Esperanza y acción solidaria para un futuro sostenible

En un mundo que enfrenta múltiples crisis y desafíos globales que no reconocen fronteras, un futuro sostenible con bienestar para todas las personas solo es posible con solidaridad, compromiso y acción decidida de los países y sus pueblos. Bajo esta premisa, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el Perú trabaja con el Estado y la sociedad peruana para construir un país más inclusivo y sostenible.

Desde su creación en 1945, la ONU ha sido símbolo de esperanza, nacida de la convicción de que es posible construir juntos un mundo con paz duradera, donde los pueblos progresen y los derechos de todos sean respetados. Hoy, la ONU moviliza US$46.000 millones para atender las necesidades humanitarias de 180 millones de personas alrededor del mundo; asiste y protege a 131 millones de personas desplazadas por la guerra, el hambre y la persecución; suministra vacunas al 45% de los niños del mundo; colabora con los países para enfrentar los efectos del cambio climático; previene conflictos mediante la diplomacia; apoya el mantenimiento de la paz en 11 operaciones; y promueve los derechos humanos a través de 80 tratados y declaraciones internacionales.

Casi ocho décadas después de su fundación, la confianza en la cooperación internacional como motor del desarrollo sostenible sigue siendo sólida. Los 193 estados miembros de la ONU mantienen su firme compromiso con los principios de la Carta de las Naciones Unidas.

Ello se reflejó en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas en setiembre pasado. Los estados miembros reafirmaron su compromiso con repotenciar y adaptar la cooperación internacional a las demandas, riesgos y oportunidades actuales, así como con crear un entorno que permita acelerar la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

En el marco del Día de las Naciones Unidas, reavivamos la esperanza depositada hace 79 años en que es posible –y necesario– encontrar soluciones conjuntas a los desafíos más difíciles que afectan a toda la humanidad: desde los conflictos internacionales; la situación de hambre, pobreza y desigualdad; hasta los efectos de la crisis climática global.

El secretario general, António Guterres, nos recuerda que la esperanza es esencial y que redoblar esfuerzos es urgente para poder sortear exitosamente los desafíos actuales. “Necesitamos acción decidida y soluciones multilaterales para alcanzar el progreso compartido y un planeta próspero”, menciona en su mensaje por el Día de la ONU.

En consonancia con este llamado, el Perú como estado miembro fundador de las Naciones Unidas mantiene una histórica y reconocida trayectoria en la diplomacia internacional. Asimismo, ha sostenido un destacado rol en la promoción del multilateralismo como un medio esencial para abordar los retos globales con el liderazgo de su cancillería y su misión permanente ante las Naciones Unidas.

A nivel de país, operan 22 agencias, fondos y programas que componen el sistema de las Naciones Unidas. Cada una trabaja con actores claves en el Estado, la cooperación internacional, los distintos segmentos de la sociedad y la población para juntos acelerar la implementación de los ODS. Estas acciones concretas tienen un impacto positivo en la vida de miles de familias en situación de vulnerabilidad a las que atendemos, tanto en contextos de desarrollo como de emergencia. Además, cooperamos para mejorar la seguridad alimentaria; brindamos asistencia técnica para fortalecer a las instituciones democráticas; promovemos la integración de migrantes, refugiados y comunidades de acogida, entre otras acciones claves.

Siempre en estrecha colaboración con el Estado y la sociedad peruana, y guiados por nuestros principios comunes de la Carta de las Naciones Unidas, continuaremos cooperando y atendiendo el llamado del país para construir un Perú inclusivo y sostenible, donde nadie sea dejado atrás.