La ley marcial que duró seis horas: 5 claves para entender qué pasa en Corea del Sur

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“La Asamblea Nacional, que debería haber sido la base de la democracia libre, se ha convertido en un monstruo que la destruye”, dijo el mandatario por la noche en una inesperada declaración televisada que rápidamente provocó el caos.

Según Yoon, la ley marcial ayudaría a “reconstruir y proteger” al país de “caer en las profundidades de la ruina nacional” y permitiría “salvaguardar a una Corea del Sur liberal de las amenazas planteadas por las fuerzas comunistas de Corea del Norte”, así como “eliminar los elementos antiestatales que saquean la libertad y la felicidad del pueblo”.

El anuncio provocó enfrentamientos entre manifestantes y la policía a las puertas de la Asamblea Nacional, donde se coreaban frases como “Acabemos con la ley marcial” y “¡Detengan a Yoon Suk Yeol! Algunos de los ciudadanos intentaron entrar en el edificio mientras los agentes intentaban impedírselo, según mostraron las imágenes de televisión.

No mucho después, los legisladores de la oposición votaron para detener el decreto, como está previsto en la Constitución y, tras las críticas internas y externas, finalmente Yoon se volvió a dirigir al país en la madrugada para revocar, tras una reunión extraordinaria de su gobierno, la ley marcial que había declarado seis horas atrás.

Estas son algunas de las claves para entender la crisis que se desató en Corea del Sur.

Desde que llegó al poder en el 2022 en una elección apretada, Yoon ha mantenido un enfrentamiento con la oposición que hoy tiene mayoría en el Parlamento. El mandatario ha denunciado reiteradas veces un estancamiento político que ha obstaculizado su mandato.

Por ello, el mandatario decidió decretar la ley marcial al denunciar que la oposición utiliza repetidamente su mayoría en la Asamblea Nacional para destituir a miembros de su gabinete y bloquear la aprobación de los planes presupuestarios de su gobierno.

De hecho, el anuncio de Yoon llegó luego de que el principal bloque de la oposición, el Partido Democrático (PD), aprobara sin contar con el apoyo del gobernante Partido del Poder Popular (PPP) unos presupuestos generales para el 2025 con múltiples recortes, además de mociones para destituir al fiscal general y al responsable de monitorizar las cuentas de los organismos públicos.

Carlos Aquino, coordinador del Centro de Estudios Asiáticos (CEAS) en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, considera que esta situación llevó a Yoon a tomar una medida desesperada. “Él acusa a la oposición de obstruir la acción del Estado. Y no solo eso, también mencionó que ha habido más de 20 nociones para censurar ministros y dijo que no se puede trabajar así y que, al existir una amenaza permanente del Norte, estas fuerzas que tratan de obstruir el buen trabajo el Estado están coludidas con las fuerzas del exterior”, dice a El Comercio.

El presidente de Corea del Sur tiene la facultad de proclamar la ley marcial cuando sea “necesario para hacer frente a una necesidad militar o para mantener la seguridad y el orden públicos mediante la movilización de las fuerzas militares en tiempos de guerra, conflicto armado o emergencia nacional similar”, según señala la Constitución.

Poco después de que Yoon anunciara la medida, el general del ejército Park An-soo, quien fue nombrado comandante de la ley marcial, prohibió “todas las actividades políticas”, incluidas las actividades de partidos políticos y las manifestaciones ciudadanas.

“Todos los medios de comunicación y publicaciones están bajo el control del comando de la ley marcial”, dijo el general Park. También se prohibió las actividades laborales y la difusión de “noticias falsas”. Aquellos que violen el decreto pueden ser arrestados sin una orden judicial, dijo.

Fue la primera vez en 44 años que un líder surcoreano declaró la ley marcial. La última vez ocurrió en 1980 durante un levantamiento pro democracia contra el ejército.

“Si bien es cierto hasta los años 80 Corea del Sur fue una dictadura bastante fuerte, en verdad hoy es una democracia plena, por lo que la declaración de la ley marcial fue un shock. Yo lo veo como una acción de una persona bastante desesperada, pero en verdad esto podría acelerar la caída del presidente porque su nivel de aprobación es de un 20% para abajo. Causa sorpresa porque se pensaba que esto podría pasar en varios países de Asia, pero no en Corea del Sur, un país con una democracia tan vibrante. Era algo impensable”, dice Aquino.

El anuncio de la ley marcial provocó reacciones de consternación dentro del país. En una transmisión en vivo, el líder de la oposición surcoreana Lee Jae-myung convocó a los ciudadanos a manifestarse frente a la Asamblea Nacional.

