Videos revelan que Martín Vizcarra se desplazó sin seguridad del Estado por terminal de Moquegua, según fiscalía

Lo afirmado por el abogado el pasado 22 mayo en entrevista con Canal N se contradice con una actuación atribuida a su defendido ese mismo día, en Moquegua. En su pedido de prisión preventiva por el caso de las presuntas coimas de constructoras cuando era gobernador en esa región -documento al que accedió El Comercio-, el Equipo especial Lava Jato advierte que esa mañana, Martín Vizcarra pudo desplazarse por casi dos horas y sin compañía de su personal de seguridad del Estado por el terminal terrestre moqueguano, a pesar de que tiene una escolta conformada, en efecto, por más de diez policías.

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Esto se evidencia en videos de cámaras de seguridad entregadas por la Municipalidad de Mariscal Nieto, en Moquegua, y plasmadas en un acta del Ministerio Público presentada como evidencia en el pedido de prisión preventiva, documento que también revisó este Diario. Allí se señala que Martín Vizcarra estuvo por casi dos horas en el lugar sin presenciarse su seguridad o personal policial “en una distancia prudente”.

La posibilidad de que el exmandatario pueda movilizarse sin ninguna restricción y sin su seguridad estatal asignada es uno de los elementos por los que el despacho del fiscal Germán Juárez cree que tiene facilidades para fugar del país mientras se desarrolla su juicio por presuntamente haber recibido coimas de empresas constructoras. Es más, sostiene que esto evidencia que sus propios agentes de seguridad “no podrían neutralizarlo” en caso intente ir desde Moquegua o Tacna a la frontera con Bolivia en “una eventual fuga” del acusado.

Por ello, pidieron al juez Víctor Alcócer, de la Corte Superior Nacional, que le imponga seis meses de prisión preventiva, plazo en el que debería dictársele una sentencia. Esta puede ser de condena o, como busca su defensa, de absolución.

En el requerimiento presentado el último martes ante el juez, al que accedió El Comercio, la fiscalía alega que existe riesgo de fuga de Martín Vizcarra por distintos elementos. Entre estos está su falta de arraigo laboral al no tener trabajo conocido, la gravedad de la pena a la que se enfrenta (15 años de prisión), un antecedente de haber mentido al reportar al juzgado sus actividades durante otro viaje a Moquegua, sus intentos de presentarse como una “perseguido político”, sus viajes proselitistas a distinas regiones pese a estar inhabilitado y lo relacionado a su escolta.

Respecto a este último, la fiscalía comienza citando hechos relacionados a otro caso que involucra a Martín Vizcarra: ‘Los Intocables de la Corrupción’, también sobre presuntos sobornos de empresas, pero durante su presidencia. En esas pesquisas, llevadas por el Equipo especial de fiscales contra la corrupción en el poder (Eficcop), se interceptó una conversación telefónica de enero del 2024 entre voces identificadas como las de Hugo Misad (amigo de Martín Vizcarra) y Manuel Zambrano, un policía encargado de llenar un reporte diario de las actividades del expresidente como parte de su seguridad.

Según destaca el Ministerio Público, en esa conversación el agente conversaba con Misad para que este converse con el acusado “sobre qué poner en el reporte que pasaba luego a un informe” y que era presentado al juzgado como parte de las restricciones que por entonces cumplía el expresidente. La fiscalía añade que corroboraron que el celular interceptado era de Manuel Zambrano: un agente que dio seguridad al exmandatario durante su gestión como gobernador moqueguano (2011-2014) y que en enero del 2024, “estaba a cargo de llenar los reportes de actividades del procesado Martín Vizcarra”.

Esto ya pone en duda la efectividad con la que Seguridad del Estado, particularmente en Moquegua, cumplen con informar debidamente las actividades del expresidente y la influencia que podría tener él sobre esos reportes. Sin embargo, el elemento más novedoso son las imágenes obtenidas sobre cómo Martín Vizcarra pudo moverse en la región que gobernó sin su seguridad.

Al respecto, la fiscalía indica que por “fuente humana” recibieron información de que el 22 de mayo pasado, cuando ya no tenía restricciones tras acogerse a una ley del Congreso, Martín Vizcarra fue al Terminal Terrestre de Moquegua “sin la presencia de ningún efectivo policial a cargo de su seguridad y protección personal en su condición de exmandatario”.

Con esa información, el equipo especial requirió los videos grabados ese día por las cámaras de seguridad de la Municipalidad Provincial de Mariscal Nieto correspondientes al terminal terrestre, ubicado entre las cuadras 2 y 3 de la avenida del Ejército, en esa ciudad. La respuesta llegó el 30 de mayo: se entregaron los videos requeridos.

El pasado 4 de junio, en una diligencia en las oficinas del Equipo especial Lava Jato, el fiscal adjunto Osías Castañeda revisó los videos entregados y plasmó lo encontrado en un acta. Según se da cuenta allí, en dos de esos videos, correspondientes a la zona de ‘garita de entradas de taxis’ y ‘estacionamiento de taxi’, se ve llegar un carro rojo conducido por Martín Vizcarra, del cual desciende solo. El vehículo está a nombre de su empresa familiar, CyM Vizcarra.

