Mathías Panizo Arana

Las empresas de ‘taxi por aplicativo’ fueron –en algún momento- un referente de mayor seguridad. Con los años, quedó evidenciado que los filtros –que incluso algunas aplicaciones no realizan- tenían graves deficiencias. Aterradoras confesiones se hicieron públicas, descritas por víctimas de secuestros, robos y acoso sexual por parte de los conductores. InDrive, una de las compañías inculpadas en estos casos, habló con El Comercio sobre sus planes para repotenciar la seguridad y revalorizar la marca.

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