Ratifican pago a César Villanueva

Unidad de Investigación

La confesión de Eleuberto Martorelli, representante legal de Odebrecht en la licitación de la carretera Cuñumbuque-Zapatero-San José de Sisa cuando César Villanueva era gobernador de la región San Martín, fue la primera en esta semana de interrogatorios realizados por el equipo especial Lava Jato de la fiscalía a exejecutivos de la constructora en la ciudad de Curitiba, Brasil.

En su declaración ante el fiscal José Domingo Pérez, Martorelli ratificó que, por orden suya, durante la ejecución de la obra, el exgerente de Contratos de la constructora Ricardo Paredes entregó U$30.000 a Villanueva para su campaña de reelección al Gobierno Regional de San Martín, en el 2010.

Según informaron fuentes de El Comercio, Martorelli señaló que Jorge Barata, exjefe de Odebrecht en el Perú, estaba “al tanto de todo” y que el pago se hizo con “su autorización”. Agregó que Barata le entregó a él los US$30.000 y que este dinero se lo dio a Paredes, quien finalmente se lo entregó al ex primer ministro en una “caja negra en un café de Surco”.

De esta forma, Martorelli confirmó lo que él ya había declarado en octubre pasado, así como la versión que dio Paredes ante el fiscal Juárez hace algunas semanas. Este Diario publicó la declaración del exgerente de Contratos de la constructora, en la que admitió la entrega de US$30.000 al ex primer ministro. En su testimonio, contó que fue dentro “de una caja negra” para su campaña.

En agosto, Barata declaró ante los fiscales peruanos que entregó US$60.000 a Villanueva para ganar la licitación por la carretera San José de Sisa. En las planillas del Departamento de Operaciones Estructuradas, figura un pago de US$320.000 en total para el exgobernador.

—Más pagos—

Martorelli también confesó que de la llamada caja 2 se pagó US$100.000 para Celso Gamarra Roig, exfuncionario del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, con el ‘codinome’ de ‘Italiano’. Este monto, según narró, está incluido en los US$400.000 que figuran en la planilla para el exfuncionario. En octubre ya había emitido esta información.

El exejecutivo precisó que dio la orden a Gamarra Roig para que, “si era necesario”, pagara a los miembros del comité de licitación de la carretera San José de Sisa o a alguien del Proyecto Especial Huallaga Central y Bajo Mayo (PEHCBM) a fin de que favorezcan a la constructora.

Consideró que era “perfectamente posible” que Gamarra Roig haya entregado las bases de la licitación a Villanueva, en las que –reconoció– participó en su elaboración. Dijo que no hubo una orden directa, pero que estaba “implícito el encargo”, que era hacer “todo lo necesario” para que gane la empresa.

Sobre Marco Díaz, el exgerente del PEHCBM, contó que se acercó a él en un evento en la Embajada de Brasil y le pidió US$20.000. Aceptó pagarlo y lo hizo a través de Ricardo Paredes.

“Todas las hipótesis de investigación del fiscal Germán Juárez se han comprobado. Hay varios pagos que han sido detallados. Toda la información ha sido abundante”, declaró el jefe del equipo especial, el fiscal superior Rafael Vela.

—Descargos—

A su salida del interrogatorio, el abogado de Villanueva, Jaime Bustamante, dijo que Martorelli ratificó la entrega de US$30.000 como un aporte a su campaña, pero que no fue a nombre de la constructora. “Ratificó que eran aportes de campaña y en su declaración inicial dijo que habló con Paredes Reyes para que le diera el dinero como un aporte suyo, no de Odebrecht”, manifestó.

Bustamante negó que su patrocinado haya recibido los US$320.000, como aparece en la planilla de Odebrecht. “Esos montos estaban programados, no se pagaron”, agregó.

En comunicación con este Diario, Gamarra Roig se negó a responder a nuestras consultas. “No voy a dar ninguna declaración, estoy prohibido de dar declaraciones”.

Díaz no contestó las llamadas ni los mensajes.