El acusado “se dirige al terminal terrestre sin la compañía de personal de seguridad del Estado, no pudiéndose advertir tampoco personal policial a una distancia personal”. Después, en un video de otra de las cámaras, que da uno de los pasillos, “se observa al señor Martín Vizcarra Cornejo ingresando al terminal terrestre, saludar a un grupo de personas para posteriormente ir en dirección a las escaleras del segundo piso” y luego se le ve “en el pasillo izquierdo del segundo piso, caminando hacia lo que parecen ser unas oficinas”. Nuevamente, sin seguridad del Estado cerca.

Otras cámaras que dan hacia un pasillo también registraron a Martín Vizcarra caminando en “lo interiores del Terminal Terrestre de Moquegua, específicamente en el segundo puso, sin la presencia de los efectivos de seguridad del Estado” y “caminando en el pasillo superior izquierdo”. Casi diez minutos después, esas mismas cámaras lo captan saliendo del mismo lugar, bajando las escalares hacia la entrada principal e incluso tomándose una foto con una mujer. “Durante todo este tiempo no se advierte la presencia de ningún efectivo de seguridad del Estado”, remarca el documento.

Las mismas cámaras de la zona de estacionamiento captaron la salida de Martín Vizcarra a bordo del mismo vehículo rojo, aproximadamente unos 20 minutos después de su llegada y nuevamente sin que se pueda observar personal de seguridad del Estado cerca o a una “distancia prudencial”. Sin embargo, las imágenes también muestran que el expresidente volvió al lugar una hora y media después, aproximadamente a las 10:04 a.m.

“Se observa pro segunda vez el ingreso del vehículo (…) Esta vez el señor Martín Vizcarra Cornejo (está) en compañía de una mujer, tal como se aprecia”. Lo constante en las imágenes, de acuerdo con lo advertido por la fiscalía, es la ausencia de personal de seguridad del estado o policías. Una cámara que da a la puerta principal captó su nuevo ingreso, esta vez acompañado por la mujer.

Respecto a esta segunda visita, las cámaras del pasillo también lo captaron “bajando las escaleras para posteriormente caminar hacia la entrada principal interior” y “retirándose (por segunda vez) de las instalaciones” del terminal. Al momento de salir, lo hizo solo, sin la persona que lo había acompañado en su ingreso y sin personal de seguridad visible.

“(Martín Vizcarra) permanece dentro de las instalaciones por aproximadamente una hora y cuarenta minutos, luego se dirige hacia su vehículo y es interceptado por un grupo de personas. Finalmente, se registra su salida del terminal”, añade la fiscalía.

De las imágenes revisadas, el Ministerio Público concluye que Martín Vizcarra Cornejo “ingresó en dos oportunidades al Terminal Terrestre de Moquegua” aquel 22 de mayo. “En su primera visita, se observa que acudió solo, sin la compañía de personal de Seguridad del Estado, permaneciendo en el lugar por aproximadamente 20 minutos. En la segunda visita, se le ve acompañado de una mujer, nuevamente sin la presencia de agentes de seguridad del Estado, y permaneció en el lugar por un tiempo aproximado de una hora con treinta y nueve minutos”.

En suma, los videos evidenciarían que Martín Vizcarra pudo desplazarse por al menos dos horas del día sin compañía de su personal de seguridad del Estado. En esa misma jornada, por la noche, su abogado dijo en una entrevista para una canal de alcance nacional que su seguridad del Estado los acompañaba las 24 horas del día y los siete días de la semana.

La fiscalía también requirió a la policía información sobre la seguridad brindado al expresidente Martín Vizcarra. Allí se dio cuenta que se le da el servicio en “modalidad semi integral”. Su seguridad está conformada por un oficial PNP como “jefe de escolta” y diez suboficiales. Incluso tiene asignado un conductor para un vehículo “seguidor”. Ninguno de ellos fue captado ese día en el terminal de Moquegua.

Más allá de la conformación, se precisa que su servicio de seguridad “se brinda de manera permanente” y que en caso de viajes fuera de Lima, se hacen coordinaciones con la dirección de Seguridad del Estado del lugar de destino. “El exmandatario viaja con o sin seguridad policial, a fin de coordinar y adoptar las medidas de seguridad en su respectiva jurisdicción policial”.

En caso de un desplazamiento a pie del expresidente en un lugar público “con afluencia de gente”, la policía precisó que los agentes se mantienen a “una distancia prudencial, realizando la cobertura de seguridad adoptando las medidas pertinentes”. Finalmente, en cuanto a los desplazamientos del expresidente en su propio vehículo, precisaron que se hacen “coordinaciones directas” con él para “considerar o no el acompañamiento de un efectivo policial”.

Para el Ministerio Público, en su pedido de prisión preventiva, todo esto ha logrado “determina objetivamente que el proceso, durante el 22 de mayo del 2025, estuvo en el terminal terrestre de Moquegua sin la compañía de efectivos policiales a cargo de brindar el servicio de seguridad y protección de manera permanente”.

