La pelea entre Brock Lesnar y Randy Orton en SummerSlam 2016 ya está comprometida. La lucha como exhibición tiene gran potencial, pero la personalidad de La víbora, los horarios de la Bestia encarnada, su fallo en el antidopaje y la negación de WWE de castigarlo perjudican la promoción del encuentro.
El enfrentamiento de dos seguros miembros del Salón de la Fama de WWE en un escenario tan grande como SummerSlam es un espectáculo que se vende solo. Orton puso el justificante: un regreso glamuroso e impactante, enfrentando al más peligroso para mostrar su potencial.
La lucha, por otra parte, beneficia en dar equilibrio a WWE. El jefe de la sección de WWE de "Bleacher Report", Ryan Dilbert, explica este hecho hacia una lucha segura contra la apuesta a la incertidumbre que significa el voto de confianza a Finn Bálor y Dolph Ziggler como retadores a los títulos mundiales.
Lesnar vs Orton se establece como el primer duelo de marcas. Orton es de SmackDown y Lesnar de Raw. En teoría ellos no se cruzarán nunca hasta SummerSlam -pero ya se vio que estarán invadiendo territorios-. Pero esto es un conflicto por los horarios de Brock; también considerando que WWE tiene que ser inteligente para seleccionar las fechas en que aparecerá en su programación.
En el pasado, Paul Heyman era un buen suplente en la ausencia de Lesnar. Aunque Dave Meltzer dijo que el representante carece de contrato vinculante con WWE tras la expiración del mismo semanas atrás, parece que 'Paulito' será una vez un salvavidas para la empresa.
HIPÓCRITAS
A los problemas antes mencionados se suma el de la personalidad mostrada de Randy Orton. Desde su regreso al ring de WWE tras su lesión se mostró demasiado bonachón. Presenta más sonrisas que esa mirada intensa de asesino que depreda a su presa de turno que lo caracteriza y que encendería más al público, además de darle mas confianza y credibilidad a su reto.
Por otra parte, la Agencia Antidopaje de Estados Unidos detectó clomifeno (anti estrógeno que también se le detectó a Jon Jones) en el organismo de Brock Lesnar antes de su triunfo en UFC 200, según ESPN. Esto hizo que la gran prensa que WWE ganó se vaya al tacho.
WWE también fue tachado de hipócrita. Con tal de no sacrificar su anuncio para SummerSlam decidió no sancionar a Lesnar. Recientemente suspendió -y hasta humilló- a un luchador top como Roman Reigns; mientras que Randy Orton tiene dos sanciones en el pasado por violar la política de drogas de la empresa.
Una vez más, WWE tendrá que apelar a cómo se desarrolla la lucha en el ring para que tenga éxito. El añadir dramatismo no va a sumar mucho si solo van a ser ataques sorpresa: la pelea ya está comprometida. Así, la narrativa tendrá que ser dejado un poco de lado para dar paso un duelo de violencias para que SummerSlam tenga éxito.