¿Es un impedimento o una desventaja tener pies planos para correr? Con un contundente no responde Giovanni Languasco, director general de GM Podología Deportiva y actual podólogo de la Federación Peruana de Atletismo, mientras nos muestra los diagnósticos de deportistas connotados, que sorprendentemente tienen esta patología, y que a pesar de ello, son campeones nacionales y atletas olímpicos.
Antes había el mito que si tenías pie plano no podías realizar ningún deporte, hoy lo crucial es saber cómo está la activación y regeneración muscular. “Si nosotros reconocemos cómo está nuestra armonía y nuestra reacción muscular, el pie plano óseo, laxo o cualquiera de sus derivaciones, pasarán a un segundo plano. Con unas plantillas personalizadas y adecuadas al biotipo y actividad deportiva, podemos evitar hasta un 70% de lesiones a futuro”, declara Languasco.
El pie plano: explicación y causas
El libro “Quince lecciones sobre patología del pie”, define el pie plano como una deformidad en valgo del retropié, asociada generalmente a un hundimiento de la bóveda plantar, y cuya característica principal se manifiesta en una depresión excesiva del arco longitudinal.
Giovanni Languasco asegura que los pies planos surgen por dos factores: articular óseo; asociado al factor genético, y tejido blando; asociado al factor adquirido. En el primer caso, no debemos pasar por alto el gateo, ya que es en esta faceta donde se empieza a formar la musculatura, beneficiando un mejor giro o rotación del fémur y la zona pélvica. Sucede que “los bebés que no gatean, o peor aún, utilizan el andador, no van a tener el desarrollo muscular adecuado, y por lo tanto, sufrirán mucho, no solo en la parte de reacción muscular sino también en psicomotricidad", señala el especialista.
Cabe destacar que el pie es solo la manifestación de cómo se desenvolvieron las caderas. En el segundo caso, hablamos de un factor adquirido porque es relativo al calzado designado.
El especialista enfatiza que en los niños “los zapatos no pesen más del 10% al sostenerlos con una mano, ese peso mínimo para el niño significa el doble o el triple”
Por otro lado, una mala postura ejercerá una presión cardiorrespiratoria; por tal motivo, quienes padecen pies planos, se cansan y agitan más rápido y tienen una respiración alterada. La solución está en la prevención, acudiendo primero al podólogo, y en una edad más avanzada, al podólogo deportivo. Este último lo que hace es reconocer cómo está el cuerpo de la persona para convertir los defectos en virtudes. “Cuando detectamos torsiones pronunciadas en los atletas, realizamos cambios y manejos de técnica, con el objetivo de beneficiar al deportista en las zonas donde se sienta menos productivo”, explica el experto.
Importancia de las plantillas
Las plantillas no forman el arco, ni basan su funcionamiento en la parte ósea, su tarea es neutralizar las cargas musculares. Tanto en la reacción muscular del pie (intrínseco) como en la pierna (extrínseco), disminuyen las cargas donde existe demasiado pronunciamiento. Caso contrario, en cargas débiles, que es donde incurren las lesiones, las activa. “Las cargadas las relajamos y las pasivas las activamos, a esto llamamos neutralizar. Una vez que neutralizamos las cargas musculares, el movimiento de la persona será más idóneo, obteniendo en cada movimiento, una participación del 100% por cada lado”, expone Languasco.
Para determinar el tipo de plantilla, debemos de tomar en cuenta el gesto deportivo, es decir, la acción que comete el deportista según la actividad deportiva en la cual se desenvuelve, “porque no es lo mismo hacer plantillas para un maratonista que para un atleta de salto largo”, refiere Languasco.
Corrigen la postura, mejoran la zona cardiorrespiratoria, ayudan a minimizar las lesiones e inflamaciones a nivel muscular, activan la circulación, entre otros.
El resultado a nivel postural, en el caso del pie plano pronunciado, se aprecia ni bien se coloca la plantilla. “Es muy normal que en los primeros 10 días se sienta una molestia porque activaremos los músculos que antes estaban pasivos, esto puede producir una inflamación entre el cuarto al séptimo día, la cual se adecuará hasta llegar a su punto más alto para finalmente desinflamar".
Se recomienda que durante los primeros 15 días sirvan solo para caminar, pasado ese tiempo se puede entrenar con ellas. "Recién a los 45 días, podemos utilizarlas a nivel competitivo”, concluye Languasco.