivel de resultados. Es manejar un poco ese buen resultado, eso de estar orgulloso con siempre tener siempre los pies sobre la tierra. Cuando cerré el viaje, hablé con todos del dolor de haber perdido la final, pero también de sentirnos orgullosos y reconocer que sí se puede. Ahora el reto en todos estos chicos que han vuelto está en seguir metiendo, en seguir mejorando y no conformarnos.

Tras lo vivido en Ecuador, ahora el objetivo será conquistar la Copa Federación...

Claro, pero hay que recordar que del equipo que viajó a Ecuador algunos están en reserva, otros en la Sub 17, en la Sub 16, porque ha habido hasta chicos 2009 en un torneo que era 2006. Así que cada uno vuelve a su categoría o subió a una categoría mayor porque se vio que podía un poco más. El caso de Thiago Salinas, por ejemplo, que sigue entrenando con el primer equipo. La gente ve de repente ya cuando está en primera, pero abajo también hay una sucesión acelerada. No necesariamente un chico 2009 tiene que jugar en su categoría. Si está en capacidad para jugar, listo, hay que acelerar ese proceso para que pueda seguir topándose con gente que le pueda hacer seguir creciendo a él. Eso es lo que se busca en el club. Ahora, claro, acá es el torneo Federación lo que uno busca, cada uno en su categoría y al final, en el acumulado, donde Sporting Cristal está puntero y eso solo es un reflejo que se está siendo constante en todas las categorías. Muchas veces algunos equipos tienen una buena categoría, un buen equipo en determinada categoría, pero en las demás no y eso se va a ver en el global. Eso es el espejo de lo que se está trabajando en el club. Más allá del puntaje, del resultado, de verdad que nosotros creemos que estamos haciendo bien las cosas. No sé qué tanto más se podría hacer para darle soporte a los chicos. Es evidente que siempre se puede más, pero con los recursos que tenemos se está optimizando súper bien como para darle a los jóvenes lo que de verdad necesita, lo primordial y basándonos en un entrenamiento de calidad.

La Copa Mitad del Mundo ha generado mucha expectativa en jugadores como Maxloren Castro y Mateo Rodríguez, incluso se pide que este último ya tenga minutos en el primer equipo...

Al final, como dicen muchos, el que juega bien va a llegar directamente. Teniendo esa premisa, hay jugadores que a veces pueden tener un buen torneo, pero todavía sentimos que les falta algo. ¿Por qué? Porque después lo lanzas a una categoría mayor o a la Primera División y todavía les cuesta. Ahora, yo no estoy de acuerdo tanto con el tema de que tienes que llevarlo poco a poco, pero también debe ser medido y acelerado porque sino terminan debutando todos a los 24 años y dicen “debutó el juvenil”. Yo no entiendo eso la verdad, te lo digo a título personal. Hay que compararse con el mundo, con 21 años ya todos están jugando a nivel profesional. Por ello, la idea es que eso cada vez sea menos en el club, que ya un chico de 16 años como Maxloren ya esté preparado de verdad como para que ya no lo vean directamente como “ah es el chico que está subiendo” o lo vean el primer año, pero después, el próximo o este mismo año ya es un jugador de primer equipo. Ya no será el chico, él ya tiene que pelear de igual a igual, en igualdad de condiciones ¿Por qué? Porque está preparado.

Pero no todos van a poder llegar al primer equipo...

Hay que ver cómo es esa línea de carrera, en qué momento se le va subiendo porque también hay ciertas posiciones que están más cubiertas en el equipo profesional. Por eso también se dan algunos préstamos, porque como te decía, no todos van a encontrar su camino probablemente en el primer equipo de Sporting Cristal. Hay miles de caminos en el fútbol y la idea del club es que cada vez más el primer equipo se alimente del formativo, pero también es desarrollar el fútbol peruano. Y si tienen que jugar en algún otro lado, perfecto, como me pasó a mí también. Si me voy a préstamo no tengo que pensar que no voy a volver. Para nada, yo salgo a préstamo porque voy a volver para ser titular acá. Esa es la mentalidad, esa es la idea que nosotros le damos o el mensaje que se brinda a cualquier jugador a préstamo. No estamos desechando jugadores, no nos los estamos sacando de encima. Si se da esa cesión es para acelerar ese mismo proceso que estamos trabajándolo desde la Sub 14, Sub 15, pero que ahorita no puede estar en un primer equipo o reserva y se da a préstamo para que pueda seguir creciendo, para no estancarte. Porque una vez que te estancas comienzan a subir otros jugadores y la verdad es una pérdida de tiempo y lo que menos hay en el fútbol es tiempo.

