Voces del Sol, el coro peruano que destacó en concurso en Europa.
Voces del Sol, el coro peruano que destacó en concurso en Europa.
/ Cristóbal Masías Rheineck

Dicen que el trabajo duro trae resultados. Eso es lo que pasó con el coro peruano Voces del Sol, que corona sus doce años de existencia al quedar entre los tres mejores puestos en el concurso Sing For Gold 2024 - The World Choral Cup, certamen desarrollado entre el 24 y 27 de octubre últimos en la ciudad catalana de Calella (España), donde el Mar Mediterráneo fue testigo del prodigio de los niños y adolescentes que concursaron y se impusieron a otros países, sociedades con siglos de experiencia y fomento de la disciplina, y contra quienes compitieron como iguales.

Tras dos intensos días de competencia en un torneo que reunió a coros de distintos países, el jurado seleccionó a Voces del Sol para avanzar a la Copa Mundial, la etapa final del Mundial de Coros, junto a los competidores Bulgarian Voices (Alemania) y Vocal Ensemble “Fortissimo” (Bulgaria); los tres mejores de una etapa de feroz competencia donde participaron también coros de Francia, Holanda, Eslovaquia, Georgia y Lituania. El campeón mundial fue el coro de Bulgaria.

Vale resaltar también que el Perú destacó en dos categorías: Folklore, donde se llevó el premio Oro VI (el segundo más alto), con 26.00 puntos, esto por interpretar “Mitayi”, una selección de música coral de la costa, sierra y selva; “Tuytunki Carnaval de Tambobamba”, cantada en quechua; y “Contigo Perú” de Augusto Polo Campos. Por encima del Perú solo estuvo Bulgaria. También destacó en la categoría Pop, Jazz, Gospel, con el premio Oro I, quedando a mitad de la tabla con 21.33 puntos otorgados por presentar su espectáculo “Forte”, orientado a combatir el bullying escolar. Ganó en esta categoría Países Bajos.

“El coro tiene un papel muy importante dentro de la música porque es armonía. Es un trabajo colectivo, es como decir una orquesta, pero de voces. Entonces es un trabajo muy interesante”, dijo a El Comercio Claudia Rheineck, directora de Voces del Sol, para resaltar la importancia de esta disciplina. “Hay algo más que es valioso: si bien los chicos tienen mucha experiencia, uno de los de los aprendizajes es que de pronto están en el mismo escenario con coros de muy alto nivel internacional y para ellos ha sido no solo un elemento gratificante, sino también de cómo vencer sus miedos”, dijo por su parte Lucho Quequezana, promotor del coro. Ambos brindaron declaraciones desde Barcelona, a puertas de volver al país.

Ante la presión el ser humano puede quedarse paralizado o agarrar impulso; en el caso de los peruanos ha sido lo segundo. Y lo hicieron bien a pesar de la juventud, porque hubo coros de adultos, que además provienen de países con una amplia tradición coral, como es el caso de Bulgaria, que es una potencia. “Los chicos subieron, pero te juro, te juro, que la presentación fue increíble. Y eso dice mucho también de la capacidad que tienen ellos de estar en una competencia internacional del más alto nivel, pero al mismo tiempo decían que esto lo estaban haciendo por el Perú. Y eso nos emocionó muchísimo”, dijo Quequezana.

“Ellos también a ante ver estos coros tan potentes, tan cuajados, tan sólidos, se nota que no solamente es un trabajo de pocos meses, sino ya es una tradición genética que tienen en sus venas. Los chicos estaban con la boca abierta, pero al mismo tiempo yo tuve miedo: ‘Uy, se me van a bajonear’; pero no. La fuerza peruana salió pero desde adentro del alma y salieron a matar”, dijo Rheineck.

¿Apoyó en algo el Estado Peruano a estos campeones? Solo el consultado de Perú en Barcelona brindó transporte terrestre de los coristas a Calella. Lo demás ha sido autogestión: conciertos profondos, rifas y el apoyo de “padrinos”. “Ojalá que el Estado después de esto pueda reconocerlo y pueda ayudar a todos los grupos que llevan arte a otras partes del mundo”, sostuvo Rheineck.

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