Petro-Perú: La plana mayor de la petrolera visita asiduamente el MEF, ¿acaso por un nuevo rescate?

En efecto, este Diario ha constatado la visita, hasta en dos oportunidades, del presidente de Petro-Perú, Alejandro Narváez, al ministro de Economía y Finanzas, Raúl Pérez-Reyes.

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La primera de ellas (13 de junio) acompañado por los gerentes de finanzas y recursos humanos de la estatal, Luis Casimiro Morales García y José Manuel Rodríguez Haya, respectivamente.

Y la segunda (23 de junio) junto al gerente general de la estatal, Óscar Vera, y la plana mayor del Ministerio de Energía y Minas (Minem), liderada por su titular, Jorge Luis Montero, y la viceministra de hidrocarburos, Iris Cárdenas.

¿Qué abordaron los funcionarios de Petro-Perú en ambas reuniones?

Especialistas consultados para este artículo aseguran que el motivo no sería otro que la solicitud de un nuevo rescate financiero, necesario para que la estatal pueda honrar sus obligaciones con el MEF, los bonistas de la refinería y sus proveedores de hidrocarburos locales e internacionales.

Y es que Petro-Perú corre contra el reloj porque a fines de junio - hasta hoy- debe cancelar parte de su deuda (US$170 millones) con los bonistas y bancos del crédito sindicado de la refinería de Talara, anota Fernando De la Torre, exgerente de finanzas de Petro-Perú.

Pero eso no es lo único. El economista advierte que a fines de julio se vence también el plazo para que Petro-Perú devuelva al MEF los US$1.000 millones de las líneas de crédito que contrató con el Banco de la Nación en 2022 y 2024 para que pueda realizar operaciones de importación de petróleo crudo y combustibles.

Esto en virtud de los rescates financieros recibidos por la estatal en ambos años (US$500 millones del DU 023-2022 y US$500 millones del DU 004-2024).

Del mismo modo, agrega Torres, se vencen a fines de julio los S/500 millones en documentos cancelatorios que recibió en virtud del rescate financiero del 2023 (DU 010-2023).

Y, por si fuera poco, le toca repagar también a fines de setiembre el préstamo de US$1.000 millones con garantía del MEF que recibió en el 2024 (DU 004-2024).

El rescate planteado por Petro-Perú, explica De la Torre, consistiría en una nueva postergación o capitalización de estas cuantiosas obligaciones.

“Lo que es inevitable es la necesidad de caja para pagar proveedores y así evitar quedarse sin inventarios para vender. Para eso (la estatal) necesitaría US$1.000 millones como mínimo y la forma de disfrazar ese rescate sería vía garantía del MEF para un préstamo del Banco de la Nación”, manifiesta el economista.

Este Diario se comunicó con Petro-Perú en busca de un comentario o explicación, pero declinaron dar una respuesta.