Centro de reciclaje BMW: ¿cuáles son las piezas de los autos que se reutilizan?

El Centro de Reciclaje y Desmantelamiento de BMW Group (RDZ) juega un papel importante para cumplir con la promesa de sostenibilidad de BMW. Si bien es quizás el componente menos publicitado y reconocido, es donde se demuestra su compromiso corporativo. Por ello en esta nota te vamos a contar cuáles son las autopartes que se reciclan.

Tomar piezas viejas y usadas y reutilizarlas constituye el núcleo del compromiso de BMW. De hecho, los nuevos vehículos BMW contienen hasta un 30 % de materiales reciclados y reutilizados. Desde la llegada hasta la eliminación sin ceremonias, así es como termina la vida de hasta 10.000 vehículos al año.

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El primer paso en el proceso es llevar los vehículos allí. Prototipos, vehículos destrozados, autos de prensa, incluso vehículos de películas, todos tienden a encontrar su camino aquí. Más que una simple metáfora esotérica de la reencarnación, las piezas de estos vehículos eventualmente se reutilizarán. Casi ningún BMW, MINI o incluso Rolls-Royces están fuera del menú de la hambrienta planta de reprocesamiento.

Las baterías y los componentes de los vehículos eléctricos se fabricaron desde el principio para que fueran reutilizables. Esa es una de las principales razones por las que encontrará de todo, desde el ActiveE original hasta los primeros modelos i4. Celda por celda, las baterías se prueban y los módulos utilizables se retiran y se envían a una planta que recicla baterías. Dado que las normas de la UE exigen que se recicle el 50% del peso de la batería, es simplemente el costo de hacer negocios. Hay casos puntuales en los que las baterías se utilizan para alimentar equipos en el centro de desguace.

Posteriormente, o si el vehículo no es un vehículo eléctrico, se recogen las piezas. A partir del historial del software y el diagnóstico manual, los técnicos pueden determinar qué se puede vender como piezas usadas certificadas. Después de detonar las bolsas de aire y drenar los líquidos, es hora de ensuciarse. Una pequeña excavadora impulsada por componentes EV reciclados retira el motor, el arnés de cableado y el interior. Todo lo que queda es enviar el chasis a través de un compactador de servicio pesado, comprimiendo el vehículo en un cubo.

El Centro de Reciclaje y Desmantelamiento de BMW Group es parte integral de las operaciones de BMW. Hasta el 95 % del vehículo original se recicla de alguna manera o forma. Y eso no es algo que vaya a cambiar pronto. “Todos y cada uno de los vehículos que BMW planea sacar a la carretera en los próximos años deben ser reciclables al menos en un 95 por ciento”, afirma Alexander Schüll, director de la planta. Los plásticos, los textiles, el hierro y los metales no ferrosos se reciclan fácilmente. Por supuesto, nadie sabe en qué se convertirán en su próxima vida.

Todo se relaciona con la economía circular: la hoja de ruta de BMW para el futuro. Están tratando de hacer el auto más ecológico posible, y el reciclaje de componentes viejos es una parte integral de eso. Otro beneficio es la capacidad de evaluar las partes del vehículo al final de su ciclo de prueba. Eso hace que sea más fácil para BMW mejorar la próxima iteración de cualquier tecnología que se desmantele.

Si estas unidades recicladas terminan en una nueva Serie 2 o en el refrigerador de otra persona, es algo irrelevante. La parte importante es que BMW claramente está cumpliendo su promesa, y su responsabilidad legal, de reciclar vehículos. Como recordatorio, los objetivos de BMW para 2030 incluyen una severa reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, 7 millones de vehículos eléctricos lanzados al mercado, menores emisiones de fábrica y la cadena de suministro más sostenible del mercado. El Centro de Reciclaje y Desmantelamiento de BMW Group hace que esos objetivos sean aún más alcanzables. Incluso si no siempre está en el centro de atención.