Camila Manrique

La es una expresión cultural y un símbolo de identidad de un país, pues refleja su esencia y diversidad. En el , esta poderosa manifestación enfrenta un desafío significativo: la escasez de espacios dedicados a destacar y visibilizar el trabajo de nuestros diseñadores locales. Como comunicadora apasionada por la moda, creo que es importante exponer este vacío en la industria editorial peruana.

En un país tan diverso y con tanto talento creativo como el nuestro, sorprende la ausencia de publicaciones que celebren nuestra identidad y estilo únicos. ¿Cómo es posible que los diseñadores locales no tengan una plataforma adecuada para mostrar su arte? Repasemos los factores que contribuyen a esta situación: la limitada inversión en el sector, el bajo interés por el arte de la moda y la poca fuerza publicitaria.

En este contexto, creo firmemente en el poder transformador de las plataformas digitales como una oportunidad de innovación y desarrollo para llenar este vacío. La creación de revistas de moda ‘online’ y de blogs especializados pueden darles visibilidad a los diseñadores peruanos.

Es crucial que tanto el sector privado como el público apoyen iniciativas digitales que promuevan la moda peruana. Incentivar a los nuevos talentos, ofrecer espacios de formación y difusión, y fomentar la colaboración entre diseñadores y empresas son pasos vitales para impulsar esta industria.

La moda peruana merece un lugar destacado en el escenario mundial. Estoy segura de que una buena campaña y el uso de plataformas modernas de comunicación contribuirán a este cambio.

*El Comercio abre sus páginas al intercambio de ideas y reflexiones. En este marco plural, el Diario no necesariamente coincide con las opiniones de los articulistas que las firman, aunque siempre las respeta.

Camila Manrique es estudiante de Comunicación en la Universidad de Lima