En poco más de 24 horas el equipo de la principal figura de la oposición venezolana, María Corina Machado, sufrió dos duros golpes presuntamente orquestados desde el régimen chavista. Analistas consultados por El Comercio anticipan que se trata del refuerzo de las técnicas de intimidación de Nicolás Maduro para frustrar las posibilidades opositoras de arrebatarle la presidencia el 28 de julio.
MIRA: Venezuela: María Corina Machado denuncia un atentado contra ella y su equipo
La madrugada del miércoles 17, el jefe de seguridad de Machado, Milciades Ávila, fue detenido por funcionarios que ingresaron por la fuerza a su vivienda y lo trasladaron a un lugar desconocido, según denunció el partido Vente Venezuela.
A la mañana siguiente, la propia Machado denunció por redes sociales que “agentes del régimen” habían perpetrado un atentado contra su caravana mientras ella y su equipo dormían en una urbanización privada en Barquisimeto (Lara). La líder opositora aseguró que los atacantes habían cortado la manguera de los frenos en uno de los autos, vaciaron el aceite del motor de otro y bañaron a ambos con pintura blanca.
Además, Machado aseguró que dichos agentes los habían seguido luego de celebrar un acto político y “rodearon la urbanización” donde pernoctaron. La exdiputada ha preferido hospedarse en propiedades privadas a causa de las represalias que ha tomado el régimen en contra de los dueños de establecimientos públicos que la han acogido.
“En esta campaña hemos visto un tipo de represión nueva: contra el ciudadano que pone su negocio a disposición del candidato opositor. Nunca lo habíamos visto en Venezuela y uno se pregunta si realmente tiene efecto positivo para Maduro. Considero que es lo contrario, pues afecta a la base del pueblo”, comenta a El Comercio el politólogo venezolano Luis Salamanca.
“En la medida en que se acerca el 28 de julio y el régimen observa que los venezolanos no tienen miedo de seguir apoyando a la oposición, ellos han ampliado la red de represión”, agrega la investigadora y periodista Maibort Petit.
- TÉCNICAS DE COACCIÓN Y AMENAZAS -
Petit recuerda, además, que los ataques contra Ávila y el equipo de Machado son apenas el más reciente de una seguidilla de actos intimidatorios contra el bloque opositor. “Recordemos que hay seis venezolanos en custodia de la embajada argentina en Caracas y otros tantos presos. Cuando uno observa los mensajes que dejaron en los vehículos vandalizados observa que la intención del régimen es ampliar el miedo a través de diversos grupos que cuando se vayan a investigar no tendrán relación con el régimen. Esa es la estrategia que emplean”, alerta.
Según la ONG Foro Penal, este año han sido detenidas en Venezuela 102 personas vinculadas con la campaña de Edmundo González Urrutia, candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) en reemplazo de María Corina tras su inhabilitación. De acuerdo a la organización civil, 77 de esas detenciones se produjeron desde el comienzo formal de la campaña, el 4 de julio.
“El régimen tiene como una de sus narrativas más importantes para esta campaña la de la conspiración en contra de Maduro. Al empezar el año, Maduró aseguró que en el 2023 se habían registrado cinco intentos de magnicidio de los que nadie se enteró. Desde entonces ha mantenido ese discurso de forma permanente, consiste en la criminalización constante de la oposición como un agente de del imperialismo que quiere acabar con la revolución”, advierte Salamanca.
Ambos expertos consultados por este Diario coinciden, además, en que conforme más se acerque el día de la elección, más se intensificarán este tipo de eventos. Según el analista esto respondería a que el chavismo no estaría en capacidad de ganar actualmente. “Acabo de terminar un análisis sobre la evolución histórica del voto y puedo confirmar que el chavismo no ha hecho más que perder votos desde el 2012, cuando obtuvo su más alta votación con Hugo Chávez antes de morir, hasta ahora. Y resulta que quienes han recogido esos votos ha sido el bloque opositor mayoritario”, asegura Salamanca.
