Decenas de adultos mayores llegaron a primera hora a los exteriores del Banco de la Nación para cobrar sus pensiones formando largas colas. Ante tal situación, la Policía Nacional habilitó sus unidades para trasladarlos de regreso a sus domicilios a fin de evitar posibles contagios de COVID-19.
Ante la falta de vehículos de transporte público por el estado de emergencia, los agentes policiales distribuyeron a los ancianos beneficiarios del programa Pensión 65 en patrulleros y buses para movilizarlos de manera segura, debido a que son población de riesgo ante el nuevo coronavirus.
Asimismo, los efectivos de la PNP realizaron charlas de sensibilización en los exteriores del establecimiento financiero para prevenir la propagación de la infección, que en la región ha afectado a 6 personas a la fecha.
Durante las noches de patrullaje, explicó la comisaria de Cusco, Edith Espejo, se realizan labores de limpieza y desinfección de los indigentes que permanecen en las vías de la ciudad. También se les brinda alimento.