Deberían tener todo para luchar contra una delincuencia cada vez más armada y violenta. Son un cuerpo policial de primera respuesta, con más de 66 funciones, que van desde ejecutar operaciones de patrullaje hasta programas preventivos con vecinos y escolares. Las comisarías deberían tener todo, pero la historia es distinta.
Son muchas las brechas en todo el país. En este primer reportaje hablaremos de una: la escasez de policías y patrulleros en las calles, que es donde más se los requiere, porque en la última década en Lima y Callao se denunciaron más de un millón de robos. Eso es como 277 asaltos al día; uno cada cinco minutos. Y no contamos a ese 81% de víctimas que no acudió a la policía. Sus casos quedaron impunes y sin registro.
Hay comisarías de la capital que se quedan sin patrulleros más de 12 horas al día, según testimonios que recabó El Comercio de comisarios, oficiales PNP y agentes de patrullaje que laboran en las 148 dependencias de Lima y Callao. No daremos sus nombres para protegerlos de posibles sanciones del comando policial.
Esta falta de policías y vehículos obliga, además, a que los agentes patrullen hasta 22 horas diarias. Regresan a la comisaría para almorzar, cenar o si alguna diligencia lo demanda. Según los testimonios, es una “orden del comando” que algunos comisarios reducen a 16 horas, alternando con policías administrativos, para darles un descanso a los de patrullaje. A continuación presentamos extractos de las conversaciones.
“Si una jurisdicción está llena de policías, el delincuente se va. Pero mi comisaría solo tiene 14 efectivos asignados al patrullaje. No nos alcanza el personal”
“A veces no nos damos abasto para atender todos los casos y pedimos apoyo de patrulleros a otras comisarías cercanas, pero hasta que veeeengan... No combatimos el 100% de la delincuencia. No es que no queramos, sino que esa es la situación que se presenta. Se hace todo lo humanamente posible”.
Sí, es cierto [que los policías patrullan 22 horas en un día]. Es un exceso, porque ningún cuerpo te aguanta patrullando tanto tiempo, pero es una disposición del comando. En mi caso, yo pido que patrullen 16 horas y los hago rotar con algunos administrativos. Prefiero tener un policía bien descansado, a uno que sale a la calle a buscar dónde dormir
“La policía solo debería preocuparse por cumplir su labor de prevención o de investigación y no perder el tiempo con personal administrativo haciendo cuadros de abastecimiento, cuadros de rendición de cuentas de combustible. Todo eso [se hace en la comisaría], por el tema de los patrulleros. No tiene sentido. Eso lo debe hacer otro personal. A nosotros nos deben poner el carro ahí, para salir a patrullar”
“Si tengo una diligencia de dosaje etílico, un examen médico o ir a la fiscalía, un patrullero abandona su sector. Le toma de 3 a 4 horas, y me quedo sin vehículos. –¿ Cuántas horas al día usted no tiene patrullaje?– Más de 12 horas”.
—Policías en cifras—
El último Censo de Comisarías data del 2017. Lo hizo el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Según esta información, hay más de 12 mil agentes en las comisarías de la capital, pero de ellos –a diario– solo unos 3.200 salen a las calles. Veamos la distribución en esta infografía.
De acuerdo con un estudio de la contraloría hecho en julio del 2019, el número de policías patrullando Lima y Callao se incrementó en unos 400. Todos juntos no llenarían ni siquiera la tribuna occidente del estadio Nacional.
En julio, por transparencia pública, El Comercio pidió información al Mininter y a la policía sobre la actual distribución de agentes en comisarías y escuadrones de emergencia. Y hasta antes de publicar este reportaje, solicitamos entrevistas con mandos policiales para actualizar la cifra y también preguntar sobre el testimonio de los comisarios y oficiales. En ambos pedidos, no hubo respuesta.
—Un plan difícil de ejecutar—
La escasez de policías y también de patrulleros limita la ejecución de Vecindario Seguro, un plan aprobado para las comisarías en el 2018. Busca tres cosas: bajar la cantidad de robos, incrementar la confianza de la gente en la policía y reducir el temor de muchos de convertirse en la siguiente víctima de los delincuentes.
Además de mejorar la coordinación con los municipios, la estrategia pide a los comisarios dividir sus jurisdicciones en sectores y cuadrantes. Ahí debería asignar una cierta cantidad de agentes y patrulleros. Pero no hay suficientes policías. Según la versión de algunos comisarios, eso les obliga a asignar un solo patrullero para más de un sector, donde pueden haber más de mil manzanas de zonas urbanas o en zonas inaccesibles como cerros y arenales.
Sol de Oro, la comisaría de Los Olivos que más denuncias de robo atendió en los últimos cuatro años en el país, tiene poco más de 30 policías con 8 camionetas operativas para patrullar 2.700 peligrosas manzanas.
Como pasa en Sol de Oro y en todas las comisarías, el número de policías y vehículos se reduce a diario por la enorme cantidad de diligencias. Las pruebas de dosaje etílico, las constataciones policiales, el traslado de detenidos al Ministerio Público y de víctimas de violencia al médico legista, etc. distraen el patrullaje.
Estas diligencias y papeleos absorben los ya escasos recursos policiales al punto de que algunas comisarías se queden varias horas sin unidades para custodiar sus inmensos territorios.
Los intentos del gobierno por cerrar la brecha (Nota vinculada)
Las autoridades del Ministerio del Interior (Mininter) consideran que para cerrar parte de la “histórica brecha” de la Policía Nacional se requiere invertir de manera sostenida durante los próximos cinco años. Ahora mismo se necesita reparar más de 8 mil patrulleros y comprar más de 115 mil pistolas.
En una entrevista con El Comercio, la jefa del Gabinete de Asesores del Mininter, Patricia Figueroa, contó que esta gestión ha invertido cerca de S/900 millones en equipamiento para la policía, que representa el 7% de todo el presupuesto del sector Interior.
Unos S/80 millones servirán para comprar autos, grúas, alcoholímetros y chalecos antibalas. No todos los agentes de patrullaje usan esta prenda de protección que puede salvarles la vida en una balacera.
Ante la falta de patrulleros, para los próximos tres años, el Mininter ha alquilado 900 vehículos que repartirá en las comisarías de Lima y Callao. Por este servicio, se pagan S/146 millones.
Si alguna de estas unidades se malogra, la empresa tiene la obligación de reemplazarla en máximo 72 horas y no en años, como ocurría con las últimas adquisiciones, que no incluían servicios de mantenimiento y reparación.
El último viernes, en la presentación de un segundo lote de estos patrulleros rentados, el presidente de la República, Martín Vizcarra, dijo que la modalidad del alquiler permitirá intensificar el patrullaje.
“No son para que estén en una cochera. No son para que estén estacionados al frente de una comisaría. Tienen una dotación de combustible para que puedan movilizarse, todos los días, entre 250 y 300 kilómetros. Pero tiene que ser patrullando la ciudad, yendo a los sitios de mayor inseguridad, para que el ciudadano sienta que tiene una policía que hace todos los esfuerzos para cuidarlo”, dijo el mandatario.
Son más de 2.600 nuevos policías que este año el Gobierno ha repartido en las comisarías de la capital. Sin embargo, no se ha precisado cuántos de ellos cumplen labores de patrullaje, que es donde más hacen falta. Según las autoridades, a fines de este año egresarán unos seis mil policías más para ser distribuidos en todo el país.