Congresistas de la Bancada Socialista presentaron un proyecto de ley para prohibir que el Estado le otorgue honras fúnebres a expresidentes que hayan sido condenados por la comisión de delitos. Esto en medio del duelo declarado por el Gobierno tras el fallecimiento de Alberto Fujimori.
El proyecto identificado con el número 8914/2024-CR fue planteado formalmente este 13 de setiembre y lleva la firma de Alfredo Pariona como autor, con el respaldo de otros cuatro legisladores de la Bancada Socialista: Alex Flores, Jaime Quito, Silvana Robles y Pasión Dávila.
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La norma, según el documento, busca “resguardar los intereses y la dignidad de la nación peruana, prohibiendo que un exmandatario de la República, que haya defraudado la confianza popular y la legalidad, reciba a su fallecimiento reconocimientos y honores de parte del Estado”.
Para este objetivo, los parlamentarios plantean modificar el Decreto Supremo 096-2005-RE que precisa el Ceremonial del Estado y Ceremonial Regional.
Ahí piden incorporar un texto adicional en la forma del artículo 63-A para que se lea que, si al momento de su fallecimiento, un expresidente cuenta con “una sentencia judicial en su contra por la comisión de algún delito o delitos, el Estado peruano no otorga las honras fúnebres ni realiza homenaje alguno”.
“En este supuesto, el expresidente de la república no recibe ningún reconocimiento, honores o trato especial que prevé la presente norma, bajo responsabilidad. Queda prohibida la declaración de duelo nacional y sus efectos”, señala el proyecto.
En la exposición de motivos, se menciona explícitamente el caso del expresidente Alberto Fujimori, quien falleció el 11 de setiembre y a quien el Gobierno de Dina Boluarte le otorgó las honras correspondientes, al mismo tiempo que declaró tres días de duelo nacional.
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La iniciativa de la Bancada Socialista menciona a Fujimori y hace un recuento de sus condenas, incluyendo los 25 años de prisión por los crímenes de los casos Barrios Altos y La Cantuta, así como otros casos de corrupción y compra de medios de comunicación.
“Consentir que un expresidente de la República, que ha sido condenado por la justicia, reciba homenajes, honores y tratos especiales por haber ejercido el cargo, representa un pésimo mensaje al país y a la ciudadanía. Refleja que no existen valores democráticos ni jurídicos en el país, al punto que el Estado resalta la figura de alguien que traicionó la confianza popular, violando la legalidad en el mayor nivel de gravedad por su condición de primer mandatario de la nación”, explican los congresistas.