¿El hijo del medio realmente es el personaje secundario de la familia? Seguro has oído alguna vez sobre el ‘hijo sándwich’, aquel que ha sido olvidado en el plano familiar. Aunque esta situación no se da en todos los hogares, existen algunos en los que sí es bastante común que el hijo del medio quede perdido entre las expectativas que se tienen hacia el mayor y las necesidades del menor. En casos así, se genera un fenómeno llamado ‘síndrome del hijo del medio’. En esta ocasión, conversamos con dos especialistas sobre cómo prevenirlo y manejarlo en casa.
“Los niños que padecen del ‘síndrome del hijo del medio’ -o el síndrome del hijo ‘sándwich’- son aquellos que muestran comportamientos indebidos debido a que crecen un poco opacados entre las expectativas que se tienen hacia el primer hijo y la atención que requiere el hijo menor. Es decir, primero siente que tiene que competir con el mayor y después, cuando por fin siente que se está adaptando a esa disputa, llega el menor a requerir toda la atención del hogar”, aclaró Antonella Galli, psicóloga de la Clínica Ricardo Palma.
La Mag. Ruth Kristal, psicóloga de SANNA Clínica San Borja, sostuvo que este síndrome se genera cuando los padres están demasiado ocupados en admirar, sorprenderse y alegrarse de cualquier hijo que no se encuentre en el medio de su descendencia. “El mayor es quien los inicia en la paternidad y, a la par, el hijo menor es al que se le perdona todo porque ‘es el más chiquito’. El hijo del medio queda atrapado dentro de esta dinámica”, explicó la experta.
¿Por qué se genera el síndrome del hijo del medio?
“Es preciso mencionar que el comportamiento del hijo del medio va a depender de cómo los padres manejen la educación de sus hijos y de cómo se vinculen con cada uno de ellos. A veces, ese ‘síndrome’ es muy sutil. Por ello, es fundamental que los padres logren darle un espacio especial a cada uno de sus hijos, sin distinciones ni favoritismos, y le presten la atención correspondiente a cualquier cambio en su comportamiento”, destacó la psicóloga de SANNA Clínica San Borja.
La Mag. Kristal recalcó que este síndrome aparece cuando los padres no le prestan suficiente atención a los hijos del medio. “El hijo ‘sándwich’ puede comportarse indebidamente debido a que suele pasar desapercibido, pues no se celebran sus logros. Sienten que cualquier triunfo que tengan no alcanzará la primera sonrisa o el primer paso del hijo menor o del mayor”, añadió.
“En adición a ello, la madre o los padres están más ocupados atendiendo a dos y no a uno solo, por eso le hacen ‘menos fiesta’. Si llega un tercer hijo, el hijo del medio vuelve a pasar desapercibido porque aparece el hijo ‘chiquito’, que vuelve a suscitar entusiasmo. Entonces, el eje del síndrome del hijo del medio es que no hay un espacio emocional claro y bien definido para él, un espacio designado y celebrado”, resaltó Ruth Kristal.
¿Cómo identificar el síndrome del hijo del medio?
Los cambios en el comportamiento del hijo del medio se generan porque él o ella empieza a buscar distintas alternativas para llamar más la atención. “En la escuela, por ejemplo, suelen irse a los extremos. Por un lado, pueden mostrar comportamientos indebidos o, en caso contrario, ser muy apagados, sentirse poco estimulados o tener un perfil muy bajo. Se comportan así debido a la costumbre de que nadie intervenga en su vida”, aseveró Antonella Galli.
Asimismo, Ruth Kristal hizo énfasis en que el niño puede volverse ‘contestón’, irritable, caprichoso o inhibido. “Muchas veces el hijo del medio adopta posturas más rebeldes en comparación con el hijo mayor, pues es una forma de hacerse notar, de buscar un espacio en la mente y en la psique de sus padres. Eso puede ser un indicador de falta de atención a ese hijo. Otra posibilidad es que el niño se retraiga, se inhiba, se aísle, pues siente que lo que él hace no llama suficientemente la atención de sus padres, lo que hace que se sienta mal”, señaló la especialista.
En palabras de la Mag. Kristal, cualquiera de las posturas que adopte son mecanismos defensivos para protegerse del daño emocional que siente por no lograr llamar la atención de los padres. “La autoestima del niño se irá debilitando poco a poco, lo que va a afectar su manera de autovalorarse”, enfatizó.
¿Cómo combatir las consecuencias del síndrome del hijo del medio en casa?
Para combatir esta situación, Galli recordó la importancia de crecer en un ambiente de validación y reconocimiento, donde los padres ayuden a los hijos a reconocer sus habilidades y debilidades. “Prestarles atención no es decirles que ‘sí’ a todo, sino acompañarlos en su proceso de crecimiento, sin ‘favoritos’ ni distinciones”, recomendó la psicóloga.
En esa línea, Kristal indicó que los padres tienen la responsabilidad de vincularse con cada uno de sus hijos como si fuera el único. “Como padres, debemos sorprendernos y alegrarnos de sus logros como si fuera la primera vez que los vemos. Cada hijo es distinto y necesita que se le reconozcan sus características propias”, aconsejó la especialista de SANNA Clínica San Borja.
Del mismo modo, establecer límites equitativos para todos los hijos también es de suma importancia. Igualmente, se deben buscar espacios de intercambio afectivo único con cada uno de ellos para que sientan que reciben exactamente lo que necesitan cuando más lo requieren.
Si no manejo la situación, ¿qué consecuencias puede generar el síndrome del hijo del medio?
Conforme a Ruth Kristal, un niño o adolescente no atendido emocionalmente tiende a dudar constantemente de sí mismo. “Puede tener baja autoestima, así como desarrollar una rebeldía tóxica contra la autoridad, lo que lo va a ubicar en medio de situaciones conflictivas. Es posible que, en el futuro, se convierta en un adulto resentido, pues no ha sido lo suficientemente reconocido”, respondió la magíster.
En relación al último punto citado, Antonella Galli afirmó que la falta de reconocimiento puede ocasionar la aparición del síndrome del impostor en la adultez. Esta patología se presenta en aquellos que, aunque se muestran muy autosuficientes, nunca se sienten satisfechos con sus logros. “Les cuesta sentirse llenos con las cosas que hacen”, aseguró.
¡Soy el hijo del medio! ¿cómo encontrarle el lado positivo?
Aunque ser el hijo del medio tiene sus desventajas, también tiene un lado positivo y encontrarlo es de muchísima ayuda para combatir este síndrome. “Es posible que lo más destacado es la capacidad de la supervivencia en medio de dos fuerzas que aplastan. El hijo de en medio se ve obligado, cuando tiene los recursos para hacerlo, a desarrollar estrategias para salir adelante sin tener el constante aplauso de los padres, se tiene que hacer un espacio por si mismo, muchas veces logrando más autonomía y más independencia”, asintió Kristal.
“El hijo del medio suele ser más tolerante ante la frustración y los errores. De la misma manera, al volverse más independiente, el niño o niña, en un futuro, también contará con mayor autosuficiencia para afrontar cualquier situación difícil que se le venga. Sin embargo, los chicos no siempre necesitan valerse por sí mismos, pues la guía de los padres es vital durante su camino de crecimiento”, concluyó Galli.