“Aquí el único loco soy yo”, dice expresidente ecuatoriano Abdalá Bucaram sobre polémica con Noboa

El expresidente de Ecuador Abdalá Bucaram, quien en 1997 fue destituido del cargo por “incapacidad mental para gobernar”, aseveró que nadie le “robará” su apelativo de “loco”, en momentos que el oficialismo denunció que la oposición en la Asamblea Nacional (Parlamento) pretende supuestamente declarar “loco” al actual gobernante, Daniel Noboa, para destituirlo.

“Me cabrea que estos ‘hp’ (hijos de puta) del Congreso quieran declarar loco al actual presidente. Aquí el único loco que hay en el país soy yo y nadie se me va robar mi titulo que es una medalla en mi lucha de pueblo contra oligarquía, de pobres contra ricos. Así que déjense de huevadas, aquí el único loco es el loco que ama Abdalá Bucaram (sic)”, escribió en su cuenta de la red social X.

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En 1997, Bucarám, que se refería a sí mismo como “el loco que ama”, fue destituido tras declararse en el Parlamento su “incapacidad mental para gobernar”, declarada sin examen médico ni derecho a la defensa.

El mensaje lo publicó el expresidente (agosto 1996-febrero 1997) en momentos en que la asambleísta oficialista Valentina Centeno denunciaba que supuestamente se pretende declarar “loco” a Noboa para destituirlo del cargo, que asumió el pasado 23 de noviembre.

La denuncia la realizó el jueves cuando la Asamblea Nacional cambió el orden del día para emitir una resolución en la que rechazaron las declaraciones de Noboa a la revista estadounidense “The New Yorker” en un artículo en el que se señala que Noboa ve al colombiano Gustavo Petro como “un snob izquierdista”, al salvadoreño Nayib Bukele como “arrogante” y al argentino Javier Milei “ensimismado”.

En ese artículo, escrito por el periodista Jon Lee Anderson, se señala que algunos asesores del jefe de Estado creen que este está dentro del espectro autista.

El viceministro de Gobierno de Ecuador, Esteban Torres, también alertó el viernes del presunto intento de la oposición en el Parlamento de “inventarse” una presunta incapacidad mental de Noboa, y lo atribuyó al temor a su popularidad y la posibilidad de participar en las elecciones presidenciales de 2025.

“Tanto susto le producen a la troncha política antigobierno en la Asamblea los números del presidente Noboa en popularidad e intención de voto que ahora han planificado incluso hasta inhabilitarle políticamente inventándose y reeditando la ‘vieja confiable’ de la incapacidad mental”, escribió Torres en su cuenta de X.

Desde la oposición, representantes del movimiento Revolución Ciudadana, liderado por el expresidente Rafael Correa (2007-2017) rechazaron las aseveraciones del oficialismo y negaron las presuntas acciones contra el gobernante.

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Ironía de Noboa

Este viernes, durante la ceremonia de inicio de la construcción de una cárcel de máxima seguridad en la provincia costera de Santa Elena, Noboa reaccionó con ironía a las presuntas intenciones de declararlo “loco”.

“Soy loco por impedir que continúe la corrupción en Ecuador. Soy loco porque quiero darle oportunidad a nuestros jóvenes que están desempleados y que están sin oportunidad de estudiar”, ironizó el gobernante.

Y continuó en el mismo tono: “Soy loco porque tengo planes ambiciosos como darles 100.000 becas a jóvenes, como construir cárceles de máxima seguridad, como mejorar el agro, como mejorar las exportaciones de un país”.

“Dicen que soy loco, también, porque arriesgo mi vida todos los días, yendo a los lugares más difíciles, moviendo y haciendo base en Manta una de las zonas que estaban teniendo problemas de seguridad”, apuntó.

“Este loco se las va a hacer muy difícil a ese viejo Ecuador”, insistió Noboa, para quien “viejo Ecuador que tiene sus números dos y números tres en las cárceles de máxima seguridad; ese viejo Ecuador que habla de moralidad, pero sus máximos dirigentes están en la cárcel por corrupción y por estar involucrados en narcotráfico”.

“Ese viejo Ecuador, se los digo hoy y lo continuaré diciendo, no solo que está perdiendo, sino que va a perder también en las próximas elecciones”, concluyó.