La economía peruana muestra hoy signos positivos de cara a su recuperación y, en línea con ello, existen factores que permiten actualizar las previsiones. Esta vez, el BBVA Research actualizó su estimación para el crecimiento de la economía peruana este año de 2,7% a 2,9%.
Hugo Perea, economista jefe del área, explica que dicha revisión al alza responde -entre diversos factores- al impacto favorable del retiro de la AFP sobre el consumo y la economía. “[La revisión al alza] es principalmente por el impacto que tendrá el retiro de fondos de pensiones. Entre 0,4 y 0,5 puntos porcentuales del PBI. No es un impacto menor y eso va a ayudar al crecimiento del presente año”, refirió.
Para el 2025, sin embargo, la revisión es a la baja. “Revisamos a la baja de un 2,9% a un 2,7% porque se va a disipar el efecto del retiro de fondos de pensiones. Hacia adelante, el 2026, nuestra previsión es de 2,7%. A mediano plazo, el promedio de crecimiento de 2026 y 2029, tenemos una previsión de crecimiento de 2,7%”, dijo.
Hasta la fecha, son 3,3 millones de solicitudes de retiro de hasta 4 UIT de los fondos previsionales, según datos compartidos por la Asociación de AFP a este Diario. Se espera una potencial salida de los fondos de cerca de S/30.000 millones.
Otros factores para el crecimiento
Mirando el corto plazo, el dato de abril de más de 5% respondió -además de la regularización de los días de productividad por la no calendarización de la Semana Santa- al crecimiento de sectores extractivos tales como la agricultura y la pesca. Ello ha hecho que el PBI acumulado entre enero y abril sea de 2,4% con un crecimiento de 3,3% del sector primario de la economía. Sumado a ello, la inversión pública tuvo un avance de más de 11% en abril.
¿Se mantendrá dicho dinamismo? Perea, al ser consultado sobre el dato de mayo, adelantó que este será relativamente positivo. Sin embargo, no repetiría el resultado visto en abril.
“Existen algunos indicadores que nos sugieren que habrá algún resultado en mayo. De manera preliminar, será menor frente al 5,2% visto en abril. Sin embargo, será relativamente positivo. [...] Existen algunos indicadores que nos permiten ser positivos para el segundo trimestre, pero también hay algunos elementos que dejarán de inducir un buen resultado”, afirmó.
Con esto último, Perea se refiere a los efectos de la normalización del clima que se disiparán y no sumarán como en meses anteriores. Además, aún está presente un entorno de incertidumbre en el plano local e internacional. En la balanza, también hay factores favorables.
“La captura de anchoveta culminó, pero su impacto no solo se va a sentir en abril donde el sector creció más de 150% y aportó casi cuatro décimas al resultado mensual. Este impacto también se verá en mayo y, en general, a lo largo del segundo trimestre. Además, pensamos que el impacto del crecimiento de la agricultura persistirá en mayo”, acotó Perea.
Otros dos factores suman al crecimiento: la inversión pública creció más de 40% en mayo y, según los indicadores de alta frecuencia del BBVA Research -que hacen seguimiento al consumo y la inversión- muestran también crecimiento superior frente a meses anteriores. “Esto anticipa una recuperación del fasto de las familias, ello también se ha visto en el mercado laboral”, dijo.
Con todo ello, el panorama hacia el segundo trimestre es más favorable: el crecimiento de la actividad se ubicará más cerca del 4% interanual.