En su primera conferencia como el entrenador de la selección peruana, hace menos de dos semanas, Juan Reynoso lo dijo clarito: “Sergio Fentanes es un metodólogo que nos ayudará a integrar a la Sub-20, la Sub-17, la Sub-15. Dios quiera, también podamos darle un aporte al fútbol femenino”.
Fentanes, mexicano de nacimiento, no había llegado al Perú todavía. Fue, de hecho, una de las pocas ausencias del comando técnico que aquel día se presentó en sociedad, en la Villa Deportiva Nacional. Se sabe que trabajó con Reynoso en el Puebla entre el 2019 y el 2020, pero no mucho más que eso.
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Su cargo, más allá de la breve explicación que dio Reynoso, es un enigma. Al menos para la realidad deportiva del país. Conversamos con Jorge Obando, responsable del equipo de metodólogos del Instituto Peruano del Deporte (IPD), y nos comentó que se trata de una especialidad que no existe en el Perú. Quienes desean formarse deben capacitarse en el extranjero.
“En el IPD y en el país en general hay muy pocos metodólogos. El número es muy reducido y la necesidad es demasiado grande. En lo personal, realicé estudios afuera. En el Perú solo he podido llevar cursos cortos o talleres de pocas horas académicas que son insuficientes”, explica Obando.
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Pero, ¿qué es exactamente un metodólogo deportivo, más allá de lo que se pueda inferir? ¿Cuál es su papel en un equipo de trabajo y qué puede aportarle al deporte de alta competencia? Obando lo define así: “Es un profesional de la planificación deportiva, especializado en la metodología deportiva y en las ciencias aplicables, propiamente en el proceso de entrenamiento deportivo en sus diferentes etapas”.
Para el colombiano Mauricio Garzón Camelo, PhD de actividad física y fisiología de la Universidad de Montreal, Canadá, el metodólogo tiene dos funciones principales: evaluar a los entrenadores y asumir la responsabilidad de su desarrollo.
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“Es alguien que evalúa, no que juzga. Debe tener la capacidad de generar un ambiente de aproximación para que el entrenador se sienta con la confianza y la tranquilidad absoluta de que es un aporte. Es un acercamiento físico sin interrumpir el entrenamiento, pero debe observar cómo es que el entrenador hace su trabajo y hace el feedback con sus atletas”, anota.
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La labor de Fentanes será esa: acercarse a cada uno de los entrenadores de las distintas categorias de la selección peruana, conocer sus metodologías, establecer un plan de acción en conjunto, y entregar un informe pormenorizado con los aciertos y aspectos por corregir. Será Reynoso quien tenga la última palabra sobre lo que deberá implementarse.
“Lo que se busca es que el entrenador reflexione sobre su quehacer. El metodólogo es un mentor. Una persona que con mayor experiencia y conocimiento ayuda a un persona de menos experiencia y conocimiento. Así de sencillo. Acompaña, orienta, invita a la reflexión, y deja que el entrenador tome la iniciativa”, señala Mauricio Garzón.
Una vez diseñado el plan de entrenamiento entrará la siguiente fase, acaso tan complicada como la primera: la ejecución y la supervisión de los ajustes. La revisión continua de los objetivos, la elaboración de fichas de los avances de los atletas, y la planificación de las competiciones.
Jorge Obando, el jefe de los metodólogos del IPD, indica que esta especialidad se aplica para todos los deportes, y no solo para el fútbol. “El metodólogo deportivo es la figura de más alto nivel técnico – metodológicos (teórico) en el proceso de estructuración y control del sistema de preparación de los deportistas”, dice.
Para él son cuatro las ventajas de contar uno, en tu equipo de trabajo:
- Realiza una adecuada planificación de todo el proceso de preparación de un deportista.
- Realiza un trabajo de coordinación entre el equipo multidisciplinario e interpreta los diagnósticos de los mismos para vertirlos de manera conjunta y colegiada con el equipo técnico deportivo.
- Estructura en un orden idóneo y adecuados los medios y métodos metodológicos para cada una de las etapas de un deportista en el proceso de reparación deportiva.
- Orienta y da cumplimiento de manera ordenada y coherente los objetivos estratégicos y pedagógicos para cada etapa de formación del deportista.
Si el comando técnico de Ricardo Gareca innovó con videoanalistas y scouts, el de Juan Reynoso lo hará con un metodólogo. Todo en aras de la mentada reestructuración.
