A comienzos de la década del 90, Soda Stereo atravesaba cierto distanciamiento: Gustavo Cerati se inclinó hacia su carrera como solista, Charly Alberti formó una banda llamada Plum y, por su parte, Zeta Bosio se dedicó a la producción de las bandas Peligrosos Gorriones y Aguirre, hasta que sufrió un accidente en el que perdió a uno de sus dos hijos, lo que lo llevó a retirarse de la escena pública.
Tras la tragedia, el trío se volvería a reunir para retomar la música que dejaron luego del lanzamiento de “Dynamo” (1992), el querido y odiado disco de la banda, que incluía toques experimentales y marcaría el estilo de Bosio como solista, un camino lleno de exploración en los sonidos más electrónicos.
Sin abandonar el bajo, continuó su carrera como productor y DJ, faceta que hoy lo lleva a diversos escenarios del mundo con un estilo contemporáneo donde se siente cómodo. Aunque siempre apunta al pasado como las bases necesarias que cimentan su actual carrera en la música electrónica.
“Antes las cosas eran más artesanales, ahora se produce más rápido, lo cual tiene aspectos positivos, como la espontaneidad en la creación, y aspectos negativos como la inmediatez”, menciona el artista, quien también se ve enfrentado a la llegada de nuevas tecnologías. “La inteligencia artificial también es una herramienta en este nuevo trabajo creativo; vino para quedarse, pero el rol del músico sigue siendo el mismo: hay que ponerles alma a las cosas”, agrega.
Rock eterno
Las giras, al igual que la música, son la constante en la vida de Bosio luego de 42 años de trayectoria musical. Recuerda a Chile como el lugar al que viajaron y donde nadie los recibió en su primera gira, y al Perú como el país donde los subieron al techo de una emisora radial cuando ya eran conocidos.
“Nos dijeron que era una entrevista al aire, pero no tan literal. La gente tapaba la calle, se asomaban por todos lados, lo cual era inesperado porque era imposible reconocernos desde abajo. Capaz solo veían nuestros cortes extravagantes y pensaban que éramos The Cure”, recuerda Bosio.
Gracias a aquella etapa, el artista lleva ahora el peso de ser una leyenda del rock argentino, recibiendo pedidos de colaboración o propuestas de composición en las que, según él, siente la presión de que su trabajo no se juzgue de forma objetiva debido al renombre de ‘leyenda viva del rock’ que se le atribuye.
“Siempre me sentí perdido luego de Soda Stereo, es como hacer de Superman y no poder trabajar de nada más, y uno mismo siente que es lo mejor que hizo en la vida. No tomo conciencia de ser un referente del rock; a veces me piden colaborar y me dicen: ‘Tú eres Zeta Bosio, cualquier cosa que hagas está bien’, algo que no siempre es cierto”, menciona el artista.
A pesar de su lucha constante entre su carrera solista y el renombre de Soda Stereo, Bosio no pierde el amor hacia aquella agrupación, que fue el primer grupo de habla hispana en conseguir un éxito masivo en Latinoamérica y que nunca deja de brindar sorpresas, como el reciente descubrimiento de un cassette con temas inéditos del legendario trío argentino cuando aún se llamaban Los Estereotipos.
“Aparece un tema sin nombre, en el que se escucha a Gustavo muy joven hablando sobre el cielo. También están las versiones de 1981 de ‘¿Por qué no puedo ser del Jet-Set?’, ‘Dime Sebastián’ y ‘Debo soñar’, todas en su forma prehistórica”, menciona Bosio, quien espera iniciar la campaña a finales de año para lanzar estos temas como regalo de Navidad o apertura del nuevo año.
Fecha: Viernes 22 de noviembre
Hora: 7:00 p.m.
Lugar: Centro de Convenciones Barranco
Entradas disponibles en Joinnus.