Como presidenta de la Comisión de Ética, la acciopopulista Karol Paredes sustentó el jueves de la semana pasada los informes de su grupo que proponían suspender de sus funciones a cuatro congresistas. Entre ellos estaban dos de sus correligionarios: Elvis Vergara y Jorge Flores. Sin embargo, el resultado no fue el que ella esperaba: solo se aprobó una de las sanciones, a Enrique Wong, y toda la bancada acciopopulista -a excepción de María del Carmen Alva- votó en contra de los informes presentados por su propia compañera de bancada.
—¿Cómo tomó la decisión del pleno de solo aprobar una de las sanciones aprobadas en la comisión que preside?
Yo tenía otra expectativa, pero bueno, las votaciones de cada uno de los congresistas es lo que cuenta. Ellos son los que deciden a través de su voto.
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—Ustedes aprobaron el informe del caso de Cordero en mayo, el de Wong en agosto, el de Los Niños en octubre, ¿por qué el pleno demoró tanto en votar estos casos?
Nosotros remitimos los documentos a la Oficialía Mayor. Son ellos los que tienen que hacer que en la Junta de Portavoces se agende este para que se pueda tocar en el pleno. Ese es el procedimiento. Yo no podría responder por qué lo han agendado después de tiempo. Nosotros solicitamos, a través de un documento en enero, tener un pleno de Ética. Son ellos los que tienen que responder, en este caso, la Mesa Directiva u Oficialía Mayor.
—Pero a usted como presidenta de la comisión, ¿no le genera incomodidad o molestia que se demore tanto?
Creo que a todos nos incomoda que no se tenga en cuenta el trabajo que se viene desarrollando a nivel de la comisión. Nosotros, como comisión, tenemos también que responder a la ciudadanía, a los que han depositado su confianza en nosotros.
—¿Ha podido conversar con el oficial mayor o el presidente del Congreso sobre por qué hubo tanta demora?
Bueno, hemos mostrado nuestra preocupación enviando el documento. Además, siempre hemos estado haciendo incidencia respecto a este tema. Son ellos los que tienen que ver el tema de agendar. El tema ético tiene que ser una prioridad, no solo para el Congreso, sino para cualquier institución que vele por su buena imagen. Es una forma de cuidar la institucionalidad en un espacio como el nuestro.
"Muchos piensan que esta comisión es solo para sancionar o porque tenemos algo en contra. No es así. Lo que hacemos es velar por la buena imagen el Congreso, cuidar la institucionalidad"
—En las sanciones que fueron rechazadas, su propia bancada votó en contra de sus propuestas...
Soy muy respetuosa de las decisiones de los congresistas, sean de cualquier bancada, pero sí creo que aquí cada uno sabe por qué lo hace. Yo respondo por lo mío y como parte de la comisión que presido. Sí puedo decir que todos deberíamos estar preocupados por cómo nos miran, si nuestros valores y principios tienen coincidencia con lo que decimos y con lo que hacemos. […] Consideramos que esta comisión juega un papel preponderante. Muchos piensan que esta comisión es solo para sancionar o porque tenemos algo en contra. No es así. Lo que hacemos es velar por la buena imagen el Congreso, cuidar la institucionalidad, hacer que el trabajo parlamentario sea eficiente, en los principios y valores que nos tiene que diferenciar del resto.
—¿Hay algún congresista en particular que le haya hecho un reclamo de ese tipo, que este es un tema contra ellos o personal?
Ustedes han visto las reacciones de los congresistas frente a los informes, quiénes han reaccionado de una u otra manera. Tienen que sacar sus propias conclusiones. Frente a eso, mi conclusión que aquí se ha tratado de confundir a la población en que no estamos teniendo en cuenta el trabajo que está haciendo el Ministerio Público, cuando nosotros no hacemos ese trabajo. Hacemos juicios políticos, vemos las conductas éticas y cuidamos la imagen del Congreso. El otro tema que ve el Ministerio Público va a seguir su curso. Lo otro es que no están dimensionando el valor y la responsabilidad que tiene la Comisión de Ética. Se está viendo a la Comisión de Ética como una comisión más cuando no es así. Es una comisión bastante importante en la que no es fácil cuando a veces tiene que decidir sobre situaciones como la de los casos que estamos viendo. Si eso no le gusta a mucha gente, ¿qué puedo hacer?
—¿Hubo una reunión previa de la bancada para tratar cómo iban a votar en el caso de Los Niños y los otros?
Hubo una reunión previa de mi bancada, pero ese tema específico, al menos hasta el tiempo que yo estuve, no se trató. Pero ellos saben que yo no voy a ir jamás contra mi informe. Para sacar un informe no solamente el equipo técnico lo trabaja, sino que esta propuesta la pasamos a la comisión de Ética en pleno y a raíz de ese procedimiento, pasaron estos casos al pleno. Ese el tercer filtro, allí se decide la propuesta que, como Comisión de Ética, llevamos al pleno.
"Tenemos diferentes miradas de lo que es la institucionalidad. Cuando eres parte de una institución, tiene que someterte a las reglas que tiene, más todavía cuando tenemos un reglamento de Ética"
—¿Siente que su bancada le ha dado la espalda?
Mira, yo no sé si llamarlo así, pero lo que sí puedo decir es que tenemos diferentes miradas de lo que es el verdadero concepto de lo que es la ética. También tenemos diferentes miradas de lo que es la institucionalidad. Cuando eres parte de una institución, tiene que someterte a las reglas que tiene, más todavía cuando tenemos un reglamento de Ética. Tú puede decir a favor, en contra o abstención cuando votas sobre una propuesta, pero cuando se trata de casos específicos de la Comisión de Ética, creo que deberían tener una mayor reflexión, mayor análisis.