La oposición venezolana asegura que la ventaja de González sobre Maduro es irreversible. Petit, alerta, sin embargo, sobre los riesgos que esto acarrea. “El sistema electoral está completamente controlado por el régimen. Está manipulado. Y la forma en la que comenzarán a contrarrestar estos mensajes es con una estrategia más violenta, el miércoles ya denunciaron que una supuesta explosión en una planta de PDVSA se debió a un sabotaje de la derecha, Maduro ha denunciado que la oposición contrató a un grupo paramilitar a inicios de año y piensan presentar a los supuestos culpables entre esta semana y la siguiente; es decir, nueva gente será acosada y perseguida. Todo esto se debe a que el régimen hoy se siente amenazado por el grueso de la población que opina en su contra”, señala la periodista.
Tanto Petit como Salamanca coinciden, además, en que el chavismo vendría preparando el terreno para un posible corte de energía el día de la elección ante un escenario adverso. “El régimen tiene una campaña que llama mucho la atención. Vienen diciendo que la oposición saboteará el sistema eléctrico el 28 de julio, pero este se encuentra bajo absoluto control del gobierno, vigilado por las Fuerzas Armadas. Difícilmente la oposición puede hacer algo al respecto. Lo que lleva a uno a pensar es que puede haber un apagón como elemento de retraso y dispersión para evitar que la gente vote en alguna zona”, teoriza Salamanca.
Ante este escenario, la oposición se ha dispuesto conseguir un despliegue territorial que le permita monitorear prácticamente en tiempo real los votos y ha llamado a que sus bases acudan en masa para que la diferencia sea tan grande que difícilmente pueda ser maquillada. Para Petit, esta estrategia tiene “muy pocas posibilidades de resultar”.
- SIN JUSTICIA –
Las diferentes voces de la oposición condenaron este jueves 18 el ataque contra Machado y su equipo. El dos veces candidato a la presidencia Henrique Capriles dijo que “la impunidad, el quiebre de la justicia y la ausencia de respeto caracterizan a quienes mal gobiernan Venezuela”. El exdiputado Juan Pablo Guanipa llamó “cobarde” al “régimen” y se mostró convencido de que “la respuesta de los venezolanos va a ser la masiva votación el 28 de julio”, en favor de González Urrutia.
Por su parte, la opositora Delsa Solórzano señaló que “atentar contra la vida” de Machado y su equipo “debe ser condenado e investigado con seriedad”.
Mientras que el candidato opositor que no pertenece a la PUD Enrique Márquez rechazó “la violencia de la cual ha sido víctima María Corina Machado, su entorno y los distintos factores que están en el ejercicio democrático de la política”.
Desde la PUD exigieron este viernes 19 que el Ministerio Público investigue de manera “seria y exhaustiva” el ataque contra María Corina Machado y su equipo. El exdiputado Biagio Pilieri exigió a las autoridades explicar “cómo y por qué sucedió” el ataque.
Asimismo, reiteró a la comunidad internacional que siguen “firmes junto” junto al candidato Edmundo González Urrutia y Machado en hacer posible que el “pueblo venezolano se exprese de manera libre y pacífica, con la fuerza del voto, el próximo 28 de julio”.
El pedido, sin embargo, parece condenado al olvido.
Salamanca lamenta que este tipo de escenarios solo son posibles debido a que el chavismo ha conseguido cooptar todos los poderes en Venezuela. “Tiene control total de los organismos jurisdiccionales, de todas las instituciones. No hay donde apelar por un juicio justo o en el que se siga el debido proceso. En Venezuela antes de hacer la investigación la persona ya es sentenciada. Frente a eso no queda más que protestar y la única forma de conseguir justicia es a nivel internacional, como se puede ver en la Corte Penal Internacional o en otras instancias”, alerta.
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