El flagelo de la informalidad en el Perú no solo está lejos de desaparecer, sino que se está haciendo cada vez más dominante en el mercado laboral, de acuerdo con las últimas cifras del INEI.
Los datos anualizados a setiembre de este año revelan que el 73% de la fuerza laboral sigue siendo informal, un dato que persiste prácticamente inalterado desde hace más de seis años. La alarma, sin embargo, es que hace unos 15 meses se ha acelerado el crecimiento del empleo informal.
En particular, resalta que la informalidad ya suma 10 meses consecutivos creciendo a ritmos de al menos 4% y, con esta dinámica, a setiembre alcanzó a 12,2 millones de trabajadores.
El grueso de la fuerza laboral informal se concentra en las zonas urbanas. Unos 8,6 millones de personas laboran bajo estas condiciones, lo que muestra una trayectoria preocupante: en el acumulado de los últimos cuatro años ha crecido a doble dígito.
RADIOGRAFÍA
Los puestos de trabajo informales tienen una característica común: la baja productividad. Por ejemplo, de la informalidad en áreas urbanas, el 73% de los empleos son de personas cuyo máximo nivel de educación alcanzado es el escolar.
En tanto, según el tamaño de las empresas, el 86% de la informalidad se concentra en las microempresas, es decir, firmas que tienen entre 1 y 10 trabajadores. Además, el número ha crecido 6% en los últimos 12 meses. Por su parte, el 7,2% de informales labora en las empresas medianas y grandes –de 51 a más trabajadores–, y el resto en la pequeña empresa.
En tanto, a nivel sectorial resalta que 68% de la informalidad está en los sectores de comercio y servicios. Más aun, en la rama de la construcción se registra el mayor incremento de la informalidad: 4,6% a setiembre.
RUMBO DIVERGENTE
El empleo formal está siguiendo una trayectoria opuesta al informal, pues a setiembre sumó 10 meses consecutivos de contracción y ahora hay 4,5 millones de empleados formales.
Si bien las caídas mensuales en ningún caso superan el 1%, es importante notar la tendencia al estancamiento del empleo formal. Esto debido a que oscila alrededor de su nivel actual desde hace dos años.
Es importante notar que el 61% del empleo formal es de trabajadores hombres y el 39% restante de las mujeres. Además, un detalle resaltante es que el empleo formal se ha incrementado para las personas de 45 a más años, pero se reduce en los rangos etáreos más jóvenes.
Otra forma de mirar el mercado laboral es a través del empleo adecuado versus subempleo. La segunda categoría, que incluye a personas que no trabajan suficientes horas o ganan menos de S/975 al mes, está en su nivel más alto de los últimos cuatro años, y alcanza a 4,9 millones de personas en zonas urbanas. En tanto, el empleo adecuado a nivel nacional urbano está estancado hace 10 meses en alrededor de 8,1 millones de personas.
CONTRAPUNTO
- Las cifras del INEI, basadas en la Enaho –encuesta que alimenta gran parte de la investigación microeconómica en el país–, revelan que la informalidad laboral asciende a 73% de la fuerza laboral. Resalta que en las zonas rurales la tasa es de 95,7%. En las áreas urbanas este ratio llega a 66,3%.
- Según el MTPE, solo se debe considerar a los asalariados informales en el cálculo, contrariamente a lo que dice la metodología consensuada internacionalmente. Bajo la métrica del MTPE, habría 54,6% de informalidad y sus políticas se dirigen solo a ese sector.