—A partir de estas diferencias, ¿ha evaluado renunciar a la bancada?
Soy acciopopulista de corazón. En Acción Popular nos dicen permanentemente: no mientas, no robes, no seas haragán, principios que tienen que ver con nuestra formación ideológica. Tenemos nuestra doctrina. Pero si otros tienen eso solo como parte de un discurso, no como parte de sus acciones, no es mi problema. Es problema de las personas que no están asumiendo como tal su responsabilidad como ciudadanos, militantes y congresistas.
—¿La mayoría de la bancada no está respetando, entonces, los valores de su partido?
Creo que lo que para mí es ético, para ellos puede ser antiético; o lo que para mí es antiético, para ellos puede ser ético. No sé qué grado de valoración le ponen ellos a las cosas que hemos venido viendo a través de la comisión. Puedo responder por mí, no puedo responder por ellos; lo que puedo decir es que nuestras acciones cuentan.
—¿Actuarán de oficio en el caso de la congresista Rosio Torres o esperarán a que se presente una denuncia?
No, estamos tomando el caso por oficio. Espero que el pleno de la Comisión de Ética lo apruebe y abramos el caso por oficio. Nosotros proponemos como equipo técnico, no decidimos, proponemos y si ellos dicen que sí, seguimos adelante.
—Hace un mes se conoció un caso similar, el de la congresista Magaly Ruiz, también de APP. ¿Qué se ha hecho desde entonces en Ética?
Sí, estamos en proceso de indagación y seguramente para el 10 de abril tendremos alguna respuesta.
—APP anunció que iba retirar de la comisión precisamente a Magaly Ruiz y ahora a Rosio Torres. ¿Estos retiros se han cumplido?
Tengo entendido que de la congresista Magaly Ruiz ya está. De la congresista Rosio Torres no sabría decirle. Todo lo hacemos por documento y mientras no tengamos un documento, para nosotros eso no existe.
—¿Y la congresista Ruiz ya tiene un reemplazo?
No.
—¿Se está investigando el caso de los congresistas que viajaron al cumpleaños de su colega Diego Bazán en Trujillo? Él es justamente el secretario de la Comisión de Ética...
Estamos tratándolo como un tema más de evaluación, teniendo en cuenta el precedente de los cuatro congresistas que salieron en los medios de comunicación y que fueron a cumplir actividades en cada una de esas regiones. Igual estamos solicitando la información, como corresponde.
—Pero todavía no hay una investigación abierta
No.
—Uno de los nuevos congresistas investigados por el caso Los Niños, Óscar Zea, forma parte de la Comisión de Ética como no agrupado. ¿Va a seguir siendo parte del grupo mientras ven este caso?
Es un tema del que seguramente nos pronunciaremos en su momento, pero no hay nada sobre este tema específico.
—¿Considera que sería lo más adecuado que no siga o sea cambiado por este caso?
Es una decisión más a nivel de congresistas, a nivel de bancadas. En el caso de que esté en alguna situación que pudiera perjudicar el debido proceso, tome la mejor decisión: que puede ser retirarse o poner a otra persona.
—En casi dos años, ¿cuántas suspensiones propuestas por la comisión han sido aprobadas en el pleno?
En el pleno, dos. Del señor Freddy Díaz Monago y el señor Enrique Wong […] 120 días para que no tengan sueldo, estén suspendidos. Dos fueron desaprobados en el pleno, uno retornó a comisión.
—¿Tiene sentido que siga la Comisión de Ética funcionando como ahora? ¿Debería reformarse?
La Comisión de Ética solo tiene la facultad de proponer sanción, que se aprueba a nivel del pleno. Lo que está escrito en el código de Ética tiene que ver mucho con el reglamento del Congreso. Depende mucho del grado de importancia que se le dé a la comisión de Ética. Si yo voy a proponer algo, por más buen informe que haga, si no hay la disponibilidad de apoyar las conclusiones las que llegamos como comisión, entonces no va a pasar […] El tema es cuál es el concepto que tiene cada congresista respecto a lo que es la ética y que, siendo parte de la Comisión de Ética, se deben seguir el debido proceso.
"Si yo voy a proponer algo, por más buen informe que haga, si no hay la disponibilidad de apoyar las conclusiones las que llegamos como comisión, entonces no va a pasar"
—¿Siente que, en el actual Congreso, la Comisión de Ética ha perdido relevancia o corre el riesgo de caer en la irrelevancia?
Creo que, dependiendo de nuestra formación, la ética va a tener su nivel de relevancia. Yo tengo una forma de mirar la Ética y otro grupo tiene otra forma de mirarla. Muchos piensan que, como parte de la comisión, lo único que hacemos es atacar a la otra persona, que tenemos una cuestión personal. Esa una tremenda falta de personalidad y una tremenda inmadurez. Cada uno tiene que responder lo suyo. Cuando uno entra a hacer política, se supone que tienes claro que debes tener madurez y estar sujeto a las reglas de la institución.
—Por lo que conversamos, la idea que queda para la ciudadanía es que por más graves o éticamente reprobables que sean los casos, al final todo depende de los votos que se negocien o se consigan en el pleno. ¿No cree que esto contribuye a la impopularidad del Congreso y a las narrativas como las que piden su cierre, así sea inconstitucional?
La Comisión de Ética cuida la imagen del Congreso. Si nosotros no cuidamos esa imagen, no cuidamos la institucionalidad, estamos tirándonos las balas a nosotros mismo. Si no consideramos eso, estamos fuera de lugar. Hasta hoy, creo que como congresista, tienes la posibilidad de cambiar la imagen de la institución, de cambiar vidas con tus funciones y siendo un ejemplo de responsabilidad.