Ñol puso el tema en la mesa: ¿por qué también somos los últimos en Sudamérica en la tabla que cotiza a nuestros cracks?

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Si bien es cierto que las grandes potencias sudamericanas como Brasil, Argentina, Uruguay y Colombia son inalcanzables en cifras de cotización, superando con creces el umbral de 1.4 millones de euros, el panorama se torna aún más desalentador al compararnos con el siguiente pelotón de países. De los siete países restantes en Sudamérica, Perú ocupa la penúltima posición, solo por encima de Bolivia, que no registra ningún jugador con dicha valorización. Nos encontramos a cinco futbolistas de Venezuela, que con su reciente crecimiento futbolístico seguramente sumará más nombres a la lista.

Más atrás, a una distancia considerable, se ubican Ecuador y Chile, países que triplican (3 veces más) nuestro número de futbolistas mejor valorizados (13). Y aún más lejos se encuentra Paraguay, que casi quintuplica (4.5 veces más) nuestra cifra. Este dato es crucial, ya que tanto Chile como Paraguay serán, en teoría, nuestros rivales directos en la ardua batalla por el séptimo cupo de repechaje para la próxima Copa del Mundo.

El precio del talento peruano

En el mercado futbolístico actual, 13 jugadores peruanos ostentan un valor de mercado superior a 1.4 millones de euros (aproximadamente 1.5 millones de dólares). A ellos se suman otros ocho jugadores cuyo valor se encuentra entre 1 y 1.4 millones de euros. Sin embargo, es importante resaltar que siete de estos jugadores ya han superado los 29 años de edad. Esto implica que se encuentran en la etapa final de sus carreras y es poco probable que experimenten un crecimiento futbolístico significativo en el futuro. Esta situación podría limitar el aumento de su valor de mercado en los próximos años.

Dentro de este grupo de jugadores experimentados, Jhilmar Lora, con tan solo 23 años, representa una excepción. Su juventud le brinda un margen considerable para seguir desarrollándose futbolísticamente. No obstante, cabe mencionar que Lora atraviesa un momento de bajo rendimiento que lo ha alejado de la selección nacional, generando cierta incertidumbre sobre su futuro inmediato.

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Sequía constante

A lo largo de la historia de la Liga 1, solo ocho transferencias han alcanzado un precio mínimo de 1.5 millones de dólares al extranjero. Entre ellas se encuentra la de Nolberto Solano, quien afirmó que su venta de Sporting Cristal a Boca Juniors en 1999 tuvo ese valor. Desde entonces, solo tres fichajes han superado esa cifra, evidenciando una escasa evolución en el mercado de transferencias nacionales.: Kluiverth Aguilar al City Group, Piero Quispe a Pumas de México y Wilmer Aguirre a San Luis de México.

Es cierto que Alianza Lima tiene un historial notable en la venta de jugadores, siendo el club peruano que más ha recaudado por traspasos millonarios. Han logrado esto en cinco ocasiones, superando a equipos como Universitario de Deportes, Sporting Cristal y Melgar, quienes solo tienen un registro de este tipo. Sin embargo, es importante destacar que, a pesar de su éxito en el mercado nacional, solo cuatro jugadores de esta lista han sido vendidos a ligas europeas, considerado como el principal destino para el talento futbolístico. El último caso fue Kluiverth Aguilar, quien se unió al Lommel SK del ascenso belga a través del City Group. Allí busca consolidarse y dar el salto a una liga de mayor relevancia en el futuro.

Buscando respuestas

A pesar de contar con jugadores talentosos, el fútbol peruano ha experimentado un estancamiento en la cotización y ventas de jugadores al extranjero en los últimos años. Para comprender este fenómeno, El Comercio conversó con dos experimentados scouts: Víctor Zaferson y Luis Suárez, quienes ofrecen sus valiosas perspectivas sobre las razones detrás de esta situación.

Según Zaferson, el principal obstáculo radica en la inconsistencia en el rendimiento de los jugadores peruanos. “El futbolista promedio no está bien cotizado por su rendimiento. No es sostenido”, afirma. Esto genera desconfianza en los clubes extranjeros, quienes optan por fichar jugadores en condición de libre o a préstamo, evitando grandes inversiones.

Suárez complementa esta idea al destacar la importancia de los casos de éxito como referencia para los clubes compradores. “Considero que la baja valoración del jugador peruano no se debe a tema de nivel o nacionalidad, sino a la ausencia de casos de éxito recientes. Los clubes del exterior confían mucho en jugadores que les han dado resultados, por temas culturales y ética de trabajo, además del talento deportivo obviamente”, señala.

Ambos scouts coinciden en que la falta de brillo del fútbol peruano en torneos continentales, tanto a nivel de clubes como de selección, juega un papel fundamental. “No creo que sean menos atractivos”, afirma Suárez, “pero Perú no resalta en torneos continentales. Esos torneos son la vitrina perfecta para dar el salto”.

Por último, Zaferson resalta la importancia de que los jugadores peruanos que emigran a ligas como la brasileña o argentina destaquen y brillen, ya que estas ligas funcionan como trampolín hacia Europa. “El jugador peruano que sale a mejores mercados... tiene que resaltar y no lo están haciendo”, comenta.