Un año de conflicto en mapas: cómo fueron las avances rusos y contraataques ucranianos

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En Rusia se estimaba que tomaría apenas un par de semanas hacerse con el control de Ucrania. Para ello, mostró una agresiva estrategia inicial atacando desde el norte, en la frontera que Ucrania comparte con Bielorrusia; desde el este, que estaba sumido en combates entre nacionalistas y separatistas desde el 2014; y desde el sur, a través de la península de Crimea, en control ruso desde hace nueve años.

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La respuesta de Kiev, sin embargo, demostró ser más grande que los planes expansionistas de Putin. Para abril del 2022, habiendo pasado los dos primeros meses del conflicto, Ucrania lanzó una primera contraofensiva desde Kiev que en pocas semanas le permitió recuperar el control del norte del país y obligó a que los rusos retrocedan hasta el sureste del territorio.

Apoyados en el financiamiento y armamento enviado por Estados Unidos, la OTAN y la Unión Europea, las tropas leales a Volodymyr Zelensky han conseguido hasta la fecha recuperar el control de la mayor parte de su territorio, concentrándose actualmente los combates en el agitado este.

Cabe resaltar que si bien los combates se producen al este ucraniano, se siguen registrando bombardeos rusos sobre Kiev y otras ciudades como Kharkiv, más pegada al norte del país.

CONQUISTA Y RECONQUISTA

Si hay un elemento que ha permitido vislumbrar cuál es el estado de la guerra entre Rusia y Ucrania este ha sido el control territorial. Semana a semana, los encargados de seguridad de ambos bandos iban informando sobre las ciudades que caían en poder de Moscú o de Kiev.

Ciudades como Mariúpol, Izium, Poltava o Dnipro fueron conquistadas en las primeras semanas del conflicto por las fuerzas rusas, pero consiguieron ser replegadas en los meses posteriores por la contraofensiva ucraniana.

Podríamos resumir las ofensivas y contraofensivas de ambos lados de la siguiente forma: tras el primer golpe ruso, Ucrania lanzó su primera contraofensiva en abril; esta fue seguida de otro avance ucraniano sobre el este del país durante mayo.

Luego, Rusia respondió a finales del mismo, logrando retomar el control de varias regiones en el este. El 14 de junio, con la toma de Izium, Rusia parecía haber retomado el control sobre el noreste de Ucrania.

En julio, Kiev lanzó una enorme operación para mantener el control de Kharkiv, que le resultó exitosa. De la misma forma, ese mismo mes, pudo retomar el control sobre importantes ciudades el sur.

Tras el retroceso en el sureste, Rusia concentró sus ataques sobre el norte de Ucrania, haciéndose con puntos importantes. Esta ofensiva fue respondida por Kiev desde octubre consiguiendo que las fuerzas moscovitas retrocedan y pierdan control sobre sitios claves como Kherson.

Para noviembre, los combates comenzaron a centrarse en el este del país, lo que ha llevado a que el mapa luzca de la siguiente forma hasta la actualidad: