Hace justamente un año, el pasado 28 de julio, en el Congreso de la República se vivió un ambiente parecido al de un estadio. Durante el tradicional mensaje a la nación por fiestas patrias, el presidente Martín Vizcarra hizo un inesperado anuncio sacudió el panorama político nacional: la propuesta de adelanto de elecciones.
El discurso llevaba más de una hora y 20 minutos. El jefe de Estado había enumerado tanto los avances hechos por su gobierno en el último año como las metas trazadas hacia adelante. Fue recién durante los últimos 15 minutos del mensaje que el jefe de Estado abordó el tema de la inmunidad parlamentaria y los ánimos se agitaron en el hemiciclo.
“Nos preocupa que el Congreso haga caso omiso al clamor ciudadano, manteniendo esta competencia (el levantamiento de la inmunidad parlamentaria) dentro de su fuero, reduciendo únicamente los plazos para el trámite. Señores, el problema no es solo la demora, sino que la solicitudes de levantamiento de inmunidad vienen siendo rechazadas sin ningún sustento. Es inadmisible que alguien, solo por ser congresista, no pueda ser juzgado”, manifestó Vizcarra.
Tales fueron las pifias y el desorden provenientes de las tribunas del Congreso que, pese a la llamada al orden por parte del entonces presidente del Parlamento, Pedro Olaechea, Vizcarra se vio obligado a interrumpir, en más de una ocasión, su mensaje.
Una vez que el mandatario hizo referencia al supuesto reclamo que dijo recibir de la ciudadanía con respecto al cierre del Parlamento, las protestas del hemiciclo se intensificaron. Sin embargo, a los gritos se sumaron también aplausos de las bancadas de izquierda y afines al gobierno.
“He recorrido el país de punta a punta en el último año y debo ser claro: no hay lugar en el Perú donde no haya recibido el reclamo de ‘presidente, cierre el Congreso’. ¿Alguien podría creer que esto es una simple coincidencia? Con la representatividad colapsada, fruto de la crisis política, hoy los peruanos no se sienten representados. Por lo que debemos, señores congresistas, hacernos cargos de esta realidad. La situación tiene que cambiar. No queremos frenar el crecimiento del país ni frenar la inversión, ni quebrar la confianza de los peruanos una vez más. No podemos seguir dándole la espalda al Perú”, exclamó ante el Legislativo.
Tras anunciar la iniciativa de adelanto de elecciones, integrantes de la bancada de Fuerza Popular se pusieron de pie en señal de protesta y arengaron la frase “¡fuera, fuera, dictador!”. Los ministros de Estado, también de pie, aplaudieron al presidente.
“Hoy propongo a este Parlamento quizás su mayor reto en todo el periodo congresal y les exhorto a hacernos cargo de esta realidad, teniendo todos un acto de dignidad y reivindicación por el país. Por todo lo mencionado, propongo una salida a esta crisis institucional. Presento al Congreso una reforma constitucional de adelanto de elecciones que implica el recorte del mandato congresal al 28 de julio del 2020”, anunció Vizcarra.
Una escena que acaparó las cámaras mostró a la congresista fujimorista Luz Salgado enseñando la Constitución Política del Perú con una mano, mientras hacía un gesto de desaprobación con la cabeza.
Luego de que el jefe de Estado se retirase del hemiciclo en medio de gritos de protesta y aplausos de apoyo, el presidente del Congreso brindó una conferencia de prensa en la que acusó a Vizcarra Cornejo de haber colocado al país en una situación de inestabilidad y conflicto.
“Una vez más, el presidente de la República ja puesto al país en una situación de incertidumbre e inestabilidad, con lo cual ha generado una situación de mayores condiciones de conflicto político”, manifestó Pedro Olaechea.
Como respuesta a la iniciativa planteada por Vizcarra, el presidente del Parlamento, además, aseguró que el Parlamento defendería la institucionalidad del Congreso y del sistema constitucional.
“Anunciamos que, sea cual sea la fórmula que adopte el Ejecutivo, el Congreso procederá dentro del marco constitucional vigente, la verdad y el respeto de los principios democráticos. No nos aferramos a nuestros cargos, pero defenderemos la institucionalidad del Poder Legislativo, la Constitución y el sistema democrático”.
Impacto popular
Luego de anunciar la propuesta de adelanto de elecciones en el discurso de 28 de julio del 2019, la aprobación de Martín Vizcarra pasó de 44% a 57%, según una encuesta de Ipsos publicada en agosto de aquel año. Su desaprobación, además, bajó de 45% a 34%.
Por otro lado un 75% señaló respaldar la medida de adelanto de elecciones y 56% estuvo de acuerdo con que el presidente haga cuestión de confianza en caso no se aprobase la iniciativa, y que decida cerrar el Congreso en caso la confianza fuera rechazada.