Investigadores chinos han identificado un gen que desempeña un rol clave en el envejecimiento cerebral de primates no humanos, lo que contribuye al entendimiento del mecanismo molecular saludable de este proceso.
El envejecimiento cerebral resulta un proceso complejo que implica la regulación precisa de múltiples regiones del mismo. Todavía es necesario investigar estos mecanismos moleculares en primates no humanos.
Los investigadores del Instituto de Zoología de Kunming, la Academia de Ciencias de China y otras instituciones científicas estudiaron las alteraciones que ocurren durante el envejecimiento a través de 547 transcriptomas procedentes de 44 áreas cerebrales de cuatro macacos Rhesus jóvenes y tres envejecidos.
Un transcriptoma es una colección de todas las lecturas de genes presentes en una célula. Puede ayudar a los investigadores en obtener una imagen completa del genoma y sobre qué genes están activos en determinadas células.
De acuerdo con un informe publicado en la revista Genome Biology, los especialistas chinos encontraron una tendencia decreciente de conexión entre múltiples regiones cerebrales y entre los hemisferios izquierdo y derecho del cerebro durante el envejecimiento.
Los mecanismos de envejecimiento entre diferentes áreas cerebrales son convergentes en gran medida.
Los investigadores identificaron un gen llamado PGLS que tenía un nivel más alto de expresión en el cerebro de los macacos envejecidos.
Luego estudiaron la función de niveles más altos de PGLS en ratones. Los ratones con niveles más altos de PGLS mostraron capacidad deteriorada de aprendizaje y la actividad locomotora, así como una disminución en la ingesta de alimentos.
También descubrieron que la sobreexpresión de PGLS inducía una disminución en el número de células y la pérdida de la sinapsis, una estructura que permite a una neurona transmitir señales a otra o a la célula objetivo.
Los estudios proporcionaron información sobre el mecanismo molecular del envejecimiento cerebral saludable y se puede considerar el gen PGLS como un nuevo biomarcador para este proceso en investigaciones futuras, señalaron los especialistas.
Xinhua