Marco Quilca León

El contexto no era nada favorable. La ‘U’ no solo empataba ante UTC, sino que también sufría las lesiones de Edison Flores y Rodrigo Ureña -terminó expulsado al final- que se sumaban a los posibles sancionado por la gresca en la fecha pasada ante Melgar (Corzo, Murrugarra, Alex Valera, Yuriel Celi y Aamet Calderón) y padecía uno de sus peores partidos. Pero apareció Gabriel Costa, el héroe inesperado, el uruguayo que hace algunas semanas dejó Alianza Lima para vestirse de crema y anotar un golazo de tiro libre (93′) para el triunfo 1-0 ante UTC que retumbó el estadio Nacional y dejó todo listo para la celebración por los cien años de la institución merengue. La noche eterna empezó ayer.

LEE: Evelyn Inga y por qué su resultado en París 2024 es el más importante para el atletismo peruano en unos Juegos Olímpicos

“Es una emoción enorme por todo lo que es la ‘U’”, dijo un emocionado Costa después del partido. Jugó en Cristal -fue campeón- y en Alianza, pero la camiseta crema tiene un peso especial en él. Y el golazo sirve también para que los estudiantiles vuelvan al triunfo tras un tropezón ante Melgar que hizo tambalear los cimientos muy bien construidos del vigente y más campeón del fútbol peruano. Con los tres puntos, Univeristario se colocó en la tercera casilla del Torneo Clausura, detrás del líder Alianza (12 puntos) y Cristal (10 pts.); aunque perdieron la cima del acumulado ante los celestes (ambos con 50 unidades, pero los celestes tienen +34 goles, mientras que los cremas +32).

La victoria -hay que decirlo- también es un llamado a la tranquilidad después de un pésimo partido colectivo que tuvo daños colaterales que podrían traer consecuencias en los próximos encuentros. Edison Flores salió al inicio del segundo tiempo por una lesión en el muslo derecho y Rodrigo Ureña abandonó el campo en similar condición, aunque lo del chileno podría ser un desgarro que lo alejaría de las canchas por unas cuantas semanas.

La ‘U’ se complicó increíblemente ante un UTC que llegó al encuentro con una racha de 21 partidos sin ganar de visita (desde mayo de 2023). Tuvo el balón, pero no hubo precisión por parte de un Ureña que cuando está con bajo rendimiento expone a sus compañeros. Acostumbrados a un equipo avasallador de local, esta vez el hincha sufrió sobremanera con la falta de profundida: un solo remate a portería en el primer tiempo. Ya en la segunda mitad, más por empuje, jerarquía y entereza física, los cremas arrinconaron a los cajamarquinos que tuvieron un par de ocasiones muy claras para ponerse arriba en el marcador, pero en todas las situaciones apareció la figura de Diego Romero.

Tabla de posiciones Torneo Clausura.
Tabla de posiciones Torneo Clausura.
MIRA: María Belén Bazo: de ser medallista y una promesa en gimnasia a una diploma olímpico histórica en vela en París 2024

De Diego para Gabriel

Dos tanques en ataque puso UTC: los colombianos Jarlim Quintero (1.82 metros) y Víctor Perlaza (1.85 mts.). Y con balones largos hizo daño. Atrás, Williams Riveros (esta vez de stopper por derecha), Gustavo Dulando (líbero) y Matías Di Benedetto (stopper por izquierda) sufrieron en cada balón dividido. En ningún momento encontraron la receta para frenar a los atacantes y casi siempre quedaron expuestos. Los carrileros (Polo por derecha y Cabanillas por izquierda) también la pasaron mal. En defensa perdieron en velocidad y en ataque no generaron ninguna jugada de peligro.

Con un Ureña totalmente errácito (76% de precisión en sus pases y 24 balones perdidos, según las estadísticas de SofaScore) y un Jairo Concha desaparecido, el sacrificio físico de Martín Pérez Guedes no sirvió de nada. La ‘U’ nunca pudo controlar el mediocampo ni supo frenar a Mario Otazu, paraguayo que mostró muy buenas condiciones con el balón.

La enorme atajada de Diego Romero para salvar a la 'U' minutos antes del gol de Gabriel Costa. (Foto: Jesús Saucedo / GEC)
La enorme atajada de Diego Romero para salvar a la 'U' minutos antes del gol de Gabriel Costa. (Foto: Jesús Saucedo / GEC)

Arriba Flores (en el primer tiempo), el Tunche Rivera y Cristopher Olivares (ingresó en reemplazo del ‘Orejas’) no tuvieron situaciones claras de gol. Hicieron diagonales, salieron del área, buscaron espacios, pero la imprecisión en la volante hizo que el balón casi nunca les llegue con ventaja. Y también, claro, el buen orden táctico impuesto por el conjunto cajamarquino.

Los minutos pasaban, el Nacional murmuraba y los cambios no hacían la diferencia en el local. Entraron Horacio Calcaterra, Segundo Portocarrera (tuvo un blooper que pudo costarle caro) y el propio Gabriel Costa, y la ‘U’ no pudo cambiar de cara, no pudo jugar mejor. En medio de ese momento de tensión, con Flores y Ureña sentados en el banco de suplentes con hielo en la zona de la lesión, apareció Diego Romero. Sacó dos mano a mano que valen igual que el golazo de Costa. Por eso el equipo fue a abrazarlo ni bien sonó el silbato del árbitro. Le llegaron poco, pero siempre respondió. Arquero de equipo grande, dicen.

Patrick Zubczuk no puedo ante el gran disparo de Gabriel Costa. (Foto: Jesús Saucedo / GEC)
Patrick Zubczuk no puedo ante el gran disparo de Gabriel Costa. (Foto: Jesús Saucedo / GEC)

Y luego, claro, apareció el momento soñado por Gabriel Costa. Minuto 93′, falta cerca al área rival pero del lado del tiro de esquina. Casi como un córner más cerca. Sin ángulo. Pero el uruguayo se tuvo fe para sacar el remate y colgar a un Patrick Zubczuk que había hecho un gran partido hasta el gol. Pudo hacer algo más, quizá, pero tampoco tiene la culpa. Fue un golazo para empezar a celebrar los cien años del club, la noche eterna que empezó en el Nacional y continuará este martes para recibir el 7 de agosto a lo grande. La ‘U’, su gente y Gabriel Costa celebran. Tienen motivos para hacerlo.