Las personas carismáticas nos producen sentimientos positivos. Se trata de una virtud que refleja buenas actitudes y comportamientos al relacionarnos con los demás, pero también es el reflejo de un modo de estar y entender el mundo.
El carisma es el don de atraer y captar a una multitud. Para los griegos se trataba de un “don” otorgado por los dioses. Todos conocemos a personas carismáticas, que se distinguen porque sentimos admiración hacia ellas y nos gusta pasar tiempo a su lado. El carisma, además, es un modo de estar en el mundo con los demás, que genera sensaciones positivas en los otros y sobre todo de motivación.
¿Cómo son las personas con carisma?
- Expansivas y constructivas, suelen mostrarse relajadas.
- Son respetuosas y muestran un interés sincero y honesto hacia los demás, eso hace que generen simpatía.
- No tienen miedo a ser juzgados. Es más, muestran una enorme confianza en su capacidad para llegar a acuerdos.
- Son líderes naturales. Han desarrollado habilidades comunicativas que les ayudan a construir vínculos positivos con las personas de su entorno.
- Sus relaciones se basan en el respeto a sí mismos y a los demás.
- Son generadores de movimiento y transformación, buscan soluciones ante las dificultades y mostrando una enorme creatividad.
Claves para potenciar tu carisma
Potenciar nuestro carisma no será algo complicado siguiendo los siguientes pasos:
- Aprende a identificar tus emociones: Para poder comunicarnos con los demás y llegar a acuerdos es importante identificar nuestras emociones, ya que una persona carismática se regula emocionalmente de forma efectiva.
- Aprende asertividad: Busca las palabras adecuadas para expresar emociones, opiniones y necesidades sin agredir a los demás, para alcanzar acuerdos y fortalecer vínculos de confianza.
- Aprende a motivar a quienes te rodean: Cuando muestras tu confianza en el otro haces que la persona se sienta importante y valiosa. En los momentos complicados trata de ser constructivo, busca soluciones y apoya a los demás con mensajes positivos que fomenten la confianza y el positivismo.
- No critiques ni hables mal de los demás: Es imposible estar de acuerdo con todo lo que el otro diga, pero si no lo estás trata de hacerlo sin hablar mal de nadie ni juzgar. Las personas que critican generan desconfianza.
- No caigas en la queja: Cuando nos quejamos, podemos generar sentimientos de culpa y negatividad en los demás- Expresa tus sentimientos negativos si es necesario, pero no desde una posición víctima o de reproche a los demás.
- Sonríe: El lenguaje corporal es clave cuando se quiere ser una persona más carismática. Además de aportar en nuestro bienestar, segrega endorfinas, hormonas de la felicidad. Mostrar un lenguaje corporal abierto y positivo invita al acercamiento y la confianza.
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