El 14 de febrero de 1990 la misión espacial “Voyager I” tomó una de las fotos más icónicas que se tenga recuerdo de la Tierra: “Punto azul Pálido”. Y hoy, a un día que se cumplan 30 años, la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) publicó una versión remasterizada de la captura que se realizó en aquella oportunidad.
La fotografía inicial, que se obtuvo a 6.000 millones de kilómetros de distancia del planeta, mostraba una pequeña mancha dentro de una banda de brillo a causa por la luz solar que golpeaba a la cámara de la nave galáctica.
Para su aniversario, Kevin Gill, un ingeniero del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA y procesador de imágenes, le dio un nuevo aspecto a la foto.
Sobre el procedimiento, comentó que “esta versión actualizada utiliza el software y las técnicas modernas de procesamiento de imágenes para volver a visitar la conocida vista Voyager, mientras intenta respetar los datos originales y la intención de quienes planearon las imágenes”.
En 2011, antes de la edición realizada, el sitio especializado en temas astronómicos, Space.com, eligió esta fotografía como una de las diez mejores fotos científicas espaciales de la historia.
Historia de “Punto azul pálido”
La imagen fue el resultado de una acción dirigida por el científico Carl Sagan, en la que convenció a la NASA de cambiar la posición de la nave “Voyager I” , y así poder tomar una foto del planeta del que había despegado hace 13 años.
Este hecho ocurrió 34 minutos antes, según la NASA, en el que la cámara de la nave espacial se apagara definitivamente para que la sonda pudiera ahorrar energía.
La captura, era parte de una serie de 60 imágenes diseñadas para dar origen al álbum que la misión llamó el “Retrato familiar del sistema solar”, donde se apreciaban otros cinco planetas y el Sol.
La foto original era una compilación de imágenes tomadas con tres filtros de color diferentes. En la nueva imagen, esos canales se han reequilibrado para hacer que la imagen se vea más nítida, y el haz de luz solar que rodea la Tierra se ajustó para que se vea blanco, como lo hace la luz solar en nuestros ojos.
En tanto, “Voyager I” no ha producido imágenes en décadas, y no vuela lo suficientemente cerca de ningún objeto que valga la pena fotografiar, informa Space.com.
Emol, GDA
Síguenos en Twitter...