(Foto: Acción Popular).
(Foto: Acción Popular).
Paolo Benza

Los planetas parecen haberse alineado para que (AP) pueda ser el gran ganador de las elecciones parlamentarias del próximo año. En una contienda sin el 'factor arrastre’ de la candidatura presidencial, es la marca partidaria con más intención de voto (9%), según la encuesta elaborada por Ipsos para El Comercio en octubre. Además, es uno de los pocos partidos con varios miles de afiliados (186.156 al 2018) y es el segundo con más músculo a nivel subnacional: 3 gobernadores regionales, 14 alcaldes provinciales y 119 distritales.

El problema, sin embargo, parece estar de las puertas para adentro. AP arrastra ya varios años de disputas internas que, tras las elecciones municipales del 2018, se han agudizado y han dejado al partido en una situación complicada: simpatizantes —entre ellos varias figuras públicas— que no pueden afiliarse porque sus fichas de inscripción han desaparecido. En este grupo están el alcalde de Lima, , y el de La Molina, Álvaro Paz de la Barra.

Otros alcaldes, como el de Lince, Vicente Amable, y el de Pueblo Libre, Stephen Haas, cuyas fichas sí habrían sido entregadas por el partido al (JNE), todavía no aparecen como afiliados en el Registro de Organizaciones Políticas (ROP). Y a eso se suma el problema de miles de jóvenes que llenaron sus fichas de inscripción entre el 2015 y el 2018, pero aparecen como afiliados recién en junio de este año. Esto les impediría participar de la elección parlamentaria si el plenario nacional —que se celebra el sábado 19— ratifica el requisito de cuatro años de militancia mínima para ser candidato.

-El padrón cerrado-

Desde el 12 de diciembre del 2015 hasta junio del 2019, AP no pudo añadir ni un solo nombre a su lista de militantes. Luego de que el padrón se cerrara para las elecciones generales del 2016, el mandato del antiguo registrador partidario venció y no se logró elegir uno nuevo hasta cuatro años después. Sin un registrador partidario, que es el único autorizado para ingresar a los nuevos afiliados, las fichas de inscripción solo podían quedar almacenadas bajo custodia del Comité Nacional Electoral (CNE).

En el 2016, este comité —entonces presidido por el nonagenario militante accionpopulista Uriel García— no presentó la terna necesaria para gatillar la elección de un nuevo registrador. En cambio, sí pidió al JNE que anulara la elección de Rafael Vásquez Neyra como secretario general del partido. Sin dirigencia, el partido no ha podido elegir hasta hoy a un nuevo presidente que reemplace al gobernador regional de Cajamarca, Mesías Guevara, cuyo mandato está vencido.

Este no ha sido más que uno de los capítulos en la historia de disputas internas que ha vivido AP en los últimos años. En el 2016, varios de los jóvenes que buscaban inscribirse en el partido —y que hubieran sumado importantes votos en las siguientes elecciones internas— venían de participar en la campaña del ex candidato presidencial Alfredo Barnechea. “Los nuevos liderazgos atraen nuevos militantes y eso siempre es una amenaza para liderazgos antiguos o tradicionales”, dice la accionpopulista Milagros Muñoz.

Con el padrón bloqueado por la ausencia de un registrador, los ‘barnechéveres’ tuvieron que conformarse con hacer vida partidaria sin un registro que los oficializara como militantes. Hasta que en enero de este año, el partido logró renovar su CNE y un grupo de jóvenes cuyas fichas seguían “en custodia” se organizó para reclamar la reapertura del padrón. El evento central de este reclamo se llamó “ni inscritos, ni afiliados”, o “ni, ni”.

“Para escoger al nuevo registrador decían que tenía que haber un plenario, pero no había dirigencia inscrita. El plenario, sin embargo, lo podía convocar el presidente y una jurisprudencia del JNE decía que para regularizar la dinámica democrática y el derecho a participación política se podía utilizar la última dirigencia elegida”, explica Milagros Muñoz. El plenario fue convocado y, el 23 de febrero, finalmente se eligió a un nuevo registrador. Entonces se destaparon los problemas.

-Los militantes sin ficha-

El registrador elegido en febrero se llama Alonso Tenorio. Su primera directiva fue abrir la convocatoria para nuevos afiliados. Le llegaron —asegura— más de 60.000 fichas. Entre ellas, estaban las 12.800 que habían quedado bajo custodia en los años de inamovilidad del padrón. Pero no estaban realmente todas las fichas. Recientemente, el alcalde de La Molina, Álvaro Paz de la Barra, publicó una “Carta abierta a la militancia de Acción Popular" en la que detalla que llenó su ficha de inscripción cuando el padrón estaba cerrado, pero que cuando este se abrió, la ficha se había extraviado.

“Yo cumplí con mi compromiso de llenar la ficha de inscripción”, dice Paz de la Barra. Y luego agrega: “No puedo continuar en un lugar donde me ponen trabas, en donde surgen pretextos. En donde, en definitiva, usaron su poder interno para que yo no sea parte de Acción Popular”. El alcalde de La Molina, efectivamente, no aparece en el ROP como militante del partido de la lampa. Y el registrador Tenorio asegura no haber recibido su ficha jamás.