A futuro, ¿Sporting Cristal quiere repetir el caso de éxito de Independiente del Valle?

Claro que sí. Y al fin al cabo en ese camino vamos. No es que copiemos a Independiente del Valle porque nosotros tenemos nuestra forma y estamos convencidos de la forma en la que estamos trabajando. Entonces no es solo copiar, pero claro, tú me puedes decir que van a ser como Chivas, tienen sólo mexicanos. Al fin y al cabo, si tú haces bien las cosas, ese crecimiento, ese camino para llegar al primer equipo va a ser natural, será orgánico directamente, porque tienes los mejores jugadores para poder estar en primer equipo y es sostenible en el tiempo y eso es lo que quiere el proyecto. Que sea sostenible, que no solamente salga uno o dos chicos y ya, sino que sea una línea. Y para que cuando se venda a Joao Grimaldo entren más y cuando se venda otro jugador, entrará otro. Y cuando se venda ese otro, habrá otro chico esperando su cupo, espacio, porque muchas veces no hay ese espacio. Ello quiere decir que estamos trabajando bien, que en algún momento podríamos tener un equipo 100% de canteranos o que se tenga que reforzar las posiciones que no se encuentren o que no se hayan desarrollado. De repente tú trabajas de la mejor manera y no sé, alguna generación, no sacó ningún lateral izquierdo, ningún extremo. Y ahí entra también el tema de ese tipo de circunstancias que igual se está trabajando en menores, porque para eso hay un área de scouting que tiene que tiene que evitar que haya esas brechas de que no haya ningún lateral, ningún interior en línea de carrera, de proyección, en tres o cuatro años. Eso es parte también del área de scouting que tiene que ir trayendo jugadores para poder desarrollarlos y seguir evolucionando, que al final sea un círculo virtuoso.

El plantel 2024 de Sporting Cristal está conformado por 31 jugadores.
El plantel 2024 de Sporting Cristal está conformado por 31 jugadores.

Y el área de scouting no solo se fija en jugadores de Lima...

Claro que no. De hecho yo no sé cuántos jugadores de Lima scouteados hay, la tendencia es poco. No tengo el dato, la verdad porque tampoco es que esté tan tan empapado, pero es un área súper importante en el club. En formativo, directamente está el área de fútbol, la de operaciones, el área de desarrollo individual, que es el que ve el tema del colegio, que hay acá dentro del club, el tema psicológico, el tema social de la familia de cada jugador y también está el área de inteligencia deportiva, donde está scouting, los que almacenan todos los datos, los GPS. Ahora, puedes ganar, puedes perder. Nos hubieran podido eliminar en Ecuador al cuarto partido de repente, pero eso no quiere decir que no se esté trabajando bien. Claro que es el fruto de lo que se está trabajando y al final el resultado puede ser determinante. Pierdes un penal y quedamos segundos. De repente no se valora tanto como si hubiera campeonado. Pero para nosotros sí. Dentro del club estamos convencidos de que esa es la manera, trabajando integralmente en busca de resultados. Y no hablamos de los resultados en los campeonatos formativos, sino que comienzan a salir jugadores y que no estén de paso, sino que lleguen a trascender.

¿Cómo así decidiste involucrarte en el fútbol de menores? ¿En tu última etapa como futbolista ya estabas estudiando?

