En el marco de las Elecciones 2018, el JNE organiza este domingo el primer debate entre diez de los veinte candidatos a la alcaldía de Lima. (Captura)
En el marco de las Elecciones 2018, el JNE organiza este domingo el primer debate entre diez de los veinte candidatos a la alcaldía de Lima. (Captura)
Andrés Calderón

“La luz solar es el mejor desinfectante”, escribió el juez supremo estadounidense Louis Brandeis en 1913. Estamos en el Perú de setiembre del 2018, a dos semanas de los comicios municipales y regionales, y aunque el sol ya comienza a brillar un poco, la campaña electoral todavía no calienta.

Escribo esta columna a unas horas de que empiece el primer debate de candidatos a la Alcaldía de Lima, una ciudad donde el 52% de los vecinos aún no decide su voto (). Aun así, mis expectativas predebate son bajas porque el gran número de postulantes (20) acorta demasiado el tiempo para confrontar ideas y propuestas.

Mientras tanto, como parte de un ejercicio personal para decidir mi voto, me he embarcado en la lectura de los estudios que algunas organizaciones y personas han realizado sobre los planes de gobierno de los candidatos de Lima. Se trata de esfuerzos valiosos que comparto con ustedes, amables lectores, para echar un poco de luz a esta sombría campaña. En la versión digital de esta columna, podrán encontrar los enlaces a dichos estudios.

Una de las revisiones más completas es la de la politóloga , quien comparó las propuestas edilicias desde la perspectiva de los 17 objetivos de desarrollo sostenible, que incluyen una serie de ejes importantes como lucha contra la pobreza, salud y bienestar, agua limpia, ciudades sostenibles (que comprende la gestión del transporte público sostenible y las políticas eficientes de tránsito), igualdad de género, educación de calidad, entre otros. Ames concluye que Manuel Velarde, Jorge Muñoz empatado con Enrique Cornejo, y Alberto Beingolea, en ese orden, presentan los mejores planes, tanto cuantitativa como cualitativamente.

En el espinoso campo de la lucha anticorrupción –¡y vaya que importa en una Lima cuyos dos últimos alcaldes, Susana Villarán y Luis Castañeda, están investigados por el Caso Lava Jato!–, es muy útil la comparación de propuestas que publica la . Ellos no presentan conclusiones, así que compartiré las propias: la gran mayoría de planes tiene declaraciones genéricas de buenas intenciones, principios y cumplimiento de la ley. Las medidas más concretas se distinguen en dos candidatos: Muñoz y Cornejo. Ambos plantean crear una oficina especial anticorrupción o una gerencia de rendición de cuentas (en adición a la oficina de control interno) y la transmisión pública de las sesiones del concejo metropolitano. Cornejo, además, propone la acreditación del municipio bajo la norma ISO 37001 (gestión anticorrupción).

Lima es una de las megaciudades más peligrosas para las mujeres en el mundo, según el ránking de Thomson Reuters Foundation. Pese a ello, tres candidatos (Ricardo Belmont, Luis Castañeda Pardo y Jorge Villacorta) no tienen ninguna propuesta para luchar contra la violencia hacia la mujer, según reporta.

Y si hablamos de falencias en los planes, el portal o ha hecho una extensa revisión de la veracidad y factibilidad de 406 propuestas de los planes de gobierno de ocho candidatos (Renzo Reggiardo, Daniel Urresti, Diethell Columbus, Humberto Lay, Belmont, Muñoz, Cornejo y Castañeda Pardo). Aunque el filtro no incluye a todos los candidatos ni a la totalidad de los planes, el solo dato de que casi el 50% de las medidas sean inviables, vagas o confusas demuestra la escasa seriedad y compromiso de los postulantes. ¿El candidato con las propuestas más vagas? El que va segundo en las encuestas: Belmont. Con razón no quiere asistir al debate electoral.

Espero que en los siguientes días aparezcan más análisis comparativos de los planes de gobierno, y que los medios de comunicación ayuden a difundirlos. Quizá, solo quizá, esta luz ayude a calentar la campaña y, sobre todo, alumbrar a quienes se dedican a comercializar humo.