Las adolescentes lo entenderán en unos años: ese momento en el que sus padres les piden posar para una foto inofensiva, cursi, fuera de época, será revisado luego, con nostalgia, como si se viviera de nuevo, como si el tiempo no hubiese pasado. Como lo que es historia. Pienso en eso ahora que miro en el WhatsApp la foto de Chelsea Ruíz, Suly Nolorve, Thayra Ceferino y Brillith Ramos, las jóvenes quinceañeras que llegaron a Lima hace cuatro días para cumplir un sueño que hace unos meses nomás parecía imposible. Película: jugar por la selección nacional que dirige Emily Lima y participar del primer microciclo 2025 en Chincha. Entrenar. Concentrar. Soñar.

Hace unos meses nomás ellas jugaban al fútbol por el AS Tingo María y uno de sus padres vio un anuncio en la web de El Comercio. “Habrá un Semillero deportivo”, dijo. “Tenemos que ir”, insistió. Lo que vino luego fue la épica: conseguir el financiamiento. Chelsea Ruiz bautizada -así en homenaje selvático al poderoso club que alguna vez dirigió Mourinho y compró a Pizarro- recuerda lo primero que hicieron: vender turrones y pedir donaciones “en una cajita”. Luego hicieron actividades pro fondos, polladas, chuleteadas. Quince soles cada tarjeta, hecha a mano, por ellas mismas. Tarjeta aceptada, tarjeta pagada. Con los uniformes recién lavados en sus casas, y los botines comprados en el mercado de la zona, viajaron a Lima para jugar en el Semillero El Comercio de finales del año pasado.

Chelsea y su compañera en ataque, Camila Huayanay, la rompieron. Y el día de la final, AS Tingo venció a Ciclista Lima y se coronó campeón del Semillero Repsol Fútbol Femenino. Fuera de la fiesta, de la inmensa alegría familiar, regional, algo quedó marcado a fuego en todos los que estuvieron esa tarde de neblina en Magdalena: las campeonas levantaron la copa, la pusieron en el piso, e inmediatamente después recogieron todas las botellas, vendas, esparadrapos y cualquier adminículo que quedara en la cancha sintética, hasta dejarla impecable.

Ese día, 24 de noviembre en la Costa Verde, la entrenadora brasileña asistió al evento y apuntó sus nombres, como quien firma un decreto que va a cambiarles la vida.

Pasaron desde entonces, cuatro meses. ¿Cómo se enteraron las chicas sobre su convocatoria? El profesor Jorge Huayanay Gonzales fue el encargado de dar a conocer el llamado a sus chicas. “A nosotros nos tomó por sorpresa porque nunca imaginamos que tras viajar a Lima al Semillero Repsol irían a verlas de la selección. Ella está feliz de que la hayan convocado y me dijo que dará todo de sí, porque su sueño es ser futbolista profesional”, dice Candy Noemi Palomino Morales, mamá de Thayra Ceferino, hoy defensa Sub 15 de Perú.

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La madre de Thayra confiesa que su menor hija siempre amor por el fútbol, sin embargo, recién a los 11 años, se dieron cuenta que tenía talento. “Fue tras su participación en los Juegos Escolares que nos dimos cuenta. Ahí le pusimos a entrenar en la escuela formativa As Tingo”, afirmó.


Chelsea Ruiz junto a las entrenadoras de la selección peruana femenino
Chelsea Ruiz junto a las entrenadoras de la selección peruana femenino

Thayra Ceferino actualmente se encuentra en segundo año de secundaria, en la institución educativa Los Laureles, de la ciudad de Tingo María.

“Thayra tiene un hermano de 5 años, como le vuelvo decir desde que supimos que le gustaba el fútbol, comenzamos a apoyarla, porque ese deporte le gusta a ella. Bueno, acá en el barrio la llaman a jugar las que ya tienen de 30 años para adelante para las pichanguitas”, agregó.

“Al saber de la noticia, me sentí muy feliz y emocionada. Gracias a Dios mi hija ha sido convocada para Perú”, cuenta la señora Nely Ortega, mamá de Chelsea, goleadora del As Tingo. Chelsea, cuyo nombre viene a raíz del poderoso club inglés, estaba predestinada para el deporte. “Cuando yo estaba embarazada, su papá la esperaba con muchas ansías a ella y él era fanático del equipo Chelsea y decidió ponerle así a su hija”. El fútbol, esa pasión inexplicable, otra vez testigo de una historia feliz.

Suly Nolorve (arquera), Thayra Ceferino (defensa), Brillith Ramos (delantera) y Chelsea Ruíz (delantera), fueron las convocadas de As Tingo para este primer microciclo que se llevará a cabo del 17 de febrero hasta el 26 de febrero en Chincha.
Suly Nolorve (arquera), Thayra Ceferino (defensa), Brillith Ramos (delantera) y Chelsea Ruíz (delantera), fueron las convocadas de As Tingo para este primer microciclo que se llevará a cabo del 17 de febrero hasta el 26 de febrero en Chincha.

Luego sigue contando: “Doy gracias a la academia As Tingo del profesor Jorge y Jhubal Cruz, quienes han incentivado mucho a las niñas. Chelsea avanzó bastante, ya que es muy talentosa y tiene muchas cualidades con la ayuda del todopoderoso nuestro señor, ella lo va a lograr. Estamos muy felices junto a su padre y hermana que haya sido seleccionada”.

Las chicas del AS Tingo arribaron a Lima el domingo último. “Sin mis padres esto no hubiera sido posible”, dice Chelsea, a través del teléfono, cuando El Comercio le pregunta qué es lo que siente sobre esta nueva aventura. Agradecida, se le atropellan las palabras. Ahora, como a sus compañeras, el mundo le pertenece.

Serán 9 días donde Chelsea junto a las demás chicas demostrarán a la entrenadora de la Sub 15, que en Tingo María hay talento y que ayudará a potenciar al equipo de todos.