Mujer desaparecida hace 30 años y que dieron por muerta fue hallada en un asilo de Puerto Rico

Una mujer de Pensilvania que desapareció hace más de tres décadas, y fue declarada legalmente muerta, fue hallada con vida en un asilo de ancianos de Puerto Rico.

Patricia Kopta desapareció en 1992 y, durante varios años, las autoridades investigaron los detalles de su desaparición, dijo el subjefe de policía del municipio de Ross, Brian Kohlhepp.

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Antes de desaparecer de su casa al norte de Pittsburgh, se sabía que la mujer era una predicadora callejera “excéntrica” que se hacía llamar “gorrión”, señaló NBC News.

Siete años después de su desaparición, Kopta, en la actualidad de 83 años, fue llevada a un hogar de ancianos luego de que la encontraran deambulando por el norte de Puerto Rico, indicó Kohlhepp en conferencia de prensa.

Durante varios años, mantuvo en secreto los detalles de su vida, pero cierto día, la mujer, que padece demencia, comenzó a revelar su información personal.

Su desaparición aún no tiene explicación

Esto llevó a una trabajadora del asilo a ponerse en contacto con las autoridades de Pensilvania. Tras una prueba de ADN, se confirmó que la paciente era Patricia Kopta, persona desaparecida hace más de 30 años.

“Le preocupaba que la iban a institucionalizar”, dijo Kohlhepp. “Que es lo que creemos que la llevó a decidir huir del país”.

Antes de su desaparición, Kopta fue diagnosticada con “delirios de grandeza” y tenía signos de esquizofrenia. Aunque estuvo hospitalizada por un tiempo, fue liberada y siguió predicando hasta que desapareció.

En Puerto Rico, deambuló por los pueblos del norte de la isla de Naranjito, Corozal y Toa Alta, ubicados justo al suroeste de la capital de San Juan.

Cuando la llevaron por primera vez al hogar de adultos, dijo que había llegado a Puerto Rico en un crucero desde Europa.

La reacción de su esposo

Bob Kopta, de 86 años, dijo que llevaba 20 años de casado cuando su esposa desapareció. Aunque sospechó que ella estaba en Puerto Rico, colocó un anuncio en un periódico de la isla para tratar de encontrarla e incluso consultó con un psíquico.

“Es un alivio saber que no está tirada en una zanja en algún lugar, o asesinada”, dijo el hombre, agregando que cada vez que la policía local descubría un cuerpo, le preocupaba que fuera su esposa.

La hermana menor de Patricia, Gloria Smith, dijo a The Associated Press que Patricia solía ir de vacaciones a Puerto Rico con amigos antes de casarse. “Ella simplemente amaba el océano, la playa, el cálido sol”, reveló.

La mujer agregó que, a pesar de que su hermana se encuentre en un estado mental deteriorado, espera reunirse con ella para darle un abrazo y decirle que la ama.