“No hay razón para declarar la ley marcial. No podemos dejar que los militares gobiernen este país (...) El presidente Yoon Seok Yeol ha traicionado al pueblo. La declaración ilegal de la ley marcial de emergencia por parte del presidente Yoon es nula y sin valor. A partir de este momento, el señor Yoon ya no es el presidente de Corea del Sur”, dijo Lee, que calificó la medida dada por Yoon de “ilegal, inconstitucional y contraria” a la voluntad del pueblo.

Incluso el líder del partido político de Yoon, Han Dong-hoon, dijo que la decisión de Yoon fue “errónea” y estrechó la mano de Lee Jae-myung cuando los legisladores se reunieron para votar.

Poco después, cuando cada vez más ciudadanos llegaban a la Asamblea Nacional para rechazar la acción presidencial y las tropas surcoreanas trataban de tomar la sede del poder legislativo, la oposición llevó su desafío a Yoon al máximo nivel y en una sesión extraordinaria votó a favor de levantar la ley marcial decretada por el mandatario, lo que, según la Constitución surcoreana, obliga al presidente a retirar esa medida.

La decisión del Parlamento fue apoyada rápidamente por Estados Unidos, uno de los principales aliados de Corea del Sur. Washington, que previamente había expresado su preocupación por la situación en el país asiático, instó a que los incidentes en esa nación se resuelvan “pacíficamente” y “de acuerdo con el estado de derecho”.

Mientras tanto, El won, que cotizaba al alza frente al dólar antes de conocerse la noticia, cayó 2% frente a la moneda estadounidense. La compañía electrónica Samsung, una de las empresas surcoreanas de referencia, retrocedió más del 6% en el mercado londinense.

En medio de la presión y tras la decisión del Parlamento, Yoon levantó la ley marcial esta madrugada, tras una reunión extraordinaria de su gobierno, al tiempo que aseguró que las tropas ya se habían retirado a sus cuarteles.

Es un duro golpe político para un presidente que ha visto descender de manera drástica su índice de aprobación en las encuestas, lo que se ha visto traducido en los últimos meses en manifestaciones en el centro de Seúl que piden su destitución.

“El actual presidente Yoon es uno de los que tiene cifras de aprobación más bajas de los últimos presidentes y también hay varias circunstancias que han venido propiciando esto. Por ejemplo en la reciente elección que hubo de la nueva Asamblea Nacional en Corea en abril, pues nuevamente su partido no tiene para nada un porcentaje favorable para él y está lejos de tener mayoría. Además, el Partido Democrático, tiene cerca del 60% del manejo del Parlamento. Todo eso ha propiciado medidas algo desesperadas de parte de su administración”, dice a este Diario Marco Carrasco, docente de Estudios de Asia Oriental de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de San Marcos.

La crisis por el fallido decreto de ley marcial pone a Yoon en un terreno bastante delicado, sobre todo si se recuerda que la Asamblea Nacional puede destituir al presidente si más de dos tercios de los legisladores votan a favor. El partido de Yoon controla 108 escaños de un total de 300.

“Mucha gente está saliendo a las calles y está pidiendo incluso la vacancia del presidente o su renuncia, el descontento está a este nivel. Y en cierta manera esto es una suerte de nota precautoria para todos porque siempre todo gobierno que entra tiene que tener legitimidad. Y esa legitimidad se tiene que ver representada en el Congreso. El hecho de que no haya eso, muchas veces puede desembocar en situaciones de ese estilo. Es un reflejo de lo que pasa”, dice Carrasco.

Aunque Yoon acusó a la oposición de ser una fuerza pronorcoreana al fundamentar la necesidad de aplicar una ley marcial, los expertos señalan que la crisis en curso es de carácter interno.

Carrasco enfatiza que Yoon ha apalancado el tema de Corea del Norte para usarlo como argumento, pero en realidad está magnificando una situación que no muestra lo que realmente está pasando en Corea del Sur. “El problema es interno, se trata de los malos manejos del gobierno, de la discrepancia que tiene con un congreso en el cual la mayoría es del Partido Democrático y, en realidad, la oposición no está tan lejos de poder declararlo vacante”.

Aquino añade que la situación actual genera preocupación porque Corea del Norte siempre está en busca de alguna debilidad de Corea del Sur para lanzar alguna acción de sabotaje. “Yo espero que esta crisis se solucione pronto, porque Corea del Sur es una pieza básica en toda la estrategia de seguridad en Asia y ahora está muy complicado el panorama con Corea del Norte acercándose más a Rusia. Espero que se solucione pronto porque una crisis permanente en Corea del Sur tendría consecuencias bastante grandes no solo en el tema económico, sino en el escenario político en la península coreana, que ya es bastante complicado”, dice el experto.