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Es el más joven de todos (18 años recién cumplidos), pero también el más valioso (tazado en 20 millones de euros según la prensa argentina). Por eso no sorprende la cierta timidez con la que Catriel Cabellos pide el balón en el segundo día de entrenamientos de la selección peruana en la Videna en la que está como invitado. Y tampoco asombra que sea el más cuidado por el comando técnico de Juan Reynoso y uno de los más buscados por los flashes.
El día 2 de la ‘Era Reynoso’ arrancó este martes a las diez de la mañana bajo una intensa llovizna. Catriel, volante mixto que la viene rompiendo en la reserva de Racing Club de Argentina, salió junto a los demás convocados y su primer paso fue buscar a Joao Montoya, el central de Alianza Lima con el que coincidió en la Sub 20 y Sub 23.
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Catriel en acción
El cuidado del comando técnico de Reynoso con Catriel fue parte de la práctica. El preparador físico mexicano Gustavo Leombruno se acercó para preguntarle cómo estaba luego de los trabajos de activación. En la Federación saben que el futbolista tiene todas las intenciones de jugar por la selección peruana, aunque también están las opciones de representar a su natal Argentina, Paraguay (abuela materna) y Brasil (abuelo materno).
“Feliz de estar acá”, tuiteó a las 9:29 de la mañana, luego de tomar desayuno junto a los demás seleccionados y antes de concentrarse al cien por ciento en los trabajos. Porque si algo exige Juan Reynoso en cada trabajo es concentración al máximo. Y Catriel, y los demás, otorgan eso y más.
Feliz de estar acá 😁💪🏽🇵🇪 pic.twitter.com/35o6dlI61m
— Catriel Cabellos (@CatriCabellos) September 13, 2022
“¡Bien, Catriel!”
“Con Reynoso hemos hablado algo de Catriel, pero Juan se decidió por lo que él vio en la Sub 23, y por los números de Catriel en el gps. Es un chico que está en el más alto nivel en minutos recorridos en el campo. Cuando lo vio él, le gustó”, contó Gustavo Roverano hace algunos días.
Al profesor le gusta el juego de Catriel. Y se nota en cada trabajo. El técnico lo sigue, lo mira y, cuando puede, le felicita. “¡Bien, Catriel!”, le dijo el ‘Cabezón’ un par de veces en los trabajos con balón en el que destacó.
Catriel en el entrenamiento
Cabellos fue uno de los mejores en los trabajos de ataque y defensa de cara al arco. Demostró que, pese a sus 18 años y su metro 72, puede poner la pierna fuerte en cada jugada.
Reynoso ordenó después un reducido con dos equipos en el que exigió jugar a dos toques como máximo. Catriel siempre buscó el espacio, salir del tumulto y tocar en primera cada vez que recibía el balón. Otras felicitaciones y un par de palmadas. “¡Bien, Catriel!”, gritó.
La timidez también forma parte de su adaptación. Le costó pedir balones como sí lo hicieron otros que ya estuvieron convocados o que se conocen de la Liga 1. De hecho, Catriel es el único que juega en el extranjero de los 28 jugadores que entrenarán en la Videna durante esta semana.
“La próxima los quiero llevar yo”, dijo el volante de Racing tras la caída de Perú en el repechaje mundialista. Con 18 años, el sueño de Catriel Cabellos puede ser realidad. No solo está en el radar de Juan Reynoso, sino que el comando técnico lo tiene a diario para seguirlo, medirlo y cuidarlo.
