El 79% está en contra de que Juan José Santiváñez se mantenga al frente del Mininter

El reajuste en el Gabinete Ministerial efectuado por la presidenta Dina Boluarte a inicios de este mes no logró cambiar la percepción de la ciudadanía. Un 46% cree que se debió hacer un recambio de todos los ministros, incluido el premier Gustavo Adrianzén; mientras un 36% estima que todavía hay quienes deben ser reemplazados, según revela la última encuesta de Datum Internacional para El Comercio.

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Boluarte realizó cuatro cambios de ministros; sin embargo, mantuvo a quienes arrastraban una serie de cuestionamientos y denuncias, como el actual titular del Ministerio del Interior (Mininter), Juan José Santiváñez. Justamente, un 79% de la ciudadanía está en desacuerdo con que el mismo siga en el cargo, apenas un 10% respalda la decisión de mantenerlo dispuesta por Boluarte.

El dato es no menor cuando, justamente, el implementar un plan efectivo contra la delincuencia, que recae en ese sector, es de los principales cambios que, según la misma ciudadanía que desaprueba la labor de la mandataria, conseguiría cambiar su perspectiva sobre su gestión. Un 26% opina ello.

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Y esa es la misma cifra que obtiene la opción de que para que ello suceda Boluarte debería renunciar al cargo. Esta última opción se incrementó significativamente trece puntos porcentuales respecto a la medición del año pasado.

Es, bajo ese contexto, que la aprobación a la gestión de la presidenta Dina Boluarte parece estar estancada, pues se mantiene en 6% este mes, luego de alcanzar su pico más bajo de 5% en junio. El rechazo a la mandataria se mantiene en un 91%.

Análisis...

Capacidad para gobernar, por Urpi Torrado, CEO de Datum Internacional

Nada pareciera impactar la popularidad de la presidenta Boluarte. La aprobación respecto al mes pasado no ha variado y tampoco se observan variaciones significativas en los últimos meses, pese a los logros mencionados en el discurso de 28 de julio y al reciente cambio de ministros. Acciones que suelen mejorar la opinión pública, pero que en este caso no estarían siendo percibidas. 

En vista del bajo o nulo impacto, la encuesta de Datum-El Comercio preguntó por qué podría mejorar o qué tendría que hacer Boluarte para subir su aprobación. Importante notar que hay una cuarta parte de peruanos que considera que no está en capacidad de ejercer el cargo, por lo que propondrían la renuncia como una solución. Por otro lado, quienes creen que puede mejorar la gestión mencionan los temas de seguridad ciudadana y la reactivación económica. Más allá de los logros o acciones que el Ejecutivo anuncie, si la población no ve resultados concretos en su vida diaria, como mayor seguridad en las calles o alivio económico en sus hogares, lo que queda es una sensación de ineficacia e incapacidad. Pese a la mala evaluación, se aprecia una diferencia en la calificación de los ministros que lideran las carteras relacionadas a estos dos temas. Mientras que la desaprobación a Santiváñez muestra una tendencia negativa, la de Arista estaría estancada y tiene la mejor aprobación entre los ministros evaluados. 

La crítica trasciende a estos dos despachos, la crítica es hacia la composición del Gabinete.

Casi la mitad de los encuestados (46%) opina que Boluarte debió cambiar a todo su Gabinete, incluyendo al primer ministro Adrianzén, como una medida necesaria para recuperar la confianza. Un 36% se mostró más flexible, indicando que aún hay ministros que deben ser reemplazados para mejorar la efectividad del gobierno. Ambas respuestas coinciden en la percepción de que los cambios realizados no han sido suficientes hasta el momento.

El panorama es complicado para la presidenta Dina Boluarte. Aunque parezca asegurada la vía al 2026, no lo está. La exigencia ciudadana sigue en aumento, así como el sentimiento de rechazo hacia la gestión y su equipo de trabajo.

El periodista y analista político Pedro Tenorio, apuntó que la encuesta muestra cómo la inseguridad ciudadana “es el tema más crítico para el gobierno” y por ende hay una demanda de la ciudadanía por una estrategia eficaz contra la delincuencia.

“Y pone en evidencia el fracaso del ministro del Interior [Santiváñez] en sus cuatro meses de gestión. De nada sirvió que el premier Gustavo Adrianzén asegurara que Santivañez ‘viene combatiendo a la delincuencia como nunca antes se ha hecho’. Estos resultados evidencian lo alejado que está el Poder Ejecutivo de las expectativas más urgentes de la población”, sostuvo Tenorio.

Adicional a ello, apuntó que los cambios ministeriales efectuados por el Ejecutivo “no sumaron a favor de Boluarte” y que “fueron otra oportunidad perdida”.

“En los últimos cuatro meses (desde junio) la desaprobación presidencial se mantiene en 91%, por más esfuerzos propagandísticos de sus ministros y el absurdo discurso de cinco horas por fiestas patrias en que intentó convencer al país que tenía muchos logros que mostrar. El veredicto es políticamente inapelable: 9 de cada 10 peruanos desaprueba su gestión”, aseveró.

Por su parte, en analista político José Carlos Requena indicó que los cambios en el Gabinete Ministerial suelen significar una expectativa de cambio; sin embargo, en este caso “correspondió a sectores que no eran percibidos por la población como los prioritarios y, en esa medida, el hecho que no haya ninguna variación en la situación de aprobación [de Boluarte]refleja eso”.

Requena también apuntó que el mensaje de 28 de julio fue una oportunidad perdida, lo que se suma ahora a lo ocurrido al recambio en el Gabinete Ministerial. Resaltó que el gobierno y en particular Boluarte “ha avanzado con desdén de lo que piensa la gente”, como una suerte de “‘acá no pasa nada y yo continúo’”.

“En general, ella tiene una mirada bien, no sé si es poca sensibilidad, poco olfato, pero claramente está desconectada de lo que piensa la gente”, aseveró.

Requena también destacó el incremento en la cifra de aquellos que consideran que Boluarte debe renunciar, lo que experimenta un cambio significativo respecto a la última medición. Pasó de 13% a 26%, respectivamente. Y abre un nuevo frente.

En tanto, el analista político Enrique Castillo subrayó que la presidenta Dina Boluarte “no solamente ha mantenido su actitud distante, alejada, aislada de la población y de la prensa, sino que además ha reforzado una serie de defectos políticos que no ha querido cambiar”.

Uno de ellos, y el más grande es, a su juicio, el rodearse de gente —ya sea en su gabinete o en su círculo más próximo— “que le hace la corte”, privilegiando siempre “a los incondicionales”, lo que acentúa todavía más su aislamiento.

“El cambio de gabinete ha sido más de lo mismo. Ha sido una decepción para mucha gente. Porque, justamente, uno de los problemas mayores que tiene la población, que cada vez es más notorio y desenfadado, es el tema de la inseguridad. Y en ese tema, que es el primero que debía responder la presidenta, pues ha preferido mantener en el gabinete a un ministro que es un operador político, más que un técnico al servicio de la población”, manifestó Castillo.

Justamente, agregó que cuando un ministro del Interior asume ese papel, lo lleva a hacerse más conocido por sus denuncias que por la eventual labor que puede realizar.

“Él [Santiváñez] no figura en los titulares de los operativos, figura en los titulares las noticias de sus enfrentamientos, de sus comidas en un chifa, de las grabaciones clandestinas, de las acusaciones que tiene y de cómo le limpiaba el camino a la presidenta. Eso es lo que lo ha hecho mucho más conocido y lo que se ha hecho popular entre la gente. Nadie sabe qué está pasando con la estrategia de lucha contra la delincuencia”, puntualizó Castillo.