Un calendario de 24 fechas: las grandes y riesgosas decisiones tomadas para la Fórmula 1 - 2024 con el fin de darle emoción a la categoría | ANÁLISIS

Con el campeonato casi definido, tanto en las coronas de pilotos como en constructores, y con varias escuderías afirmando que no se preocuparán por implementar mejoras en sus monoplazas actuales con el afán de meterse de lleno en la temporada venidera, más de uno está hablando más de la temporada 2024 que de las diez carreras que faltan para cerrar el año en curso. Verstappen ha logrado convertir la F1 en un deporte donde 19 pilotos corren todos los domingos para ver quién es el segundo mejor del campeonato. Es más, en estos días de escalofriante dominio, la FIA está considerando eliminar el uso del DRS en las jornadas de clasificación, a sabiendas de que el monoplaza que mejor rendimiento tiene con este es Red Bull, tal vez intentando equiparar en algo un torneo que ha perdido toda la emoción.

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En este contexto, el calendario de competencias para el año 2024 ya ha sido revelado. Se trata de un campeonato que abarcará 24 fechas y nueve meses de competición. Esta extensión temporal entre la primera y la última fecha no se había registrado desde 1977, cuando el GP inaugural de Buenos Aires compartió la misma distancia de tiempo con el cierre en Fuji. La distinción radica en que en aquellos años solamente se llevaron a cabo 17 jornadas, mientras que actualmente se han incrementado a 24. Entre las novedades destacadas figura la programación de tres carreras para los días sábados, además del retorno del GP de China, que fue cancelado debido al Covid-19 en 2020 y no había sido nuevamente incluido en la agenda hasta ahora.

En primera instancia, el calendario está a todas luces más organizado que años anteriores. Los pilotos y las escuderías no tendrán que cruzar el mundo desordenadamente, ya que han generado ejes de países para que la logística sea más sencilla pese a la gran cantidad de jornadas. Así, la primera fase del calendario se disputará entre el Medio Oriente (Baréin y Arabia Saudita) y Asia (Australia, Japón y China). La segunda parte del campeonato se llevará a cabo en Europa, a excepción de Miami y Canadá (desplazamientos “sencillos” desde Europa). Mientras que la tercera y fase final recorrerá Asia (Azerbaiyán y Singapur), pasará por América (Austin, México, Brasil y Las Vegas) y volverá a Oriente Medio para cerrar la temporada en Qatar y Abu Dhabi.

Más allá del gran número de carreras, una de las mayores novedades ha sido la inclusión de tres pruebas los sábados. Así, los Grandes Premios de Bahréin y Arabia Saudita, que son los que abrirán la temporada, adelantarán la tradicional jornada dominical en salvaguarda de consagrar el Ramadán y las costumbres. Para Las Vegas, por motivos más mundanos, también se ha considerado que la prueba se dispute el sábado. Un capricho totalmente coherente si tomamos en cuenta que esta semana Liberty Media ha confirmado que la organización del GP de Las Vegas le está costando más de 400 millones de dólares. Una inversión importante que harán hasta lo imposible para recuperarla lo antes posible, incluso yendo en contra de las buenas costumbres de la categoría.

Aunque aún no hay información sobre cuáles serán las jornadas Sprint del próximo año, ya se sabe cuántas serán. “Habrá seis carreras sprints, y las anunciaremos creo que en septiembre, porque tenemos una reunión de la Comisión de Fórmula 1 programada para el fin de semana del Gran Premio de Bélgica. Además, estamos estudiando la creación del concepto ‘Grand Slam’. Así, cuando en un fin de semana un piloto obtenga las dos poles y gane dos carreras (regular y sprint), debería ser reconocido con algo extra”, ha confesado Stefano Domenicali, CEO de la Fórmula Uno. Una decisión que daría más riesgo y emoción a una categoría que este año parece estar destinada a moverse al antojo de Max.