“Fossati le devolvió la confianza a jugadores sin brújula”: el ranking de la Liga 1 2023 y por qué la U se lleva casi todos los premios

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Los premios entregados recientemente por la Liga 1 no se han saltado esa línea. Si Alianza hubiera sido el campeón, ¿el mejor del año habría sido Quispe? ¿Larriera le habría peleado el puesto a Fossati? ¿Y dónde quedó Nunes, a quien se le rendía pleitesía dos semanas antes de la final?

Los jurados de notables no son garantía de justicia (¿qué califica como notable?), menos las elecciones por internet (¿habrá quienes sigan creyendo que Solano lanzaba mejores tiros libres que Beckham?). Así que con esa misma arbitrariedad, y el permiso de ustedes, paso a dejarles mi lista de destacados del año futbolístico que se acaba de ir:

El mejor equipo: Universitario

Aquí no hay discusión. Arrancó mal el año, pero la dirigencia corrigió en el momento justo y trajo un entrenador de fuste. Además de su enorme capacidad de persuasión, Jorge Fossati le devolvió la confianza a jugadores sin brújula y apagó cortocircuitos emocionales. El colectivo hizo la diferencia; sin embargo, su éxito se asentó en varios pilares: la tranquilidad que entregó Carvallo en la portería, el gran poder para el anticipo de Riveros, el rigor de Corzo, el gobierno del mediocampo de Ureña, los destellos de brillantez de Quispe, el ida y vuelta de Polo y el trabajo de hormiga de Pérez Guedes. A la U le faltó un ‘killer’ para concretar en el resultado su dominio en el juego. Aún así, Valera acabó la temporada con 15 goles. Nada mal.

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El mejor: Rodrigo Ureña

Amigos Quispelovers: Piero es un jugador enorme, dueño de unas condiciones bárbaras, pero aún le falta consolidarse. Por ahora suma brillos y consigue levantar de sus asientos al hincha con una pisada de pelota. ¿Qué le falta? Ser determinante donde realmente se le necesita: los últimos 30 metros. Necesita concretar eso que tanto insinúa. El chileno, en cambio, fue más regular. Difícil encontrar en el fútbol local un tiempista de su categoría, preciso para el quite y con una mirada macro del juego. Que la U haya llorado sus ausencias cuando se le soltó la cadena explica lo crucial que fue. Larriera cometió un error de novato al no ordenar taparlo en las dos finales.

El mejor técnico: Jorge Fossati

Como Gregorio Pérez en su momento, Fossati tardó demasiado en llegar al fútbol peruano. El sistema que utiliza puede resultar anacrónico para algunos puristas, pero aquí hizo diferencias y alcanzó para pelear la Sudamericana. El hoy técnico de la selección se ganó el puesto muy rápido. Un escalón abajo quedó Thiago Nunes y cerquita, sobre todo por su gran Clausura, Franco Navarro.

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El mejor extranjero: Ureña y Barcos

A Hernán Barcos se lo critica mucho desde fuera de Abtao con Isabel La Católica, pero resulta absurdo negar lo que ha significado para Alianza desde que pisó Matute por primera vez, más aún este año en que la dirigencia y ciertos jugadores -¿Aló Christian, estás ahí Carlos?- hicieron todo lo posible para favorecer a sus rivales. Junto con el chileno de Ate, nuestro flamante compatriota demostró profesionalismo y en el área grande siguió siendo letal. ¿Es un demérito para nuestra Liga que un jugador de casi 40 años sea figura? El tema es discutible. Los nuevos modelos de entrenamiento y nutrición permiten que los deportistas profesionales extiendan sus carreras más allá de la media. El aporte de Barcos, además, supera lo deportivo y eso siempre debe ser una buena noticia. Cerquita quedaron Kevin Serna y Santiago Giordana, uno de los grandes olvidados a pesar de su potencia goleadora.

El mejor futbolista joven: Joao Grimaldo

Cuando hace poco más de un mes fue sorprendido viajando a Europa, muchos dieron por hecho su incorporación a un club de ese continente. Semanas después volvió a la Florida y nadie dijo nada. Grimaldo, al igual que Quispe, es un futbolista con enormes condiciones al que aún le falta redondear todo aquello que insinúa (tomar mejores decisiones, por ejemplo). Ojalá consiga irse al exterior para que la mayor exigencia le permita pulir sus defectos. Y pisar tierra, que a todos tanta falta nos hace.

La mejor futbolista: Fefa Lacoste

El nivel del fútbol femenino en el Perú es pobre. El torneo es semiprofesional, las condiciones en que trabajan muchas chicas avergüenza y en la Videna no parecen muy interesados en que esto cambie. Pese a ello, hay clubes que intentan hacer las cosas bien -Universitario, Alianza, Cristal- y jugadoras que le dan categoría al torneo como Stephanie. Es defensa, pero aparece en todos lados y como buena uruguaya es capaz de ir a la guerra con un tenedor. Y la gente la quiere.