Sí, es muy gracioso, la verdad. Yo estaba estudiando mientras seguía siendo jugador, pero me retiré y estaba de vacaciones, ya no quería nada. Yo tengo relación con algunas personas del fútbol formativo y me dijeron para venir a La Florida para que vea lo que estaban haciendo. Ni siquiera sabían que yo había estudiado para entrenador ni nada. Fue como visitar a un par de amigos acá en el club. De hecho fue a través de otro amigo que me dijo para ir al club, pero le dije que no podía porque aún estaban de vacaciones. Así, pasó un mes y bueno llegué a La Florida. Me comenzaron a mostrar el club, que tampoco es que haya cambiado un montón, pero hay cambios que yo los veo y he estado solamente dos años fuera del club y eso que yo era jugador de primera cuando estaba en Sporting Cristal y sí algo hacía era ir abajo a cada rato. Entonces no es que no veo menores desde hace ocho años. Para nada. Yo paraba con los más chicos del club y tenía relación con el psicólogo de menores, etcétera. Entonces llego y veo la estructura, en orden y todo eso, qué bacán, dije. Luego me contaron qué cosa estaban haciendo, me hablaron del ‘Método Celeste’ y era la manera que yo había estudiado. Entonces, comenzamos a compartir algunas ideas, se dieron cuenta, probablemente, de que no era un improvisado y me invitaron a venir a ver entrenamientos. Ahora, yo también propuse venir todos los días. Para ellos de repente yo les podía aportar algunos aspectos, pero desde mi lado yo estaba aprovechando de conocer todo y no es que yo me retiré del fútbol y tenía claro que quería ser entrenador. De hecho, todavía no lo tengo muy claro, pero la verdad que me ha gustado mucho el tema de ver cómo va evolucionando un chico, cómo va adquiriendo conocimiento, cómo se va haciendo más jugador.

¿Y llegaste como asistente técnico?

En primera instancia llegué a la Sub 18, donde tenía un asistente y yo estaba ahí acompañando. Ya tenían un asistente y yo estaba ahí acompañando e iba a los partidos y veía y veía hasta que en algún momento me dijeron si podría ser asistente. Primero era de la Sub 14, la Sub 15 y la Sub 16, que lo tenían Mariano Morales, Alberto Beingolea y Víctor Reyes. Así empecé a trabajar con ellos y la verdad era como una esponjita tratando de chuparle todos los conocimientos a todos los profes, pero bacán y me llevo muy bien con los tres. Estuve medio año desde que llegué al club y estaba de asistente. Y al final de año, a comienzos de este 2024 es que me propusieron que dirija una categoría y me asignaron la Sub 17. También soy parte del proyecto de reserva, donde soy asistente técnico. Además me han puesto el título de asistente metodológico también porque ayudo en una y otra cosa, pero estoy más enfocado en la Sub 17.

Estás agusto en la división de menores y aún no tienes muy claro lo que buscas a futuro. Sin embargo, ¿existe la posibilidad de que en algún momento se te vea dirigiendo al primer equipo? ¿Es un objetivo?

Ahora no la verdad. Pero así como te digo no, yo cuando recién comenzaba a jugar en el colegio, me preguntaban si quería ser futbolista y te decía que no. Y cuando estaba acá, en Sporting Cristal, me preguntaban si quería ser profesional y decía que no. Entonces, iba viendo, iba viendo y si me va gustando me meto y cuando me meto, me meto bien y me meto con ganas, me meto para ser el mejor. Eso siento que me está pasando un poco ahora. Quería comenzar sí o sí en formativo porque me gusta el tema de los chicos, de que aprendan y creo que están más ávidos de aprender que un jugador profesional, por más de que se siento que se le podría se le puede dar a un conocimiento y algunos cosas a mejorar, pero ahora que estoy en formativo la verdad que lo disfruto mucho, la verdad la disfruto mucho. ¿Entonces no, si tu me preguntas te interesa? Oye, ahorita está abierto el primer equipo de tal lado y el primer equipo de Sporting Cristal, va a sonar raro, pero no. Estoy contento en el formativo. Siento que muchas veces ese es el problema del tema de entrenadores en el Perú. Que el técnico de menores solo ve al formativo como una escalera para llegar al primer equipo. Debe ir de la mano que obviamente económicamente un entrenador de menores probablemente no puede vivir solamente de eso. Tiene que ser personalizado, tiene que estar de acá para allá, tener mil equipos. Probablemente todos quieren estar en un primer equipo por el tema económico, pero de verdad tiene que llegar un momento y creo que están en el camino acá en el club, en Sporting Cristal, de que no se le vea al entrenador del formativo con menos capacidad que uno de primera división. Lo que pasa es que tiene que ser un especialista en formativo.

