Hoy, los que conformamos la gran familia de El Comercio nos hemos reunido en un almuerzo de camaradería. El discurso de orden lo efectuó Marcial Helguero y Paz Soldán. Fue un recuento de nuestra historia y, en un párrafo, dijo: “El gran público, aquel que nunca se equivoca en sus asertos, el que distingue entre los sinceros y los mistificadores, jamás nos rehuyó su favor ni nos restó su apoyo. Nosotros hemos vivido y lo seguiremos haciendo para él, porque sabemos que se nos comprende y respetamos siempre el sagrado rito del periodismo que es servicio y abnegación”.
H.L.M.