Pero hay un caso más grave. El alcalde de Lima, Jorge Muñoz, tiene el mismo problema. “El 26 de octubre del 2017, firmé mi ficha de inscripción”, dice. Seis días antes, había lanzado su precandidatura a la alcaldía de Lima en un evento público realizado en Villa El Salvador. Allí estuvieron Barnechea, los congresistas Edmundo Del Águila y Víctor Andrés García Belaúnde, y el millonario empresario de la educación Raúl Diez Canseco, quien luego aportaría a su campaña. Ellos le entregaron un carnet gigante como símbolo de su afiliación.

“Lo triste es que mi ficha desapareció. Hay versiones de personas que han estado cerca de donde desapareció que dicen que la ficha fue rota, porque no me afilié a determinadas conductas de quienes la tenían”, asegura Muñoz. Pero a Tenorio sí le llegó una ficha con el nombre del alcalde de Lima. “Mi oficina recibe una fotocopia de la ficha del alcalde. No me entregaron la original. Desconozco cómo la original se ha podido extraviar”, argumenta.

“Si esto es así, hay que mirar las cosas con cuidado, porque habrían alguien que no está haciendo las cosas en orden”, reclama Muñoz. Lo cierto es que Tenorio presentó la fotocopia al JNE, pese a que este organismo sólo acepta fichas originales. “La ficha era una fotocopia a color, entonces uno la presenta sin darse cuenta de que era una fotocopia”, afirma Tenorio. Hoy, el alcalde de Lima no está afiliado al partido que lo llevó al sillón municipal, pese a tener la voluntad de hacerlo.

“Los que inscribieron a Jorge Muñoz deben dar las explicaciones. Esto fue un acto público en Villa El Salvador, donde estuvieron presentes Raúl Diez Canseco, los Del Águila [el papá -y homónimo- del congresista Edmundo Del Águila también es un reconocido militante] y Alfredo Barnechea”, dice Mesías Guevara. Según fuentes del partido, en la disputa interna que vive AP desde hace varios años, la facción 'guevarista’ se opone a la que conforman —entre otros— Diez Canseco y los Del Águila.

“En el partido hay personajes que tienen mucho celo. Cuando sale elegido Muñoz en Lima, hay militantes a los que les inunda la envidia y la hipocresía”, agrega Guevara. Edmundo Del Águila optó por no responder para la elaboración de este artículo. “Ese mismo día encontré que había muchos supuestos líderes y un fraccionamiento muy grande [en AP]”, dice Muñoz sobre el evento en Villa El Salvador. Y agrega: “Puede que haya dirigentes antiguos que quieren seguir siendo los que lideren el manejo del partido”. Su ficha continúa extraviada.

-Militantes fuera de fecha-

Luego está el problema de los militantes cuyas fichas sí existirían, pero que no aparecen inscritos en el ROP. Por ejemplo, el alcalde de Lince, Vicente Amable, y el de Pueblo Libre, Stephen Haas, confirmaron a El Comercio que llenaron sus fichas cuando se reabrió el padrón en marzo, pero todavía no están en la lista de afiliados

Según Tenorio, las fichas de ambos forman parte del último paquete entregado al JNE, por lo que todavía estarían en revisión. “Sí fueron recepcionadas y entregadas al JNE, están pendientes de ser procesadas de acuerdo a los plazos”, afirma. Los alcaldes aseguran que se mantienen a la expectativa de que el registro partidario sea actualizado con su militancia.

Sin embargo, esto constituye un problema para miles de jóvenes que todavía no aparecen como militantes de AP (el último paquete tiene más de 10.000 fichas) y para otros que sí aparecen, pero cuya inscripción lleva como fecha el 6 de junio de este año. Estos militantes —algunos de los cuales conversaron con este Diario, como Milagros Muñoz o Juan Luis del Carpio—, llevan varios años haciendo vida partidaria, pero sus fichas son parte de las 12.800 que recién fueron ingresadas en el 2019.

En el plenario del sábado 19 de octubre se buscará definir los requisitos que deberán cumplir quienes postulen al Congreso por el partido de la lampa. Y entre lo aprobado por el Comité Político hace unas semanas —según todas las fuentes consultadas— está que no haya invitados y que los afiliados tengan una militancia mínima de cuatro años. Pese a que muchos de estos jóvenes lo cumplen en la práctica, su fecha de afiliación formal no les permitiría postularse si los votos de los miembros plenos del partido ratifican este plazo.

“Es un tema que debe debatirse. Otros están planteando que a los jóvenes se les permita presentarse desde el momento que presentaron su ficha", dice Guevara, quien volará mañana de Cajamarca a Lima para dirigir el plenario. La conformación de la lista que sacaría la mayor cantidad de congresistas en el 2020 depende de lo que se decida en esa reunión.