Y en formativo a veces es más complicado trabajar con jóvenes, con adolescentes...

Muchas veces los chicos, a los 14, 15 años están en una etapa más sensible que un jugador profesional y si tu lo entrenas mal en esa edad, malogras directamente al jugador. Y si estás a los 12 años y tu lo entrenas mal ya no corres el riesgo, ni siquiera solamente de que juegues mal. Puede dejar directamente el deporte porque lo manejaste mal y al final nosotros no solamente queremos desarrollar jugadores profesionales, obviamente, pero también queremos ser un ente que haga crecer la sociedad. Si nosotros como entrenadores de menores queremos que tu equipo juegue como un primer equipo o como el Bayern, no puede jugar un chico de 12 años como el cuadro alemán o el Manchester City. Entonces ese es el error más grande que puede cometer un entrenador de menores, porque no están en capacidad de hacerlo. Entonces muchas veces esa etapa sensible tiene que ir acompañada de gente, de verdad capacitada, para desarrollarlos a cada chico a su etapa. El tema económico debería ir en relación a la capacidad de cada entrenador. En formativo se necesita personas capaces, tan igual como en el primer equipo. Ahora yo siento que el club va por ese camino y la idea es por qué no te puedes volver un especialista en fútbol formativo. Vas a aportar mucho más de repente que queriendo hacer otras cosas en un primer equipo. Pero yo voy viendo, no cierro ninguna puerta, como nunca en mi vida he hecho, pero ahora estoy disfrutando esta nueva etapa.

Y hablando del primer equipo, ¿cómo ves al equipo profesional?

Bueno, esta temporada estuvo a punto de conseguir el Apertura. En el balance en general yo creo que ha sido positivo. Obviamente el hincha me va a matar, pero el balance no puede ser malo si acabaste el campeonato con un gol de diferencia de campeonar. Evidentemente todos queremos campeonar, y el club es el primero que quiere campeonar. Probablemente los dirigentes son los primeros que quieren campeonar. El entrenador es el primero que quiere campeonar. Pero claro, también tenemos que ver todo, todo el esfuerzo que se ha hecho, todo lo bueno que se ha hecho en el camino también. Eso hace que mires el Clausura con mucha expectativa, con mucha confianza y ahora con la llegada del nuevo ‘profe’ (Guillermo Farré) y yo siento que se que es un nuevo comienzo. Y si tu parte de cómo se terminó, que fue un equipo que estuvo ahí de campeonar, creo que las expectativas son las mejores.

¿Viste la campaña de Perú en la Copa América?

Te digo la verdad, no lo he visto mucho y por eso no te puedo hablar muy a profundidad. He visto pasajes del partido porque he estado concentrado en otras cosas, pero siento que el cambio generacional por ahí o el cambio de algunos jugadores y el ingreso de otros, te va a pasar factura en algunos resultados. Sin embargo, si se están haciendo las cosas bien hay que mantenerlo. Por ejemplo, si tu me preguntas si yo cambiaría algo si me hubieran eliminado en la fase de grupos de la Copa Mitad del Mundo, te diría que no cambiaría nada. Seguiría trabajando igual porque estoy convencido de que esa es la manera. Entonces si en la federación se está trabajando de esa manera, convencidos, hay que seguir para adelante. ¿Y a nosotros qué nos queda? Seguir apoyando, tratar de producir desde nuestro lado todo lo que podamos que pueda ayudar tanto a la federación como al fútbol peruano.

¿Tienes contacto con ‘Chemo’ del Solar?

No tengo contacto directo, así que converse todos los días con él, para nada, pero se ve mucho en los partidos de reserva, en partidos de las categorías y de vez en cuando claro, nos acercamos a conversar.


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