Este sábado inició la demolición del llamado mausoleo terrorista, ubicado en el Cementerio de Comas. La labor fue encabezada por el alcalde del distrito, Miguel Saldaña. También participaron trabajadores municipales y agentes de la Policía Nacional.
La medida se dio tras la aprobación de la ley que modifica a la ley N°26298, de Cementerios y Servicios Funerarios. Allí, se modificó el artículo 26 en el que se establecía que la exhumación de un cadáver para su cremación o traslado a otro recinto solo se podía ejecutar a petición de los deudos o por orden judicial.
El proyecto fue presentado por el congresista Alberto de Belaunde. En su momento, su despacho señaló que con la modificación se subsana la falta de regulación en la ley sobre cuál es el juez competente, cuál es el procedimiento que debe seguirse y quiénes son los actores legitimados para la exhumación de cadáveres.
La construcción del mausoleo tuvo un costo de S/73.715 aproximadamente, según un informe del Ministerio Público. La estructura tiene 51 nichos y los cuerpos se habrían trasladado en el 2016 cuando la fiscalía entregó los restos de los terroristas muertos en el motín de El Frontón, en 1986.