Además, remarcan que lo informado por la PNP sobre cómo es el servicio de seguridad del expresidente “no se condice” con lo visto en las imágenes y que el expresidente tiene actualmente ninguna restricción para desplazarse por el país, “incluso sin seguridad del Estado”.

Con esto, infieren que hay “motivos razonables” para sostener que los agentes de seguridad del Estado asignados al expresidente “no podrían neutralizarlo” en el caso de “una eventual fuga por parte del proceso por Tacna o Moquegua, que tiene salida para Puno o Desaguadero, zonas fronterizas con Bolivia”.

Este pedido de prisión preventiva es por el caso de los presuntos sobornos de constructoras peruanas a Martín Vizcarra para asegurarse la adjudicación de obras durante su gestión como gobernador de Moquegua (2011-2014). Según la acusación, el hoy expresidente recibió 1 millón de Obrainsa por el proyecto de irrigación Lomas de Ilo y 1.3 millón de la segunda por la ampliación del hospital regional. El expresidente y su defensa niegan los cargos, por los que se piden 15 años de condena.

El caso ya está en etapa de juicio oral en un juzgado colegiado de la Corte Superior Nacional, cuya resolución aún tardará varios meses más, debido a que solo se avanza a ritmo de una audiencia por semana. No obstante, la fiscalía pidió prisión preventiva por seis meses en relación con estos mismos hechos al advertir este riesgo de fuga. Además, el próximo 4 de julio vence la única restricción judicial del expresidente: un impedimento de salida del país.

Si bien lo frecuente es que la prisión preventiva se pida durante la etapa de investigación, también es posible hacerlo durante el juicio oral . El requerimiento, sin embargo, no es atendido por el juzgado a cargo del juicio, sino por un juez de investigación preparatoria. En este caso, se trata del juez Víctor Alcócer, también de la Corte Superior Nacional.

La audiencia para discutir este pedido se programó inicialmente para este miércoles a las 11:30 a.m. Si bien el magistrado instaló la sesión ese día, decidió suspenderla hasta este jueves desde las 05:00 p.m. La decisión se basó principalmente en la ausencia de Martín Vizcarra, quien estaba en Tarapoto, región San Martín, a donde viajó para realizar actividades del partido Perú Primero y participar en celebraciones por el Día de San Juan (24 de junio).

El expresidente se conectó virtualmente a la audiencia. Sin embargo, el fiscal Germán Juárez exigió que el acusado esté presencialmente. Su defensa dijo que no se oponen a ello, pero que el expresidente estaba en Tarapoto desde días antes de pedirse la prisión preventiva y que su regreso estaba programado para este jueves a las 3:30 a.m. Además, pidió la suspensión de la sesión para que tengan más tiempo de revisar el pedido fiscal y poder presentar evidencia para contradecirlo.

El juez resolvió postergar la audiencia, pero solo por un día. El abogado del expresidente insistió en que se le dé más tiempo; pero el propio Martín Vizcarra pidió la palabra para acceder al cambio, indicando que haría todo lo posible para adelantar su vuelo y estar presente.

Según su cuenta de Facebook y la del partido Perú Primero, el 24 de junio Vizcarra estuvo haciendo actividades proselitistas de su partido y participando en bailes y celebraciones en la región San Martín por el Día de San Juan. El mismo 25, antes de conectarse virtualmente a la audiencia vistiendo el logo de su partido, difundió un video en el que atribuyó el pedido de prisión en su contra a motivaciones políticas.

Luego de la audiencia, ante una consulta de El Comercio sobre los videos citados en esta nota, el abogado Erwin Siccha respondió que “es absolutamente falso” que haya ido al terminal de Moquegua sin su personal de seguridad del Estado. “No ha ido al terminal, ha ido a una oficina pública. Lo vamos a mostrar en la audiencia”, aseguró. Además, insistió en que no hay ningún riesgo de fuga o de asilo del exmandatario y que una evidencia de ello será su presencia en la audiencia de este jueves.

“Él siempre tiene seguridad del Estado. Hay un oficio, que incluso ha sido adjuntado por el propio Ministerio Público, que da cuenta que está acompañado de manera permanente y que en las regiones mantiene una distancia prudencial. Una cosa es un video y otra cosa es lo que dicen las instituciones públicas sobre las que el señor Vizcarra no tiene ninguna influencia”.

Ante la pregunta de si ese día estuvo o no con seguridad del Estado, indicó que “es algo que tendría que demostrarse”. “La Dirección de Seguridad del Estado ha indicado que mantenían una distancia prudencial; pero más allá de ello, es falso que ha acudido a un terminal. Ha acudido a una institución pública y lo voy a demostrar en audiencia”.

Este Diario insistió en preguntarle si, de ser ese el caso, fue a esa “oficina pública” con seguridad del Estado o no. “Tendrá que discutirse mañana (este jueves, en la audiencia). Ustedes lo verán”, replicó antes de retirarse.